Los partidos de Granada aceleran a cuatro días de que arranque la campaña electoral

Líderes nacionales y autonómicos intensifican sus actos de campaña en la capital a escasas tres semanas de los comicios locales

Candidatos a la Alcaldía de Granada elecciones municipales 28M
De arriba abajo y de izquierda a derecha (posición en la foto): Concha Insúa, Beatriz Sánchez Agustino, Elisa Cabrerizo, Paco Puentedura, Paco Cuenca, Marifrán Carazo, César Girón, Paco Cabello, Juan Carlos Ríos y Luis Antonio Rodríguez | Fotos: GD
Miguel López Rivera
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Aunque no existe un plazo legalmente establecido que la defina, se sobreentiende que la precampaña es el periodo de tiempo que precede a la campaña electoral. Y aunque la hipermediatización actual parece haber sumido a la clase política, y por extensión a toda la ciudadanía, en una precampaña permanente, lo cierto es que sólo en fechas próximas a las de la cita con las urnas este término adquiere su verdadero significado.

Se ha visto estos días atrás en Granada, donde los partidos apuran las jornadas antes de que el jueves, cuando las manijas del reloj cambien las 23:59 por la medianoche, arranque oficialmente la campaña electoral con la pega de carteles. A partir de ese momento quedará prohibido publicar, difundir o reproducir sondeos y encuestas electorales, y es previsible que, por días, el tono y las promesas se eleven uno o varios grados.

Lo que no cambiará en demasía es la parafernalia política. Irá in crescendo, eso sí. Pero actos como los dos que coparon el 'súpersábado' granadino serán moneda de cambio común en calles plazas y auditorios. Y es que hace apenas dos días, mientras Patxi López criticaba en Cijuela las "derivaciones" a la sanidad privada del Gobierno de Moreno Bonilla, el propio presidente de la Junta de Andalucía escuchaba en el Parque Federico García Lorca de boca del presidente nacional de su partido, Alberto Núñez Feijóo, la ya mítica frase de "¡Juanma, entre tú y yo vamos a poner el agua en Andalucía!, que casi sonaba como si ellos mismos fueran a hacer la ñapa en casa.

Pero es que la retórica cuenta y mucho. Sobre todo en una campaña que desde algunos sectores se enfoca como probeta para las generales o, por el contrario, utilizando los líos de la política nacional como veta para atraer el voto. Véase el caso de Ayuso en Madrid.

La batalla entre Carazo y Cuenca

Pero aunque estos días se normalice eso de ver a los principales rostros de la política nacional desfilar por las provincias, el verdadero protagonismo sigue recayendo en los candidatos. Y concretamente en los dos que, hablando en plata, tienen posibilidades reales de coger el bastón de mando tras el 17 de junio, cuando, si no hay recurso contra la proclamación de los candidatos electos tal y como recogen los artículos 195.1 y 196 de la LOREG, se constituya el futuro nuevo pleno del Ayuntamiento de Granada.

Marifrán Carazo se ha afanado en las últimas semanas en tocar en aquellos puntos débiles que el actual alcalde y candidato del PSOE no ha llegado a atajar. En un contexto de farragosa e interminable burocracia en obras como, por ejemplo, la de Rules, la candidata ha usado la 'fórmula de la primera semana' al menos dos ocasiones en las últimas semanas. Así, ese es el tiempo máximo que previsiblemente podría tardar en resolver dos cuestiones vitales como "la intervención final de Santa Adela" y el traslado al Ministerio de Transportes de su propuesta para la integración del AVE por La Chana, dejándole así, de paso, un recadito al Gobierno.

No han sido las únicas bazas que ha jugado en estos días la 'número uno' del PP. Carazo también ha defendido la Vega "y los valores que representa" como entorno natural de la Granada metropolitana, se ha reunido con el colectivo de personas con discapacidad física y orgánica o ha prometido promover un "merecido" reconocimiento ciudadano a Jesús Candel por "su defensa de la sanidad pública y su legado".

En materia social, Paco Cuenca también ha mostrado sensibilidad por la Vega, que definió días atrás como "una joya patrimonial". A nivel de gestión, el actual alcalde de Granada basa su estrategia en insistir en "las dos veces" que ha "rescatado el Ayuntamiento". También en haber consensuado con las instituciones del Pacto por Granada una serie de medidas ante la decisión de llevar la AESIA a La Coruña con la que se ha procurado una imagen de defensor de lo local por encima de las siglas, habida cuenta de que se ha enfrentado al Gobierno de España, de su propio partido. Y en su presentación apeló "la confianza y la credibilidad generada" como avales.

El candidato del PSOE de Granada también agita ya el árbol de la infraestructuras, un caramelo suculento para el votante indeciso. Entre los encontronazos que ha tenido con la Junta a cuenta de polémicas como la de la tasa turística, la zona de gran afluencia o la misma estrategia para reivindicar claridad con la AESIA, el trazado del Metro sobresale por encima de todos. La idea del candidato socialista si es reelegido alcalde pasa por ampliar el suburbano por La Chana y Genil para hacerlo llegar al aeropuerto por un lado y, por el otro, a la cornisa sur.

Futuribles socios y nuevos actores políticos

A tenor de la intensa pugna que se barrunta entre Paco Cuenca y Marifrán Carazo, lo que parece un hecho cada vez más probable es que cualquiera de los dos necesitará pactar para sentarse en la Plaza del Carmen los próximos cuatro años. A la izquierda del PSOE, las dudas surgen por la escenificación en la escena local de la ruptura entre Podemos y Yolanda Díaz. Esta vez, Podemos e Izquierda Unida no se presentarán juntos. Tampoco repetirá el periodista Antonio Cambril como cabeza de lista de ninguno de las dos formaciones, si bien en redes se ha mostrado en los últimos días más partidario de la estrategia del partido morado en su refriega con la actual ministra de Trabajo.

Mientras que Podemos irá en una lista junto a Alianza Verde e independientes con Elisa Cabrerizo como 'número uno', IU vuelve a confiar sus expectativas electorales a la experiencia de Paco Puentedura en la enésima marca de la izquierda desde que el mundo es mundo. Esta vez, el naming elegido es el de Granada Unida. Una extraña alianza que incluye, además de a Izquierda Unida, a Vamos Granada, Más País, Equo, Iniciativa del Pueblo Andaluz y todo un clásico ya como Recortes Cero. La número dos de la lista será Mayte Olalla, de Vamos, quien cabe recordar particularmente crítica con la izquierda durante su etapa como concejala de UPyD.

Ambas listas tienen entre sus objetivos metas parecidas. La defensa de la Vega y la renaturalización de espacios urbanos como el río Genil a su paso por la capital, remunicipalizar servicios esenciales o alternativas de transporte sostenible. La fractura, sin embargo, queda constatada y quién sabe si, como ya sucedió en 2019 con Unidas Podemos y Vamos, podría acabar siendo la llave de entrada de la derecha en el Ayuntamiento. En caso de no conseguir la mayoría absoluta, esa llave la tendría que abrir Marifrán Carazo con Vox, que concurre con Beatriz Sánchez Agustino al frente o, más improbable, con Ciudadanos, también con una mujer, Concha Insúa, como cabeza de lista.

Tras la debacle que para los naranjas supuso la ruptura del '2+2', la intención del partido liberal es convencer al electorado indeciso de que un único concejal de Cs puede evitar la entrada de partidos que tienen entre sus caladeros a votantes a la izquierda del PSOE y la derecha del PP. Esto es, Podemos, Granada Unida y Vox. El objetivo, que al menos Concha Insúa consiga su acta de concejal.

Y ese mismo reto se marca Juntos por Granada, encabezado por el exconcejal socialista César Girón, y quien sostiene en la defensa de Granada y la desalineación con la agenda andaluza su bandera para una campaña en la que no se puede descartar que se cuele ese neologismo llamado 'Granadexit' con el que defienden que la provincia tiene que salir de la comunidad autónoma. Las otras cinco listas que concurren, y sus líderes, son Adelante Andalucía (Paco Cabello), Nación Andaluza (Juan Carlos Ríos), Escaños en Blanco (Alberto Jiménez), Izquierda en Positivo (Manuel Francisco Varo) y Por un Mundo más Justo (Luis Antonio Rodríguez). La cuenta atrás ha comenzado.