La Orquesta Ciudad de Granada inaugura su temporada con 'Capricho ruso'
Al frente de la OCG estará el joven director iraní Hossein Pishkar, ganador de dos de los más prestigiosos concursos alemanes de dirección orquestal
La Orquesta Ciudad de Granada inicia su temporada de abono los días 4 y 5 de octubre con un programa titulado 'Capricho ruso', al frente del cual estará el joven director iraní Hossein Pishkar, que sustituye a Giancarlo Andretta, inicialmente programado. Hossein Pishkar estaará por primera vez al frente de una orquesta española. El iraní ha sido ganador de dos de los más prestigiosos concursos alemanes de dirección orquestal: el Deutscher Dirigentenpreis, un concurso internacional organizado en cooperación con importantes instituciones musicales de Colonia y la Westdeutscher Rundfunk (WDR), y el Ernst-von-Schuch-Preis, presentado anualmente en colaboración con el Dirigentenforum.
El programa 'Capricho ruso', que ofrecerá la OCG en el Auditorio Manuel de Falla a las 20:30 horas, muestra las relaciones musicales ruso-españolas, en este año del centenario del estreno de 'El sombrero de tres picos' de Falla, por los ballets rusos de Diaghilev. El Capricho español de Rimski-Korsakov, “una verdadera España rusa, de una presunción sonora absolutamente delirante…”, la sensualidad oriental del 'Preludio y danza de las esclavas persas' de la ópera Kovanschina, de Mussorgsky, y la profundamente emotiva y romántica 'Sinfonía núm. 5' de Chaikovski conforman este programa inaugural. Estos conciertos cuentan la colaboración del grupo La Borraja.
La mutua admiración entre Falla y el ruso Strawinski es otra muestra más de esa afinidad, y la adaptación del Canto de los remeros del Volga que hace Falla en 1922 destinando los derechos a los refugiados rusos desplazados en la segunda guerra mundial. El Capricho español op. 34 sigue a las fantasías españolas de Glinka, y Rimski-Korsakov expresa en él la afinidad de temperamentos ruso-españoles. Utilizó Ecos de España, colección de cantos y bailes populares recopilados por José Inzenga, editada en Barcelona (1874). El Capricho español se estrenó con enorme éxito el 5 de octubre de 1887 en San Petersburgo dirigido por Rimski, y posteriormente en la Exposición Universal de París (1889) siendo calificado como «una verdadera España rusa, de una presunción sonora absolutamente delirante...››.
Modest Musorgski, integrante de los Cinco, es quien mejor describe el alma rusa. Autodidacta, dejó obras inacabadas, como su ópera Kovanshchina, en cinco actos que trata del Zar Pedro I el Grande y su llegada al poder a fines del siglo XVII, con la oposición del príncipe boyardo Iván y su hijo Andréi Kovansky, de cuyo apellido procede el título de la obra. Inconclusa por la prematura muerte de su autor, hubo de terminarla Rimski-Korsakov, que también revisó su Boris Godunov. En enero de 1874 -escribe Rimski- “Mussorgski trabajaba en Kovanshchina [...], entre los fragmentos que el autor interpretaba en la reunión, el que más gustó fue la Danza de las esclavas persas, que ejecutaba a las mil maravillas». El Preludio es la “Introducción” del primer acto de la ópera y es un poema sinfónico que describe el alba sobre el río Moscova, un paisaje tranquilo que se va animando con el transcurso del día, plasmándolo en cinco variaciones melódicas, armónicas y ornamentales sobre un tema popular ruso. La Danza de las esclavas persas se interpreta a continuación del Preludio, pero pertenece al cuarto acto.
La Sinfonía número 5 en Mi menor, opus 64, de Piotr Ilitch Chaikovski, fue estrenada en San Petersburgo bajo su dirección el 5 de noviembre de 1888. No triunfó hasta el año siguiente en Hamburgo ante un entusiasta auditorio. Allí se reencontró con Brahms, conocido el año anterior. No existe programa completo de la Sinfonía, pero Chaikovski dejó algunas anotaciones: «Introducción. Sumisión total ante el destino o, lo que es igual, ante la predestinación ineluctable de la providencia. Allegro I. Murmullos, dudas, reproches. II. ¿No valdría más entregarse por completo a la fe? El programa es excelente si consigo llegar a realizarlo». Sobre el segundo movimiento, Andante cantabile con alcuna licenza, señala el contraste entre un tema que denomina «consuelo›› y «rayo de luz» y una respuesta en los instrumentos graves con la anotación «No, ninguna esperanza.» El Allegro moderato es un vals sereno agitado en su parte central con un reiterado staccato en la cuerda y las maderas. El tema cíclico, impresionante y de tristeza contenida, aparece poco antes del final, el Andante maestoso-Allegro vivace comienza con el tema del principio totalmente transformado, siguiendo la práctica de Liszt, convertido en un coral en modo mayor. La coda repite el tema pero en modo mayor, convertido en un himno triunfal a cargo de los metales. Puede interpretarse como pesimista, por el triunfo del destino, u optimista, por el triunfo de la fe religiosa. Ustedes interpreten lo que mejor les parezca. En cualquier caso, estamos ante una música profundamente emotiva y romántica.
Sobre el joven director iraní Hossein Pishkar
El joven director iraní Hossein Pishkar reside en Alemania desde 2012. Su carrera empezó una nueva y significativa etapa cuando en 2017 ganó dos concursos: el prestigioso Deutscher Dirigentenpreis, un concurso internacional organizado en cooperación con importantes instituciones musicales de Colonia y la Westdeutscher Rundfunk (WDR), y el Ernst-von-Schuch-Preis, presentado anualmente en colaboración con el Dirigentenforum.
En la temporada 2019-2020, Hosseim Pishkar debutará como director invitado con la Beethoven Orchester Bonn, Bremer PHilharmoniker, Nürnberger Symphoniker, Slovenian Philharmonic Orchestra, Württembergisches Kammerorchester Heilborn y con la recién fundada Orchestra Fiarmonica Vittori Calamani. También volverá a visitar la Düsseldorf Symphony, WDR Symphony y la Royal Danish Opera, donde dirigirá la producción de ballet de la Tercera sinfonía de Mahler. En la Orquesta Staatsoper Hannover dirigirá la reinterpretación de la producción Aida de Verdi. También ha dirigido otras formaciones de prestigio como la Deutsche Staatsphilharmonie Rheinland-Pfalz, Cherubini Orchestra, Orchestre Philharmonique de Strasbourg, St. Michel Strings in Mikkeli, Sttatskapelle Halle y la Staatsorchesters Stuttgart. Una de sus últimas direcciones a destacar fue Rigoletto de Verdi, con Cristina Mazzavillani Muti en el Festival de Ravenna en 2018.
En mayo de 2019, Hosseim Pishkar asistió a François-Xavier Roth en la producción de Lab.Oratorium de Philippe Manoury con la Gürzenich-Orchestre y en 2018 llevó a cabo dos representaciones de la ópera de Verdi Don Carlos, de Hermann Bäumer, en el Staatstheater Mainz. En 2016 fue asistente de Sylvain Cambreling en la Junge Deutsche Philharmonie en la Suite Lulu de Berg y en el concierto de violín de Rebecca Saunders Still. Durante la temporada 2015-2016 fue asistente de Daniel Raiskin, el primer director titular de la Staatsorchester Rheinische Philharmonie en Koblenz. Su amplia experiencia como director asistente incluye una representación de la ópera de Haynd Il mondo della luna en el Robert Schumann Hoschschule en Düsseldorf en 2017.
Hossein Pishkar ha completado su formación en clases magistrales con Ricchardo Muti (2017, Aida en Ravena dentro de la Italian Opera Academy) y con Sir Bernard Haitink (2016, Lucerne Festival Orchestra). Desde 2015 ha participado en el prestigioso programa alemán Dirigentenforum y ha asistido a clases con John Carewe, Marko Letonja, Nicolás Pasquet, Mark Stringer y Johann Schlaefli.
Antes de trasladarse a Düsseldorf en 2012 para estudiar dirección con Rüdiger Bohn en el Robert Schumann Hochschule, Hosseim Pishkar estudió composición y piano en Teherán, donde había nacido en 1988. En Irán ha dirigido a la Teheran Youth Orchestra y a la Orquesta de Teheran Music School. Siendo niño empezó a interpretar música tradicional persa y ha ganado muchos premios como intérprete de tar, entre otros, instrumento de cuerda con trastes típico de la cultura persa.