Pintarse los labios con polvo de estrellas

Pintarse los labios con polvo de estrellas quizá no quede tan lejos de lo que pensamos. Dos jóvenes ‘adoptivos’ de Granada ya lo tienen todo pensado. Están inmersos en el lanzamiento de una nueva empresa, StarBreath, que se dedicará a fabricar y comercializar cosmética con un ingrediente muy especial: extracto de meteorito. Prevén poder empezar a comercializarla a finales de este año. Pero detrás de esta ambiciosa, arriesgada y original apuesta está la historia de pasión por la divulgación científica de la astrogeología que tienen estos dos jóvenes, que no superan los 24 años de edad y que, además, son los socios fundadores de ExoExtrato, la Asociación Andaluza de Astrogeología, la primera organización de divulgación científica en España centrada en la divulgación de ambas ciencias (astronomia y geología) estudiadas en conjunto.

Emilio David Rodríguez tiene 20 años y ya ha acabado Física (le adelantaron de curso en la ESO y empezó a estudiar el grado en la Universidad de Granada a los 16 años). En el primer año de carrera ya hizo sus primeros pinitos en una junior empresa dedicada a la divulgación científica, que le procuró experiencias deseadas: conocer qué se esconde en el cosmos, acercar la ciencia a la población y ese acercamiento más profundo a la astronomía. En esa etapa conoció a Joel Núñez, su socio ahora, “un asturleonés, geólogo, amante de la astronomía y del campo”, como se define él mismo. Pese a que solo tiene 24 años, Joel ya atesora el título de astrónomo por la Escuela Española de Astronomía Alphonsus.

 

Emilio David y Joel, con un denominador común, su pasión por el cosmos, decidieron arrimar el codo para embarcarse en un proyecto sin precedentes: la creación de una línea de productos cosméticos que contengan una pizca del Universo. “La cosmética coincide temporalmente con el nacimiento de la astronomía. Por eso hemos querido llevar el potencial de esta ciencia a un producto de aplicación personal e íntimo. Queremos convertir la acción de maquillarse en una experiencia divulgativa también”, relata Joel, consciente de que la mayoría de actividades que se organizan en torno a la astronomía “no terminan de enganchar” y no pasan de quedarse en “ratos anecdóticos”. De este modo, su valor diferencial, además de convertirse en la primera empresa que venda este tipo de productos, recae más bien en su dimensión divulgativa. Así, los productos que lancen, irán siempre acompañados de un folleto en varios idiomas (incluido braille) con la explicación personalizada del producto.

 

PINTALABIOS CON CONDRITA

El primer producto que pretenden sacar al mercado es “Antares”, un pintalabios mate de un rojo intenso, que pertenecerá a la primera línea de pintalabios de ‘tipo M’.  Su nomenclatura tampoco está escogida al azar. “Las estrellas de ‘tipo M’ son rojas”, apostillan. “Todo eso lo explicaremos en el folleto”, añaden.

El polvo de condrita que contendrá la barra de labios “tiene propiedades exfoliantes, nutritivas y anti-edad”, dicen los creadores del negocio. Su precio aún no está fijado, pero rondará los 80 euros, según el estudio de mercado y de coste de producción que han podido hacer por el momento. Además, cada pintalabios llevará incorporado como decoración una placa de meteorito, “algo que hará que cada uno sea exclusivo porque no hay dos placas iguales”, añaden.

Emilio David y Joel ya están pensando en otros productos: sombras de ojos, laca de uñas, máscara de pestañas… “Pero ahora estamos centrados en los pintalabios y en el perfume”. En las fragancias, “el polvo de estrella no aporta gran cosa a la piel, así que no irá en el líquido, pero sí hemos pensado que esté muy presente en el frasco. Por ejemplo, estamos barajando que para el perfume masculino, el bote sea el propio meteorito".

 

 

MATERIA PRIMA ÚNICA

¿Y de dónde vais a sacar todos esos meteoritos de los que estamos hablando?, les preguntamos. Marruecos apunta a ser su ‘mina’. “Allí hay mucha condrita porque es, lo que se conoce como un cratón, una región geográfica con poca actividad tectónica, no como Granada que tiene una actividad muy cambiante”, explican. “De Suecia podríamos obtener otras piezas meteoríticas que servirán como adorno en los productos, que cuentan con un patrón muy interesante porque, según nos explican, sólo se pudo formar en asteroides flotando en el espacio.