El Pele y Rancapino Chico con Jesús Méndez trasladan sus actuaciones a Jerez de la Frontera
Ambas actuaciones forman parte del ciclo Flamenco Viene del Sur, que estaban previstas para el 21 y 22 de noviembre en el Teatro Alhambra
Europa Press
La Consejería de Cultura y Patrimonio Histórico, a través de la Agencia de Instituciones Culturales, en colaboración con el Ayuntamiento de Jerez de la Frontera, ha organizado las actuaciones de El Pele y Rancapino Chico con Jesús Méndez en el Teatro Villamarta jerezano dentro del programa conmemorativo de flamenco como Patrimonio Inmaterial Cultural de la Humanidad por la Unesco, que se celebra el 16 de noviembre.
Ambas actuaciones forman parte del ciclo Flamenco Viene del Sur, organizado por el Instituto Andaluz del Flamenco, que ante la imposibilidad de celebrarse en el Teatro Alhambra, por las restricciones decretadas por la Junta en Granada para frenar la pandemia de covid-19, se han trasladado a este espacio escénico de la provincia de Cádiz.
Concretamente, el sábado 21 a las 12,30 horas actuará Manuel Moreno Maya El Pele con 'Peleando', un espectáculo en el que se pone de manifiesto la maestría y la personalidad de este célebre cantaor que acuña con su cante dosis de gitanería y un sello personal.
Su soleá y sus zambras caracterizan el esplendor de este artista cordobés que mantiene su esencia intacta con el paso de los años, ha informado la Junta en una nota.
El domingo 22 a las 16,00 horas estarán Alonso Núñez Rancapino Chico, hijo de 'Rancapino' y de Juana Fernández Núñez; y Jesús Méndez, que pertenece a una de las sagas más importantes de Jerez, la de los Méndez, cuyo buque insignia fue La Paquera.
Este cartel es una programación de cultura segura que apoya a un sector estratégico para la sociedad y la economía andaluza como es el flamenco. Estas actuaciones se han organizado conforme a las medidas anticovid-19.
Esta efeméride del décimo aniversario como Patrimonio de la Humanidad es "sólo un punto y seguido en la apuesta de la Junta por el flamenco", ha indicado la nota. La declaración de la Unesco amplifica la pasión por el flamenco y se va a seguir trabajando en su defensa, en su conservación, su estudio, su difusión y su promoción, siempre al lado de los aficionados, las peñas y también de los artistas.
