Piden ocho años de cárcel para el acusado de asesinar de quince hachazos a su mujer en Armilla
El fiscal considera el parentesco como circunstancia agravante del supuesto delito de asesinato con alevosía y ensañamiento
La Fiscalía de Granada ha solicitado la pena de ocho años de prisión por un supuesto delito de asesinato con alevosía y ensañamiento para un hombre de 74 años acusado de matar en el verano de 2015 a su mujer asestándole quince hachazos mientras dormía en Armilla (Granada), hechos por los que será enjuiciado por un jurado popular los próximos 24 y 26 de abril en la Audiencia Provincial de Granada.
Según el escrito de acusación provisional del Ministerio Público, al que ha tenido acceso Europa Press, los hechos se remontan al 17 de agosto de 2015, cuando en torno a las cinco de la mañana, el acusado bajó a la cochera de su casa y cogió un hacha de 40 centímetros de largo y cuatro de ancho y "afilado de precisión".
Después se dirigió al dormitorio donde se encontraba acostada su mujer, de 67 años entonces, que estaba dormida y a la que golpeó con el hacha "hasta en quince ocasiones" en cara, cuello y distintas partes del cuerpo.
El acusado, de iniciales J.H.R., supuestamente aprovechó la "total indefensión" de la víctima --con la que estaba casado desde 1977 y tenía dos hijas-- pues, al estar acostada y dormida, "no pudo reaccionar ni defenderse". A consecuencia de la "brutal agresión, la víctima falleció por destrucción de centros nerviosos vitales".
El fiscal considera que por el número de golpes que asestó con el hacha a su esposa, "pretendió aumentar deliberada e inhumanamente el dolor y sufrimiento de la víctima antes de su fallecimiento".
Sobre las 6,45 horas de esa mañana, el procesado llamó a la Guardia Civil para "que acudieran a su casa porque quería pegarse un tiro". Los agentes lo encontraron sentado en la cochera donde había permanecido durante más de una hora tras enjuagar el hacha y lavarse las manos y el pecho.
Tras un rato de conversación y al preguntarle por su esposa, "el acusado les manifestó que la había golpeado con un hacha y que estaba en el dormitorio, donde los agentes la encontraron sin vida".
El acusado padece un trastorno delirante "que altera gravemente sus facultades intelectuales y volitivas", una alteración mental que "provoca altos factores de riesgo" que indican "gran peligrosidad" y riesgo futuro de que repita "este tipo de conductas".
El fiscal considera el parentesco como circunstancia agravante del supuesto delito de asesinato con alevosía y ensañamiento, y tiene en cuenta la eximente incompleta de enajenación mental, y la atenuante de "arrepentimiento espontáneo".
Además de los ocho años de prisión, el Ministerio Público indica que procede imponer como "medida de seguridad" el internamiento en un centro psiquiátrico penitenciario por un periodo máximo de 25 años y la imposición de libertad vigilada durante otros cinco años con tratamiento médico, así como privación del derecho y tenencia de armas durante una década.
Está previsto que los hechos sean enjuiciados entre los próximos días 24 y 26 de abril por la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Granada con la fórmula del jurado popular.