Un Covirán cargado de moral busca romper la imbatibilidad blaugrana en el Palau
Los rojinegros se miden al Barcelona con el objetivo de seguir mejorando su juego y con la ilusión de, por qué no, dar la campanada
Tercer encuentro de la temporada ante uno de los grandes. El Covirán Granada afronta este domingo (17:00 horas) uno de esos partidos que todos quieren disputar, pero que muchos desearían obviar en el calendario. Los rojinegros visitarán el Palau con la convicción absoluta de que la sorpresa es posible, siempre lo ha sido y siempre se ha dado en algún momento de la temporada.
Así lo ha transmitido el club granadino durante toda la semana. ¿Por qué no? ¿Y si? Estas preguntas resuenan en la cabeza de muchos confiados de que el buen momento que atraviesa el plantel dirigido por Pablo Pin sirva como trampolín para dar la tan deseada campanada. El Covirán Granada llega a esta nueva jornada de la Liga Endesa en su mejor momento de la temporada. Las dos victorias consecutivas cosechadas ante Andorra y Obradoiro han dado a los rojinegros el respiro que tanto necesitaban y, sobre todo, la confirmación de que el trabajo realizado en semanas anteriores ha dado sus frutos.
El objetivo del equipo debe pasar por seguir creciendo como equipo y seguir mejorando su juego, especialmente, de cara al partido del próximo fin de semana ante Zunder Palencia, el encuentro que realmente importa. Conseguir un triunfo en el Palau no es obligatorio, la única exigencia es competir y que el Barcelona no viva un duelo tan plácido y cómodo con el disputado ante Girona en la jornada anterior. Dar la sorpresa en el Palau no es de obligado cumplimiento, aunque de conseguirlo, los granadinos amortiguarían el golpe que equipos como Zaragoza y Obradoiro han dado en esta jornada al vencer a UCAM Murcia y Lenovo Tenerife. Por no hablar de un Bàsquet Girona que ya suma siete victorias tras vencer en la prórroga a MoraBanc Andorra.
Para esta jornada, Pablo Pin tendrá a su disposición al recién fichado Jonathan Rouselle, aunque su participación en el partido queda en duda hasta el último momento pues el base francés tan solo ha podido realizar un partido con el equipo. Quien muy probablemente no vuelva a viajar con el equipo será Yiftach Ziv, al que se le sigue buscando una salida. El resto de la plantilla se encuentra en perfectas condiciones para disputar uno de los encuentro más difíciles de la temporada.
Un todoterreno dependiente de su estrella
Nadie duda del evidente favoritismo con el que el Barcelona se presenta a esta jornada 12 de la Liga Endesa. Los blaugranas han convertido el Palau en un fortín a prueba de titanes y de pequeños héroes que buscan la sorpresa de la temporada. En lo que va de campaña, el conjunto catalán ha disputado un total de once encuentros como local entre ACB y Euroliga, siendo todos ellos con resultado de victoria, por lo que asaltar el templo blaugrana es probablemente una misión casi imposible.
El club vivió un verano convulso con las salida de referentes como Nikola Mirotic y Saras Jasickevicius. Sin embargo, el ambicioso proyecto que se comenzó a fraguar nada más acabar la pasada temporada está dando sus frutos, aunque presenta alguna debilidad. Ninguna fortaleza es infranqueable. Las salidas de Cory Higgins, Kyle Kuric, Sertaç Sanli y Mike Tobey, más los dos comentados anteriormente, el Barcelona ocupó sus lugares con los fichajes de Darío Brizuela, Joel Parra, Jabari Parker y Willy Hernángomez, la gran estrella del nuevo proyecto culé. Una apuesta por las “banderitas” que está dando resultados, eso sí, siempre y cuando el pívot español tenga su día de gracia.
Ejemplo de ello es el último partido de los de Grimau en ACB. El Barcelona arrolló a un Básquet Girona que asistió como espectador a la mejor actuación de los blaugranas a nivel colectivo. Brizuela y Willy sumaron 20 puntos cada uno a su casillero, seguidos de Parker con 14 puntos, Paulí y Abrines con 12 e incluso Óscar Da Silva con 10 puntos. Si el mayor de los Hernángomez puede sacar su potencial a relucir, la maquinaria culé marchará como un reloj sucio, sin errores, sin fisuras, todo un gigante imposible de parar. O casi. En esta temporada tan solo tres equipos de la ACB pueden decir que han derrotado a uno de los máximos aspirantes a todos los títulos: Real Madrid, Valencia y UCAM Murcia. El conjunto de Chus Mateo logró dejar al pívot en tan solo 4 puntos, mientras que en la Fonteta y en tierras murcianas, su anotación se fue hasta los 22 y 25 puntos, respectivamente.
Para tener opciones, el Covirán Granada deberá repetir gran parte de su actuación en el Fontes do Sar. De vital importancia será volver a la excelencia en el juego individual, especialmente en defensa. Además, los rojinegros deberán compartir el balón tal y como lo han hecho en su dos últimos partidos, esta será la única fórmula posible para plantarle cara a uno de los mejores equipos de Europa. El Barcelona destaca por su poderío ofensivo, sobre todo, por su porcentaje de acierto, unos números que aumentan con su juego en contraataque y transición. Si se quiere llegar al vivo al final del encuentro, los de Pablo Pin tienen que hacer hasta lo imposible para que los blaugranas no alcancen porcentajes de acierto en el triple demasiado elevados, pues cuando este dato se acerca al 45% es sinónimo de victoria asegurada. Es difícil, claro que sí, algunos dirán que imposible, pero lo cierto es que todos los años se da una sorpresa, ¿Por qué no puede ser el momento de Covirán Granada?