Lee poesía

¿Sientes que has perdido la dirección de tu vida? Lee poesía. ¿Te asusta tu fragilidad? Busca consuelo en la poesía. ¿Te pesa el sufrimiento humano? Lee, lee poesía.

Mientras que en Occidente hemos sospechado vagamente que la poesía es beneficiosa para el alma, en Oriente, en cambio, la poesía es, y ha sido desde hace milenios, una herramienta para comprender el mundo y una guía para desarrollar la fortaleza y la paz interior.

Nos hemos dejado intimidar por la idea de que la poesía es pretenciosa, y el poeta, un vanidoso. La poesía, nos convencimos ingenuamente, es para exhibir la inteligencia o un arma para la protesta social y política.

Pero la poesía es mucho más que eso; es el epítome de lo terrenal y lo mundano. El gran maestro del haiku, Matsuo Basho, que se definió a sí mismo como un "mero observador de la vida", nos recuerda que, si vemos y escuchamos por nosotros mismos, si penetramos la superficie de las cosas, todo hablará con nosotros y a través nuestro.

Y eso es poesía. La poesía ilumina lo común y lo hace extraordinario. Contiene verdades. Como en este haiku en el que Basho vislumbra ya su propio ocaso al fin de la jornada:

'A este camino
ya nadie lo recorre
salvo el crepúsculo.'

O este, en el que el poeta argentino Oliverio Girondo se desdobla y se deshace de sí mismo, porque ya el peso le es insoportable:

'Al llegar a una esquina, mi sombra se separa de mí,
y de pronto se arroja entre las ruedas de un tranvía.'

La poesía es sanadora. La ciencia ha demostrado que es una poderosa herramienta terapéutica. Puede ayudar a quienes han atravesado traumas y grandes períodos de estrés a mejorar su salud mental a través de terapias de lectura y escritura. La poesía nos ayuda a reconocer nuestras emociones, reducir su intensidad y darle perspectiva a los momentos difíciles. Incluso, a veces, nos atraviesa al punto de transformarnos para siempre.

¿Lees poesía? Todo se trata, al fin y al cabo, de encontrar la poesía que te guste.

'Si vas a intentarlo, ve hasta el final.
Esto puede significar perder novias,
esposas, parientes, trabajos y, quizá, tu cordura.'

'Si vas a intentarlo, ve hasta el final.
No hay otro sentimiento como ese.
Estarás a solas con los dioses
y las noches se encenderán con fuego.
Hazlo, hazlo, hazlo.
Hazlo.
Hasta el final,
hasta el final.'

Charles Bukowski.