La política granadina en 2021: El estallido del '2+2' entrega la alcaldía a Paco Cuenca
El segundo aniversario del famoso pacto fue el punto de partida del final del equipo de Gobierno formado por Partido Popular y Ciudadanos
En España existe un dicho popular que dice 'aquí paz y después gloria', pues en el Ayuntamiento de Granada no hay ni paz. La política granadina inició el 2021 con una fecha marcada en el calendario: el 26 de mayo. En la citada fecha se cumplían exactamente dos años de las últimas elecciones municipales en Granada, de las que salió la primera alcaldía que rompió el bipartidismo en la capital con Luis Salvador como primer edil. Todo transcurrió con relativa normalidad hasta el segundo aniversario del archiconocido pacto del ‘2+2’, que derivó en un conflicto con la intervención de agentes nacionales, autonómicos y por supuesto locales. El final ya es más que conocido por todos: el regreso de Paco Cuenca a la alcaldía.
El día ‘D’, el 26 de mayo de 2021, cayó en miércoles. Sebastián Pérez, figura protagonista dentro de la enrevesada historia del ‘2+2’, acudió al hotel Meliá con todos los focos apuntándole. El concejal no adscrito realizó una comparecencia de casi dos horas en la que no dejó títere con cabeza. “O buscan 14 concejales para retirar a este señor (Luis Salvador) o les aseguro que yo los encontraré. Luis Salvador no va a ser alcalde de Granada en la segunda mitad del mandato”, manifestó con rotundidad al PP, formación a la que había dedicado 35 años de su trayectoria hasta ese mismo día.
La agenda del día posterior ya estaba condicionada por las declaraciones del ex candidato a la alcaldía del PP. Luis Salvador acudió a la sala de prensa del Ayuntamiento para la presentación del nuevo disco de un grupo granadino que había tenido protagonismo en televisión, pero él sabía que no iba a ser preguntado por la música. El primer edil no eludió la tarea y calificó de “sinsentido” la posibilidad de una moción de censura. Posteriormente defendió que su mandato era un proyecto para cuatro años para dejar claras sus ideas.
La partida de ajedrez no había comenzado y Pérez ya había agitado el tablero de su antiguo partido. El presidente provincial del PP, Fran Rodríguez, había declarado meses atrás que lo importante era trabajar para el futuro y olvidar el pacto, pero el escenario ya no era el mismo. A los pocos días de la intervención de Sebastián Pérez, el secretario general del Partido Popular de Granada, Jorge Saavedra, acudió a un Directo en Red de GranadaDigital en el que dejó caer que el siguiente alcalde de Granada tenía que ser Luis González, en aquel momento concejal de Urbanismo. En aquel mismo espacio dejó claro que no imaginaba "a Sebastián Pérez entregándole la alcaldía a Paco Cuenca".
Los días pasaron y no se producía ningún movimiento significativo por parte de ninguna de las partes implicadas. En el PSOE se pidió desde el primer momento que el equipo de Gobierno dimitiera para dar paso a Paco Cuenca, mientras que desde Unidas Podemos Antonio Cambril no dio puntada sin hilo.
La ruptura es oficial
El 8 de junio es otra fecha clave en la crisis del '2+2'. Francisco Rodríguez compareció junto a los seis ediles populares para anunciar la marcha de estos del Gobierno municipal. Esta decisión llegó después de que las dos partes se reuniesen y las posturas no se acercasen. Al poco rato fueron Lucia Garrido y Manuel Olivares los que abandonaron el barco de Luis Salvador y su propio partido. Ambos defendieron su vocación de servicio público y Olivares llegó a afirmar que "detrás de esto hay un pacto oculto con Pedro Sánchez".
Luis Salvador no se achantó por lo sucedido y volvió a aparecer en la sala de prensa del Consistorio capitalino para asegurar que no tenía pensado dimitir. En aquella declaración le acompañó quien pasará a la historia como su escudero: José Antonio Huertas. El alcalde aseveró que la ciudad funcionaría con dos concejales y llamó a recapacitar, por primera vez, al Partido Popular. La respuesta de la formación celeste fue clara con una dura rueda de prensa al día siguiente.
El PSOE lanza su moción de censura
El primer paso importante del PSOE dentro del conflicto fue advertir a Salvador de una posible moción de censura. Paco Cuenca realizó una declaración acompañado de todos sus concejales para dar un plazo de 72 horas al mandatario para su dimisión. Desde el PP no se hizo caso a la opción planteada por los socialistas, pues desde la formación entendían que la única vía era que Salvador diese paso a un candidato popular,
Las 72 horas pasaron y Luis Salvador no se marchó, sino que instó a sus ex socios a regresar al equipo de Gobierno. El alargue de la crisis no hizo otra cosa que incrementar la tensión en el Ayuntamiento, pues en el pleno del 25 de junio se retiraron del mismo 22 de los 27 corporativos municipales, dejando solos en la estancia a Luis Salvador y Huertas con los representantes de Unidas Podemos. La tirantez existente estaba también fuera del Consistorio, pues el empresariado granadino quiso dar un toque de atención por todo lo que estaba sucediendo y el impacto económico que podía provocar.
Luis Salvador se marcha
Durante la crisis del '2+2', Luis Salvador convocó varias ruedas de prensa que tuvieron aroma de dimisión, pero no fue hasta el 1 de julio cuando anunció que su etapa como alcalde de Granada tornaba a su fin. La rueda de prensa del mandatario forma ya parte de la historia de la política granadina. Durante su extensa comparecencia no sólo defendió su mandato, sino que atizo al PP por "abandonar" su responsabilidad en el Gobierno y llamó "tránsfugas" a Lucia Garrido y Manuel Olivares. El ex miembro de Ciudadanos tuvo muy buenas palabras para José Antonio Huertas y los funcionarios del Consistorio.
La 'bomba' llegó en el momento que Salvador manifestó que su intención y la de su fiel escudero era dotar de "estabilidad" a Granada apoyando a "la lista más votada", lo que se traducía en dar la llave del gobierno a Paco Cuenca y al PSOE. La formación socialista no espero. Apenas había salido Luis Salvador de la sala de prensa cuando entró Raquel Ruz, portavoz del PSOE, para señalar que Cuenca era su "único candidato" a la alcaldía. Esa misma tarde, Salvador publicó una carta dirigida a la ciudadanía. Meses después, el grupo de Ciudadanos quedó disuelto en un momento en el que la marca busca un destino.
El retorno de Cuenca
La renuncia de Luis Salvador se hizo oficial el 2 de julio, momento en el que José Antonio Huertas pasó a ejercer de alcalde en funciones. Ese día se puso el broche a dos años de un mandato marcado desde el principio por la polémica del pacto del '2+2'. La situación política del Ayuntamiento de Granada se quemaba en una sartén, cuyo mango acabó en las manos de Paco Cuenca.
Desde Ciudadanos se trató de deshacer el entuerto dando marcha atrás. Juan Marín, vicepresidente de la Junta y coordinador autonómico del partido naranja, solicitó por carta al PP la repetición del pacto, pero aquel 6 de julio ya era tarde. El día 7 se cristalizó la llegada de Paco Cuenca a la alcaldía en mitad de la división existente en la derecha. La crisis del '2+2' fue tema de conversación durante mucho tiempo en San Telmo. Ciudadanos y PP son los ejes de un Gobierno andaluz sin el PSOE por primera vez en la historia de la democracia, motivo por el que Marín y Juanma Moreno se esforzaron en aislar lo sucedido en Granada. El propio presidente de la Junta se limitó a decir aquella misma jornada que lo acaecido fue un "ejemplo nada edificante".
La ciudad ha vivido en 2021 la llegada de un cuarto alcalde distinto en cinco años, con dos etapas distintas de Paco Cuenca. El socialista tiene el reto de buscar estabilidad en 2022, pues en 2023 los granadinos tendrán que votar de nuevo para elegir a un equipo de Gobierno que tendrá el reto mayúsculo de dotar de estabilidad a una ciudad que necesita afrontar retos y aprovechar oportunidades. El actual alcalde pasó por un Directo en Red en el mes de septiembre en el que habló de esos desafíos. Lo cierto es que lo primero que necesita el Ayuntamiento de Granada es rebajar la tensión de un discurso político en ocasiones subido de tono.
La Junta Extraordinaria de Portavoces aprobó en septiembre 40 puntos del 'Pacto por Granada', un documento que debe ser parte del impulso requerido. Los grupos municipales son conscientes de que es necesario remar en la misma dirección por el bien de la ciudad para que el rumbo no cambie independientemente de quien ostente el poder. Ahora falta que la teoría se lleve a la práctica.
Otros cambios de Gobierno de este 2021
En la provincia se han consumado durante este año otros cambios de poder. Uno se ha dado por moción de censura en La Zubia. Dos se han producido por dimisión. En Baza debido a que Pedro Fernández pasó a ocupar el cargo de delegado del Gobierno en Andalucía, mientras que en Castilléjar Jesús Raya renunció por motivos personales.
Curiosamente, la fórmula del '2+2' ha dejado en Granada un total de cinco relevos consensuados. Estos han sido en Trevélez, El Valle, Huéscar, Montillana y Chimeneas. El caso más curioso se dio en El Valle, donde Benjamín Ortega, militante de Podemos, cedió su cargo a la integrante del Partido Popular Sandra García Marcos.