Presentan a la comunidad universitaria el Protocolo para la Prevención y Respuesta ante el Acoso de la UGR

El jueves, 12 de enero a las a las 12,30 horas, en el Aula Magna de la Facultad de Psicología se presenta a la comunidad universitaria el Protocolo para la Prevención y Respuesta ante el Acoso, un protocolo que nace de la participación de toda la comunidad y que exige para su desarrollo una implicación de la comunidad aún mayor para poder aplicarlo en cada centro de manera individualizada, de ahí la importancia de conocerlo.

El  acto presidido por la Rectora, Pilar Aranda, contará con las intervenciones de Teresa Mª Ortega López, vicerrectora de Responsabilidad Social, Igualdad e Inclusión; Francisca Expósito Jiménez, decana de la Facultad de Psicología, y Miguel Lorente Acosta, director de la Unidad de Igualdad y Conciliación de la UGR.

El acoso en sus diferentes formas es una de las conductas violentas más habituales. El informe de Eurofound (2015) indica que el 14’9% de los trabajadores y trabajadoras de la UE han sufrido acoso laboral, un porcentaje que se ha incrementado desde 2005 en 3’7 puntos, con una prevalencia en mujeres del 15’1% y en hombres del 13’3%.

La Universidad, tal y como hemos visto en los datos, no es ajena a esta realidad al formar parte de la misma sociedad y cultura que da lugar a que se produzcan los casos; es más, las circunstancias que acompañan muchas de las relaciones que se establecen dentro de ella, especialmente la jerarquización y dependencia profesional y académica, son factores de riesgo para el acoso que deben ser tenidas muy en cuenta de cara a su prevención. La universidad, en consecuencia, no es distinta al resto de la sociedad pero sí puede marcar diferencias a la hora de abordar el problema existente, tanto en la prevención de este tipo de conductas dentro del propio contexto universitario, como en la incorporación de conocimiento y conciencia crítica en quienes en un futuro no muy lejano tendrán que enfrentarse como profesionales a los resultados de estas conductas y a su erradicación, de ahí la trascendencia de contar con una herramienta como el Protocolo contra el Acoso.

Abordar la realidad del acoso requiere algo más que un procedimiento de respuesta ante los casos denunciados, este planteamiento en el abordaje nunca será suficiente por dos motivos. En primer lugar, porque estas denuncias sólo representan un porcentaje mínimo del total, aproximadamente el 1-2%; y en segundo lugar, porque la correcta solución de estos casos no tendría impacto sobre las causas que los originan, lo cual llevaría a que las agresiones  seguirían produciéndose.

La respuesta integral ante el acoso exige trabajar la prevención, la detección, la atención y protección, así como la respuesta, y es lo que hace el Protocolo para la Prevención y Respuesta ante el Acoso con su tres grandes apartados: el primero dirigido a la prevención primaria, el segundo a la prevención secundaria, y el tercero centrado en la prevención terciaria.

Desde el Vicerrectorado de Responsabilidad Social, Igualdad e Inclusión a través de la Unidad de Igualdad y en coordinación con todas las estructuras y oficinas implicadas en algunas de las actuaciones, se trabaja en la atención y respuesta a través del procedimiento informal que define el Protocolo, así como en toda la parte preventiva. Es una tarea y una responsabilidad de toda la UGR que se impulsará y se coordinará desde la Unidad de Igualdad, pero que hay que adaptar y aplicar de manera individualizada a las circunstancias de cada centro y de cada grupo dentro de la comunidad universitaria, de ahí la importancia de conocer el Protocolo y de implicarse en su desarrollo y aplicación.

La etapa que comienza el 12 de enero sólo tendrá éxito con esa participación de la comunidad universitaria que logre la prevención de las conductas de acoso dentro de la UGR, para así trascender al resto de la sociedad.