Los posibles motivos por los que tu aire acondicionado no enfría

El cableado, el compresor, el drenaje u otras partes del aparato pueden ser el origen del problema

2vT6GvMW
Aparato de aire acondicionado | Foto: Archivo
Iván Sánchez Delgado
0

A lo largo de los meses de verano, las temperaturas son elevadas y la población pasa las horas más calurosas encerrada en casa con el aire acondicionado puesto. No obstante, a veces se encuentran con el problema de que este no enfría. Una solución habitual es tocar todos los botones, pero no acostumbra a ser la solución para subsanar el problema.

Lo primero que hay que comprobar cuando el aire acondicionado no enfría es si no hay cables dañados y si las conexiones eléctricas son correctas. Hay que revisar si el termostato está en modo 'frío'. Además, se debe comprobar que la potencia de enfriamiento es la adecuada y que la temperatura que se ha programado sea inferior a la de la habitación.

Sí después de haber hecho todas estas comprobaciones el aire acondicionado sigue sin enfriar, el problema se puede deber a a un problema de energía eléctrico, por ejemplo, un fusible fundido o un interruptor desactivado. Por lo tanto, para concluir si el aparato tiene un problema de origen eléctrico, los especialistas del sector explican que se debe verificar primero la fuente de alimentación para garantizar de que esté correctamente conectada. Después de esto, sustentan que debemos inspeccionar los interruptores, disyuntores y fusibles relacionados con el sistema y analizar visualmente el cableado en busca de daños.

Otro problema es que si el aire acondicionado ventila en vez de enfriar, especifican que la causa podría estar en la parte del compresor o motor, por lo que habría que comprobar esta zona concreta.

Por otra parte, si el aire acondicionado no enfría y tira agua, el problema estaría en que el drenaje esté bloqueado por la suciedad, el polvo o incluso los hongos que bloquean el flujo del agua. Para que no pase esto, los expertos sugieren limpiar la bandeja de drenaje con una solución de agua y vinagre, pero es fundamental evitar el uso de lejía o productos químicos que puedan corroer el material.

Para finalizar, aconsejan que si se localiza alguna avería, se trate de contactar con un profesional en caso de que no se tengan conocimientos sobre el arreglo necesario, ya que un mal intento de arreglo podría agravar el problema.