Otra ‘Fuckup Night’ en Granada para aprender del fracaso
En el evento, promovido por AJE con el apoyo de Bankia, han participado el expiloto de Fórmula 1 Jaime Alguersuari y los empresarios Luis Castillo y José Salmerón
Un nuevo evento innovador para aprender de los fracasos a través de ponentes de primer nivel ha organizado la Asociación de Jóvenes Empresarios (AJE). La segunda ‘'Fuckup Night’, un movimiento mundial que nació en México en 2012, se ha celebrado en el Teatro CajaGranada Fundación gracias a la iniciativa de AJE con el apoyo de Bankia. El expiloto de Fórmula 1 que ahora es conocido como DJ Squire, Jaime Alguersuari, y los empresarios Luis Castillo y José Salmerón han ofrecido una ponencia en la que han hablado de sus fracasos o desaciertos y del aprendizaje que han obtenido en base a ellos.
Después de la presentación del evento por parte del periodista Luis Mora, ha sido el turno del presidente de AJE Granada, José Antonio Martínez, quien ha destacado que “fracasar no es indigno”, porque pocas personas nunca habrán fracasado en su vida personal o profesional, y ha destacado que lo importantes es “saber gestionar el fracaso”.
Tras esto, el encargado de ofrecer la primera ponencia de la noche en esta segunda edición del ‘Fuckup Night’ ha sido Luis Castillo, catedrático en Computación e Inteligencia Artificial y director tecnológico de IActive Intelligence Solutions. Luis Castillo ha explicado que junto a cuatro socios más pusieron en marcha una empresa de inteligencia artificial que fracasó. Quisieron “hacer pasta con esta tecnología tan chula”, pero ha recordado cuáles fueron sus desaciertos: “No escuchamos a los partner; luego los escuchamos, pero no tenían pasta; hicimos luego un modelo integrable, generando tracción y confianza, pero nos la pegamos”, ha comentado. Para Luis Castillo, otro de sus errores fue “el timing con el mercado”. El catedrático ha recordado que abrieron la empresa en 2006, cuando la inteligencia artificial “era ficción”, y cerraron en 2015, mientras que en 2019 “hay ya confianza en la inteligencia artificial”. Pese a todo, Luis Castillo ha destacado que los tres mejores años de su vida han sido los de esa excedencia que pidió en la Universidad de Granada para trabajar en su empresa con sus cinco socios. “He aprendido mucho. Es la experiencia más valiosa de mi vida, a pesar del ‘fail’ y del fracaso”, ha indicado. Esa experiencia le ha servido para cambiar su forma de dar clase en la Universidad. Desde entonces, motiva más a sus alumnos, en especial a los de cuarto curso, para que monten su propia empresa. “Creo que debería ser obligatorio para todos los profesores una excedencia, para ver la vida fuera”, ha apuntado.
El segundo ponente de la noche ha sido José Salmerón, el gerente del Grupo Salmerón, quien ha explicado también su experiencia y sus fracasos. Natural de una pedanía de Fiñana, Salmerón dejó sus estudios en octavo de EGB y, en abril de 1986, puso en marcha un taller de rejas. “Decidí poner la empresa y yo me busqué la formación con una máquina de soldar y un libro de soldadura”, ha recordado. Montó un taller de carpintería metálica que, poco a poco, fue creciendo y él mismo se encargó de dar formación a sus trabajadores. Creó un equipo, pero le traicionaron. “A mis espaldas crearon una sociedad y se quedaron con el trabajo. Fue mi primer fracaso”, ha recordado Salmerón. Lo asumió y pido ayuda a un profesional. “Ahora suena bien, pero antes, en un pueblo con 230 personas, decir que vas a un psiquiatra…”, ha comentado. Esa ayuda fue muy importante para Salmerón. El psiquiatra le recomendó que hiciera formación y así lo hizo. Salmerón ha destacado que el curso de la EOI que realizó en Guadix ha sido “la mejor formación” y que le permitió contar con “unas instalaciones con una maquinaria de última tecnología y tener 80 trabajadores”. A partir de ahí le surgieron proyectos importantes, como el del propio edificio de CajaGranada. Pero luego llegó otro fracaso. “Con la crisis, el Nevada… Nos convertimos en especialistas, pero nos encontramos solos”, ha recordado. La insolvencia llegó a su empresa. Pero Salmerón se volvió a levantar. Volvió a aprender de ese fracaso y puso rumbo a Francia, donde ha desarrollado ya varios proyectos y tiene algunos más pendientes, como ha comentado.
Para cerrar la ‘Fuckup Night’ ha llegado el turno del ponente ‘estrella’, Jaime Alguersuari. El barcelonés, de 29 años, ha dado un giro radical a su vida. Fue el piloto más joven en competir en Fórmula 1 en su momento, logró 46 grandes premios y fichó por Toro Rosso, pero la desilusión le hizo dejar la F1. Ese ‘fracaso’ provocó que se reinventara y se dedique profesionalmente ahora al mundo de la música electrónica y es conocido como DJ Squire. Jaime Alguersuari ha explicado con lujo de detalles su trayectoria y todo lo que ha aprendido de sus fracasos. Para él, “fracasar es no tener ganas, ni ilusiones, ni impulsos de impresionar. Fuck up es ‘joderla’ y forma parte de un proyecto y evolución”. “Hoy hago música. Antes el mundo del motor era toda mi vida”, ha recordado.
Alguersuari ha comentado que empezó muy joven a correr en karts y le fichó Intrepid. A partir de ahí tuvo “la suerte” de que Red Bull le llamó en una selección de pilotos en Estoril y le hizo una prueba, que superó, y le hicieron un contrato. Poco a poco empezó a correr en diferentes categorías hasta llegar a la Fórmula 1 y ser un destacado piloto. Alguersuari ha recordado que cuando estaba en su mejor momento “a nivel técnico”, le llamaron para echarle de la F1. “Mi vida cambió y, gracias a eso, ahora soy quien soy y sé lo que quiero en mi vida. Me quedé desangelado, sin RedBull respaldándome. Mi vida había girado en torno a un coche y tenía una sensación de impotencia, injusticia… Había ganado el campeonato y vi como otros pilotos podían comprar su asiento”, ha recordado. Alguersuari continuó ligado al mundo del motor, participó en el campeonato E de coches eléctricos en Londres y también comentó en Movistar Televisión la Fórmula 1. Pero no estaba a gusto. “No me hacía feliz ni tenía sensaciones. Solo me unía el interés económico. No puedo hacer un trabajo si no estoy enamorado. En la carrera de Moscú me desmayé y esa fue mi sentencia. Fue una señal de que no iba a continuar”, ha explicado. “Encontré mi pasión en la música. Tenemos que estar entregados al 100% si no, es imposible. Cuando las cosas no salen, tienes que volverlo a intentar, reinventarte, no quedarte de brazos cruzados”, ha añadido el expiloto.
Alguersuari, que ha reconocido durante la ponencia que no se arrepiente de nada, ha comentado también que los errores le han dado “luz” para ver lo que quería en su vida y que contó con la ayuda de un psicólogo. “Empecé a entender que era un privilegiado, que había hecho cosas grandes y que tenía que estar orgullo de ello. Tenía que hacer un cambio y ver el vaso medio lleno”, ha apuntado. Además, Alguersuari ha terminado su intervención con una conferencia sobre su libro ‘Reinvéntate’, en el que narra esos fracasos y todo lo que ha aprendido de ellos. “En la vida, todos estamos capacitados para reinventarnos. Tenemos potencial dentro. Necesitamos un poco de talento, una idea y no parar de currar. Así, puedes conseguirlo”, ha trasladado a todos los presentes. “Creamos lo que nosotros creemos. Me he dado cuenta de que cuando ves de manera positiva, las cosas suceden”, ha agregado Alguersuari, quien también ha dicho que en la vida “tiene que existir ese fuckup, ese agujero negro, para que haya cambio” y que nunca se debe parar de confiar en uno mismo “por muchos fuckup que haya”.
Los empresarios granadinos han aprendido con la experiencia de los tres ponentes a valorar los fracasos y el aprendizaje que de ellos se puede extraer. La intención de AJE Granada es la de organizar más ‘Fuckup Nights’ para acercar el fracaso a los emprendedores, normalizarlo y fomentar el aprendizaje para producir cambios.