El PSOE, el 8M y su doble discurso
En estos días en los que celebramos el 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, ha vuelto a ocurrir. De nuevo, la izquierda andaluza ha retirado del orden del día del próximo Pleno una alusión a la Ley del 'Solo Sí es Sí' inserta en una Proposición No de Ley del Partido Popular sobre igualdad y lucha contra la violencia de género. PSOE, Por Andalucía y Adelante Andalucía han vuelto a vetar el debate argumentando, de nuevo, que el asunto invadía una competencia exclusiva del Estado y era por tanto contrario al reglamento de la Cámara en su artículo 171.
En la Cámara Autonómica está ocurriendo lo que nunca había pasado hasta ahora. Se ha secuestrado el debate político en el Parlamento andaluz con el único objetivo de impedir que se debata sobre las barbaridades que están ocurriendo a consecuencia de las decisiones legislativas del presidente del Gobierno Pedro Sánchez con el apoyo de sus socios de legislatura.
Una Proposición No de Ley del PP instaba a la Cámara a rechazar los efectos indeseables y las graves consecuencias que ha ocasionado la entrada en vigor de la Ley de Garantía Integral de Libertad Sexual, más conocida como la Ley del ‘Solo Sí es Sí’. Asimismo, defendía la necesidad de garantizar la seguridad jurídica y el castigo que las víctimas y la sociedad exigen para los agresores sexuales y la exigencia inexcusable de que se asuman y depuren responsabilidades políticas por las nefastas consecuencias derivadas de su aprobación.
Con una maniobra de trilerismo político, los socialistas han invocado un artículo del reglamento de la Cámara, el art. 171 que nunca se había usado en la historia del Parlamento de Andalucía para rechazar una iniciativa del PP, que cuenta con mayoría absoluta en la Cámara. De este modo la izquierda andaluza ha impedido que se debata en sede parlamentaria sobre los efectos que esta ley está teniendo sobre las mujeres andaluzas, cuando ésta es una de las mayores preocupaciones que hoy en día tiene nuestra sociedad.
Muchas mujeres víctimas de abusos o agresiones sexuales han acudido ya a las sedes del Instituto Andaluz de la Mujer (IAM) para pedir apoyo y asesoramiento ante la incertidumbre y el desasosiego que los efectos de esta ley ha creado en ellas. Al dolor y trauma de haber sido víctima de una agresión sexual hay ahora que sumarle la incertidumbre que produce el desconocer si el autor de esta agresión va a recibir algún tipo de beneficio penitenciario, consecuencia de esta nueva ley chapuza que se ha aprobado recientemente en España.
De eso es de lo que se pretendía hablar en sede parlamentaria, pero el PSOE andaluz junto con el resto de los grupos de izquierdas, han puesto por encima los intereses de sus respectivos partidos en el Gobierno de España frente a la unidad que un día como el 8 de marzo requiere.
En este último rechazo, junto al ataque a la libertad parlamentaria que se ha llevado a cabo, nos encontramos con un desprecio absoluto hacia las mujeres y hacia el debate que hoy está presente en la sociedad coincidiendo todo esto lamentablemente con el 8 de marzo.
