El Granada se lleva un punto del manicomio
Después del partido de las mil historias, no hubo vencedores ni vencidos. El Granada se resistió a perder en el Coliseum Alfonso Pérez, en un duelo en el que puso las tablas en el marcador hasta en tres oportunidades: la última de ellas, en inferioridad numérica. Los nazaríes fueron un equipo un tanto endeble en defensa, pero acertaron en ataque y no se derrumbaron ni física ni mentalmente a pesar de las adversidades.
En el arranque del partido, el Getafe salió con más intensidad. Espoleado por la llegada al banquillo de Cosmin Contra y por la afluencia de público a su habitualmente desangelado estadio, los azulones fueron un bloque intenso y tenaz en la presión ante un Granada que trató de estirarse para evitar que el primer arreón local le situase por debajo en el marcador.
Sin embargo, a pesar de los esfuerzos nazaríes por no ceder, el Getafe se iba a adelantar a los seis minutos. Ciprián aprovechó la indecisión de Coeff para cazar un balón a cuarenta metros de la portería. El rumano aguantó el choque con Iturra y enfiló la portería con velocidad y decisión. Roberto se mantuvo en pie hasta el último instante, pero el delantero azulón definió con clase al palo largo y llenó la casa rojiblanca de los fantasmas que ya habían aparecido en Almería y en Cornellá.
No obstante, los granadinistas no se arredraron pese al gol. El Arabi, persistente en la labor destructiva de la primera línea, tuvo la primera tras arrebatarle el balón a Codina en su área. No acertó, pero la acción espoleó a los de Alcaraz, que, bajo el mando de Fran Rico, nuevamente imperial en la medular, comenzaron a gobernar en el partido y pusieron en jaque a los hombres de Contra.
Así las cosas, hasta el gol del empate, que llegó en el minuto 35, los rojiblancos asediaron la meta de Codina con insistencia. Sin perder el hilo del choque en ningún momento, el Granada fue generando ocasiones de forma constante en una franja de encuentro que supuso veinte de los mejores minutos de los de Alcaraz en toda la temporada. El Arabi, Murillo y, sobre todo, Fatau, con un disparo al larguero, se acercaron, pero fue Riki quien dio en la diana.
El delantero de Aranjuez aprovechó un balón al espacio de El Arabi, que estuvo brillante en todas las facetas del juego, y batió por bajo a Codina en su salida. Lamentablemente para los intereses nazaríes, prácticamente en la siguiente jugada, una torpeza de Coeff le concedió una falta lateral al Getafe que Lisandro López iba a transformar en un cabezazo certero hacia las redes de Roberto tras un gran servicio de Pedro León.
Tras este tanto, el Granada se marchó al vestuario henchido por su superioridad futbolística, pero tremendamente frustrado por el resultado adverso. Alcaraz quiso perfeccionar aún más su estrategia y retiro del terreno de juego a un invisible Pereira para buscar un mayor dinamismo con Buonanotte.
Con el argentino el el campo, el equipo visitante siguió manejando los tiempos en el centro del campo y, poco a poco, volvió a encerrar a un impotente Getafe en su área. Los azulones, voluntariosos, pero superados en muchas fases, vieron cómo El Arabi volvía a igualar el partido tras cabecear a las mallas un centro medido de Brayan Angulo. Era el minuto 63.
En ese momento, terminó el fútbol y comenzó media hora de partido llena de surrealismo y de alternativas constantes e ilógicas. La locura se inició con la expulsión de Iturra. En el minuto 69, el chileno vio la segunda amarilla tras derribar a Sarabia en una disputa. La cartulina pareció exagerada y despistó a los de Alcaraz, que permitieron que la coyuntura les sacara del encuentro.
En esa tesitura, el Getafe se encontró cómodo. Los de Contra, crecidos por la incidencia favorable, volvieron a rondar la meta de Roberto, y en una acción que llegó tres minutos después de la roja a Iturra, recuperaron por tercera vez la ventaja. Sarabia cazó un rechace en la frontal y disparó a portería con potencia. La pelota se iba fuera, pero Lafita estuvo listo y desvió la trayectoria hacia la portería.
El gol parecía el fin de la aventura del Granada en Getafe, pero El Arabi no estaba dispuesto a desperdiciar tal grado de inspiración. En el minuto 76, sin apenas solución de continuidad, el marroquí sacó de nuevo su fusil tras cabecear a la red un balón que rondaba por el área después de un córner sacado por Fran Rico. Los de Alcaraz, irreductibles, sacaron el carácter para no venirse abajo y volver a nivelar un partido que, ya hacía tiempo, se había vuelto caótico.
Y aún quedaba la traca final. A falta de diez minutos, Ayza Gámez expulsó, también por doble amarilla al defensor del Getafe, Escudero, y dejó a los dos equipos con diez, con empate a tres en el marcador y con una nebulosa en torno al futuro del partido. Fue ahí cuando el Granada decidió calmar los ánimos y contemporizar para conservar el empate y llevarse un punto del manicomio del Coliseum Alfonso Pérez.
FICHA TÉCNICA
Getafe CF: Codina, Alexis, Lisandro, Ciprian, Colunga, P. León, Diego Castro (Gavilán 10’), Escudero, Valera, J. Rodríguez y Mosquera.
Granada CF: Roberto; Nyom (Foulquier 56’), Coeff, Murillo, Angulo; Iturra, Fran Rico, Fatau; Pereira (Buonanotte 46’), Riki y El Arabi.
Goles: 1-0, min. 6: Ciprian bate a Roberto tras una gran jugada individual; 1-1, min. 35: Riki recibe un gran pase entre líneas de El Arabi y marca ante la salida de Codina; 2-1, min. 38: Lisandro cabecea a gol una falta lateral botada por Pedro León; 2-2, min. 63: El Arabi, de cabeza, tras un gran centro de Angulo; 3-2, min. 72: Lafita desvía a gol un remate de Sarabia; 3-3: El Arabi, de nuevo de cabeza, aprovecha un rechace tras un córner.
Árbitro: Dirigió la contienda el colegiado valenciano Ayza Gámez. Expulsó a Escudero, del Getafe, por doble amonestación (23’ y 79') y a Iturra, del Granada, también por dos amarillas (53' y 69'). Además, amonestó, del lado del Getafe, a Ciprián (53'), Valera (83'), Sarabia (84') y Alexis (85'), mientras que vieron amarilla, por los visitantes Murillo (40'),
Incidencias: Partido correspondiente a la vigésimo octava jornada del campeonato de liga de Primera División, disputado en el Coliseum Alfonso Pérez.