Los obstáculos son regalos creativos

Siempre sucederán cosas inesperadas, cambiará el escenario y deberemos hacer un giro, modificar los planes, renunciar a algunos objetivos y abrazar nuevos

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El gran aprendizaje es ver cada obstáculo como un regalo, una oportunidad para crecer o aprender algo nuevo | Foto: Remitida
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Siempre habrá obstáculos. Sucederán cosas inesperadas, cambiará el escenario y deberemos hacer un giro, modificar los planes, renunciar a algunos objetivos y beneficios y abrazar nuevos.

No es que nos gusten las piedras en el camino, pero en los tropiezos uno se da cuenta de lo que es capaz: así se forja y se revela nuestro carácter. Si permanecemos en la queja o tiramos la toalla, nunca sabremos hasta dónde podríamos haber llegado. Y creo que el arrepentimiento más doloroso es mirar hacia atrás y comprobar que no hicimos el esfuerzo suficiente y que abandonamos antes de tiempo. Al fin y al cabo, si estamos en el camino de nuestro propósito, el mismo viaje, por dificultoso que sea, debería proporcionarnos energía para seguir.

Nada en sí mismo, decían los filósofos estoicos, es símbolo de mala suerte o es poco auspicioso, ni siquiera un obstáculo en el camino hacia tu meta. Cuando te enfrentes a un tropiezo o algo que retrasa o impide tu avance, simplemente velo a la inversa y hazte algunas preguntas:

1. ¿Qué es lo que quiero crear en el mundo y cuán importante es para mí?
2. Si renuncio, ¿seré más o menos feliz por no tener esto en mi vida?
3. ¿Qué puedo aprender de este tropiezo? Interprétalo como una señal de que hay algo importante que puedes obtener de esa situación. Tal vez, incluso, algo que mejorará aún más tus planes, que te fortalecerá.
4. ¿Puedo recurrir a alguien que me ayude en este momento? ¿Un mentor, un coach?

El gran aprendizaje es ver cada obstáculo como un regalo: una oportunidad para crecer, aprender algo nuevo, agudizar tu mirada y creatividad. Pruébalo hoy con los pequeños traspiés del día. Es mejor practicarlo cuando las cosas van razonablemente bien, para estar preparado mentalmente para los momentos de gran estrés o ansiedad.

● Acepta y atraviesa la incomodidad. Te hará más fuerte. Es como ir al gimnasio, pero en lugar de usar pesas para fortalecer tus músculos usarás las vicisitudes del día como ejercicio de resistencia. Incomódate con pequeñas cosas. Coge las escaleras en lugar del elevador, aparca un poco más lejos de lo usual, camina en vez de ir en coche, disfruta del paisaje o de lo que haces en lugar de mirar tu móvil.

● Ve el obstáculo como un regalo. Como dice el profesor de improvisación de la Universidad de Stanford, Dan Klein, cada error, cada traspié es un regalo creativo. El universo te está dando la oportunidad de crear algo con ello. Los obstáculos están aquí para servirte, para ayudarte a crecer, para desarrollar tu carácter, para hacerte más resiliente.

● Recuérdate: ¿quién dijo que sería fácil? Frente a la adversidad, simplemente hazte cargo de tu papel y juega el juego.