Organizaciones en defensa de los derechos humanos convocan una concentración en la Caleta este sábado

La Red Granadina por el Refugio y la Acogida (RedGra), que está integrada por numerosas organizaciones sociales de la ciudad, han anunciado su “adhesión a las actividades del Plan de Choque Social de Granada para denunciar la situación de las personas refugiadas”. Así, en el Día mundial de las personas refugiadas, se suman a la concentración convocada para este sábado 20 de junio en la Plaza de la Caleta, a las 20:00 horas.

Según las organizaciones que integran la RedGra, no se puede aceptar "que el estado de alarma suponga recortes de los derechos de las personas refugiadas”, por lo que exigen que la transición a la "nueva normalidad" traiga también “la superación y el olvido de muchas actuaciones en relación a las políticas de asilo y refugio desplegadas tanto en la Unión Europea como en España en la antigua normalidad".

Por esta razón, instan a todas las Administraciones Públicas implicadas en la materia a que “aumenten las plazas de reasentamiento para facilitar la llegada de personas desde otros países, especialmente desde Turquía, donde permanecen atrapadas 4.000.000 de personas refugiadas”. De igual modo, solicitan que “se aceleren los procesos burocráticos que garantizan la protección internacional de las personas refugiadas, ya que miles de expedientes de solicitud de asilo permanecen atascados en espera de resolución”.

Además, exigen que se flexibilicen los requisitos y tiempos de aprobación de los programas de reagrupación familiar, así como la mejora de los recursos de acogida de las personas refugiadas, “con ampliación de las plazas y de los planes de integración”. Desde la RedGra aseveran que “se debe garantizar a las personas migrantes la posibilidad de solicitar la protección internacional de forma real en las fronteras, de forma especial en las fronteras de Ceuta y Melilla”.

Por último, en cuanto al actual debate en el Tribunal Constitucional sobre las devoluciones en caliente, instan al “cese definitivo de esta práctica, ya que es contraria a los derechos humanos que impide el derecho de las personas a solicitar protección internacional”.