Padres de educación diferenciada asisten este jueves al Parlamento para reivindicar financiación pública
Asisten al debate de la proposición no de ley, presentada por el Grupo Socialista, en la que se solicita la suspensión de la financiación pública para estos colegios
Una representación de la plataforma 'Mis padres deciden', que engloba a padres de alumnos de los centros de educación diferenciada por sexo existentes en Andalucía, juntos con directores y profesores de los citados centros, asisten este jueves, a partir de las 16,30 horas, al Pleno del Parlamento de Andalucía al objeto de asistir al debate de la proposición no de ley (PNL) presentada por el Grupo Socialista, en la que se solicita la suspensión de la financiación pública para estos colegios.
La portavoz del colectivo, Gemma García, ha explicado a Europa Press que quieren hacer valer con su presencia su derecho a decidir "la educación de nuestros hijos" y el valor de estos colegios, "que contribuyen con decisión a atajar el gran problema del fracaso escolar". A juicio de la plataforma, suprimir los conciertos supone "convertir esta educación en elitista", ya que "solo el que pueda tendrá posibilidad de pagarla".
"No podemos entender que en un estado democrático y de derecho como el nuestro se pretenda coartar la libertad que tenemos para elegir la educación que deseamos para nuestros hijos: no podemos aceptar que se nos discrimine y se nos niegue nuestro derecho", ha defendido 'Mis padres deciden', que insta al PSOE a abandonar "los prejuicios, estereotipos y, a veces, falsedades evidentes con los que nos juzgan", pues "nosotros, padres y madres, no enviaríamos nunca a nuestros hijos a unos centros que no respetaran la igualdad de hombres y mujeres, ni consentiríamos que fueran educados en centros que segreguen a nadie".
Los padres aseguran poder comprender que no se comparta el modelo pedagógico de educación diferenciada, "tan contrastado como educación de excelencia académica en toda Europa y en EEUU", pero "no entendemos que quieran eliminar esta educación para las clases socialmente más desfavorecidas y que no pueden permitirse pagar esta educación de calidad".
Finalmente, el colectivo afirma que "no podemos aceptar de ningún modo que nos digan que si queremos la enseñanza diferenciada, que la paguemos de nuestros bolsillos, como si ya no estuviéramos pagando nuestros impuestos. La única verdad es que estos centros andaluces ahorran dinero público, permiten el acceso a una educación de calidad a familias con escasos recursos y, sobre todo, son colegios con un bajo índice de fracaso escolar".