El último Miranda

1) 71-01-17 Último chiste de Miranda
Último chiste de Miranda en Ideal, de fecha 17/01/1971 | Foto: J. L. R.
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Este chiste que aquí vemos fue el último de los más de diez mil que Miranda publicó en Ideal a lo largo de los 39 años que perteneció a la plantilla del diario granadino. Es de fecha 17 de enero de 1971 y tiene la particularidad de que no se insertó en la última página, sino que apareció en la sección de deportes, justo debajo de una extensa entrevista a Miguel Muñoz que firma el reportero Gave. Se refiere la viñeta al precio de la entrada más barata, 150 pesetas (una barbaridad para lo que era normal por entonces) que había que desembolsar para poder asistir esa misma tarde en Los Cármenes al partido Granada-Real Madrid. Ya lo hicimos en un artículo anterior, pero creo que conviene recordar a los más jóvenes que el Real era una antigua moneda española, ya entonces sin curso legal, que equivalía a 25 céntimos de peseta.

Con todo el papel vendido en día del club, los pupilos de Joseíto en la jornada 18 (de 30) de la liga 70-71 recibían al Madrid de Miguel Muñoz, que marchaba cuarto clasificado, a tres puntos del líder Valencia, que acabaría campeón. El Granada, cinco puestos más abajo, era el 9º, que fue la posición que más veces ocupó en esta plácida liga (para nuestro equipo), en la que acabó 10º sin que en ninguna de sus 30 jornadas se viera amenazado de descenso.

Llovió fuerte antes de empezar el duelo y durante su desarrollo, y el césped presentaba numerosos charcos y un aspecto achocolatado que hacía que pronto no se distinguieran las indumentarias de ambos equipos, teñidas de marrón. Nuestro equipo, con la importante baja de Ñito, alineó a Blas; De la Cruz, Barrenechea, Lorenzo; Santos, Fernández; Lasa, José, Barrios, Fontenla y Vicente. Es el embrión del gran Granada de Joseíto que a la temporada siguiente conseguirá su mejor clasificación histórica y merecerá el título de 'matagigantes'. Por el Madrid jugaron: Borja; José Luis, Benito, Sanchís; Pirri, Zoco; Miguel Pérez, Amancio, Fleitas, Velázquez y Bueno. Ninguno de los dos contendientes realizó cambio alguno. Un gol de Lasa a puerta vacía en la primera mitad y otro de Vicente en la segunda, de gran tiro desde fuera del área ante el que el meta Borja hizo el Don Tancredo, certificaron la victoria rojiblanca, la tercera de la historia en liga sobre el todopoderoso equipo merengue, que no caía derrotado en Los Cármenes desde 1942. Tanto la prensa madrileña como la granadina destacaron el gran partido del Granada y lo justo de su victoria. Sólo Hoja del Lunes de Madrid puso un pero, referido al primer gol rojiblanco: según el semanario madrileño hubo falta previa de Barrios al guardameta, pero para la prensa local está meridianamente claro que lo que originó que el balón quedara suelto y lo aprovechara Lasa para marcar fue un choque de Benito con su portero. Para Fernández de Burgos en Ideal, el Granada fue mejor e incluso mereció ganar por más diferencia, y el árbitro aragonés Martín Álvarez dejó sin sancionar una clarísima mano de Zoco en el área merengue.

A continuación del partidazo entre Granada y Madrid dio comienzo el choque entre el Recreativo y el Jaén, jornada 20 del campeonato de liga de 3ª división, grupo IV, una Tercera equivalente a la 2ª B que existió hasta la temporada pasada, integrada por sólo cuatro grupos de 20 equipos. Entrenado por segunda temporada por Emilio Aldecoa, no pudo el filial repetir la buena campaña anterior y acabó descendiendo a Regional. Si mal estaba el terreno de Los Cármenes, después del partido de los 'grandes' quedó convertido en un auténtico patatal sobre el que empataron a un gol Recreativo y Jaén. En las despobladas gradas eran más los hinchas del equipo visitante.

Otro chiste de Miranda, éste de fecha 30/12/1970.

Otro chiste de Miranda, éste de fecha 30/12/1970.

Como decíamos más arriba, la caricatura que encabeza este escrito fue la última que los lectores de Ideal pudieron ver con la firma de Miranda. Pocos días antes, el 30 de diciembre de 1970, publicaba el rotativo granadino esta otra viñeta bajo el título Pesimismo, que no es de tema futbolero: "-Gozamos de buena salud", dice el primer personaje; "-Sí. Pero el año nuevo termina con uno…", responde el segundo. Ese uno no es otro que el propio José María Miranda, quien padecía una enfermedad renal que le traía a mal vivir y ya intuía que el final estaba cerca. El 3 de febrero de 1971 moría a los 65 años de edad este gran dibujante y humorista.

Otro personaje con relevancia en la historia del Granada CF murió también por estas fechas, concretamente cuatro días antes del partido en Los Cármenes entre el Granada y el Madrid, el 13 de enero de 1971. Se llamaba José Antonio Fernández González, pero toda Granada, futbolera o no, lo conocía como 'Antoñico', y era una especie de mascota humana del club y su afición, quizás el único forofo del Granada en toda su historia que entraba siempre al fútbol por la cara (literalmente), porque los porteros tenían órdenes de dejarlo pasar gratis a todos los partidos. "Un hombre que ha gozado los triunfos y llorado las derrotas del equipo rojiblanco. Era una figura muy popular por su bondad y siempre inspiró los sentimientos de todas las personas por su deficiencia mental". […] "Se conocía todas las alineaciones del Granada, de muchos años atrás y, dentro de su pobreza y ser minusválido, fue hombre de dignidad", podía leerse en la nota necrológica aparecida en Ideal al día siguiente de su muerte. Tenía sólo 36 años y no se le conocía más talento ni oficio que su incondicionalidad hacia los colores rojiblancos. El Granada CF aportó una corona mortuoria y el presidente Cándido Gómez acudió a su entierro acompañado de parte de su directiva.

Antoñico era imbécil de nacimiento, pero tuvo su momento de gloria sobre el césped de Los Cármenes con ocasión de un partido de fútbol (bufo), en mayo de 1957, para recaudar fondos en beneficio de los damnificados por el terremoto de Atarfe y Albolote de un año antes. Con una gran entrada en las gradas, se enfrentaron los equipos Apisonadora CF y CD Esqueleto, o sea, una charlotada balompédica, gordos contra flacos, dos equipos de aficionados improvisados para la ocasión. Hubo momentos de gran comicidad -dice la reseña del acontecimiento-, sobre todo en las intervenciones de Antoñito [sic], ariete de los flacos, quien se lució en el lanzamiento de un penalti y al finalizar el choque fue sacado del estadio en hombros, y además se embolsó las mil pesetas que ofrecía un comercio patrocinador. El gran Antonio Lasso (qepd), que asistió al evento, me contó que el penalti hubo que repetirlo varias veces porque Antoñico no atinaba a darle al balón ni a la de tres, y cuando por fin lo consiguió y marcó (con la colaboración del guardameta contrario) le llovieron desde las gradas sombreros, puros y muchas más cosas.

Gordos contra flacos, partido bufo jugado en mayo de 1957. Antoñico es el segundo por la izquierda, agachado, del equipo de abajo.

Gordos contra flacos, partido bufo jugado en mayo de 1957. Antoñico es el segundo por la izquierda, agachado, del equipo de abajo.

El año 1971 se estrenó en Granada con toda la ciudad cubierta de nieve y con un frío intensísimo que llevó el termómetro hasta los -13 la madrugada del día de la Toma, 2 de enero. La gran nevada se produjo el 28 de diciembre, blanqueando las navidades como en la famosa canción, el mismo día en que se daban a conocer las seis penas de muerte que contenía la sentencia con que concluyó el Proceso de Burgos, que algunos historiadores señalan como el principio del fin del franquismo. Pocos días después volvió a caer la nieve de forma abundante. Al principio se pudo hablar de panoramas idílicos, pero pasada una semana los montones congelados de nieve negruzca apilada en cualquier rincón, visibles por toda la ciudad, para nada inspiraban la vena poética penibética, más bien lo contrario, aparte de los resbalones y caídas que a diario significaban la visita a la Casa de Socorro de más de una veintena de paisanos. Hasta se hizo obligatorio algún día el uso de cadenas para los vehículos que subían a la Alhambra o el Albaicín, y la Fuente de las Batallas batió récords en cuestión de tamaño y abundancia de chupones helados desbordándose por sus tazas. Además, el partido Granada-Elche corrió riesgo de ser suspendido por estar cubierto Los Cármenes de nieve, que fue retirada a puro paletazo pocas horas antes del comienzo. Y es que este 1971 fue pródigo en nieves (no sabemos si también en bienes) y aún quedaba una última nevisca, insólita ésta por ocurrir a pocos días de la entrada de la primavera, el 8 de marzo.

El frío polar con que se estrenó 1971, obviamente, no fue algo exclusivo de este rincón de la Piel de Toro. En otras latitudes peninsulares se acercaron a los 20 grados negativos en los primeros días de enero. Incluso fuera de nuestras fronteras también se dejaba notar el meteoro glacial, como en Glasgow, cuando en una tarde de perros, la del 2 de enero, bajo la nieve y la lluvia ocurría el que se llamó “Desastre de Ibrox Park”, saldado con 66 vidas y más de 200 heridos, aunque en la escabechina no influyera directamente lo gélido del ambiente.

Asimismo, tampoco fue exclusivo de los granadinos el afrontar el año nuevo bajo la suspensión del artículo 18 de la cuasi constitución franquista llamada Fuero de los Españoles ("Ningún español podrá ser detenido sino en los casos y en la forma que prescriben las Leyes. En el plazo de setenta y dos horas, todo detenido será puesto en libertad o entregado a la Autoridad judicial"), suspensión que se mantendrá en todo el territorio nacional hasta el mes de junio. O sea, entró 1971 bajo un estado de excepción -otro más-, aunque bien mirado, hablar de “Estado de Excepción” durante el franquismo no sea otra cosa que una redundancia.

La foto es del partido Madrid-Granada de la primera vuelta, en el Bernabéu, pero lo forman los mismos que jugaron contra los merengues en Los Cármenes: Blas, De la Cruz, Barrenechea, Fernández, Santos y Lorenzo; Lasa, José, Barrios, Fontenla y Vicente.

La foto es del partido Madrid-Granada de la primera vuelta, en el Bernabéu, pero lo forman los mismos que jugaron contra los merengues en Los Cármenes: Blas, De la Cruz, Barrenechea, Fernández, Santos y Lorenzo; Lasa, José, Barrios, Fontenla y Vicente.