Las emociones positivas, fuente de bienestar físico y mental
Las emociones positivas nos brindan sensaciones placenteras. Entre las más destacadas se encuentran la gratitud o el entusiasmo.
En ocasiones, ganan los sentimientos negativos como la melancolía, el temor, el enojo o el remordimiento, que nos afectan y nos desmotivan.
Asimismo, a veces caemos en rutinas que nos alejan de los pequeños placeres diarios. Y sin duda, es bueno estar rodeados de aspectos positivos, que nos permitan desarrollar acciones para no desfallecer con facilidad ante los malos momentos y para poder facilitar tener los mejores momentos, cómo por ejemplo, practicar la atención plena, expresar gratitud, cultivar el optimismo, buscar el sentido del humor, disfrutar de nuestras aficiones, practicar la amabilidad o conectarse con la naturaleza.
1. Practicar la atención plena
La atención plena es capaz de fomentar emociones positivas, al tener ventajas para el bienestar mental y emocional. Esto implica estar atentos al momento que vivimos.
La finalidad es identificar y acoger nuestras emociones, pensamientos y comportamientos tal y como surgen, enfrentándolos con interés y sin juzgar. Al adoptar esta práctica, logramos conectar de manera más íntima con nuestras emociones positivas, lo que nos lleva a vivir con una sensación de plenitud.
Tomar unos instantes para atender nuestro ambiente, a través de nuestros cinco sentidos, puede resultar un cambio en nuestra perspectiva.
2. Expresar gratitud
Agradecer es una sensación positiva que surge al reconocer y valorar las ventajas y alegrías de nuestra vida. Por tanto, cultivar la gratitud conlleva importantes beneficios para nuestro bienestar mental y emocional.
Las personas que experimentan la gratitud suelen sentirse más felices y optimistas. Por esta razón, es fundamental para potenciar las emociones positivas.
Esta perspectiva fomenta un círculo virtuoso de bondad, lo que lleva a sentir gratitud y a actuar de manera más generosa y desinteresada. A nivel social, sirve como un nexo, ya que mejora y fortalece nuestras relaciones e interacciones con otros. Mostrar agradecimiento a quienes han influido de manera positiva en nosotros es de gran valor.
Ser bondadosos con los demás, sin esperar retribución, es una poderosa representación de la gratitud en movimiento.
3. Cultivar el optimismo
Se trata de una perspectiva de vida centrada en esperar lo mejor y confiar en un futuro alentador. No es solo querer buenos desenlaces, sino tener una profunda fe en nuestra habilidad innata para enfrentar retos y vencer obstáculos.
A lo largo del tiempo, múltiples estudios han analizado la influencia del optimismo en la salud y el bienestar, con diversos beneficios tanto físicos como mentales. A raíz de este impacto positivo, el optimismo se convierte en una herramienta esencial para aumentar las emociones positivas.
El acto de pensar de manera optimista consiste en sustituir ideas y percepciones que nos limitan por visiones más equilibradas y esperanzadoras. La clave: “Esto es complicado, pero lo superaré y sacaré una lección de ello”.
Reconocer y festejar los avances, incluso si son menores, potencia nuestra seguridad y nos impulsa a continuar. De igual manera, estar en compañía de personas positivas y dotadas puede inspirarnos, al fortalecer nuestra esperanza y capacidad de recuperación.
4. Buscar el sentido del humor
A través de la perspectiva humorística, conseguimos afrontar obstáculos con un enfoque diferente. Esto permite liberarnos del estrés y reducir preocupaciones, ya que la risa estimula la liberación de endorfinas, las cuales están vinculadas a la felicidad. Además, se encontró que, en general, el sentido del humor mejora el bienestar subjetivo.
El optimismo, no solo eleva nuestro ánimo, sino que también revitaliza nuestro sistema inmunitario, optimiza la oxigenación corporal y refuerza nuestra tolerancia al dolor.
En consecuencia, no olvidemos que el sentido del humor representa un elemento esencial para vivir de manera saludable, armónica y satisfactoria.
5. Disfrutar de nuestras aficiones
Las actividades que nos apasionan y que realizamos con placer son las que llamamos aficiones. Entre ellas están leer, escribir, pintar, tocar un instrumento, bailar, cocinar, practicar deporte o viajar. Sin embargo, cada quien está en la libertad de escoger las que más se acoplen a sus gustos.
En este sentido, es recomendable que reservemos momentos determinados para que nos sumerjamos en nuestros intereses y saquemos el mayor provecho de nuestro tiempo. De hecho, se indica que las actividades de ocio placenteras se asocian con una mejor salud y bienestar.
En la actualidad, con el apoyo de la tecnología y plataformas digitales, es más fácil unirse a comunidades, grupos o personas que se emocionan por las mismas cosas, ya sea de manera presencial o en línea.
6. Practicar la amabilidad
Al ser amables, no solo generamos un ambiente positivo a nuestro alrededor, sino que también creamos un espacio donde las personas pueden sentirse apreciadas y escuchadas.
Por ello, se recalca el hecho de que ser amable ofrece ventajas para la salud, dado que nos brinda una sensación de plenitud y gratificación que refuerza nuestra confianza en nosotros mismos.
De igual manera, la amabilidad estimula la empatía, lo que permite ponernos en los zapatos de los demás y así comprender y valorar sus emociones y puntos de vista.
Los pequeños gestos, como sonreír, saludar con sinceridad, prestar atención cuando alguien nos habla, reconocer las cualidades y esfuerzos de los demás u ofrecer ayuda cuando vemos que alguien la necesita pueden marcar una gran diferencia en el día de alguien.
Estas acciones no solo benefician a quienes reciben la ayuda: nos enriquecen como personas.
7. Conectarse con la naturaleza
La naturaleza y las emociones positivas, como la felicidad, tienen una relación bastante íntima. Por tanto, para potenciar las emociones positivas y conectarnos con la naturaleza, podemos salir al aire libre y disfrutar.
Hay varias formas de potenciar las emociones positivas y de cambiar varios aspectos que no marchen bien en tu vida. La actitud es un punto clave en esta tarea, dado que con ella podemos enfocarnos y ser constantes con nuestros propósitos.
De seguro, con el tiempo notaremos los beneficios en la salud física y mental, lo que nos ayudará a tener un mejor desempeño en diferentes facetas de nuestra vida. Hagamos el cambio hoy. Recordemos que HOY es el presente y el presente es un regalo. Regalémonos una actividad positiva con h-alma.