Mismo lugar, distinto rival y una ilusión que sigue intacta un año después
Los rojinegros recuperan a Lluís Costa para uno de los partidos más especiales de la temporada al regresar al pabellón que los vio dar un paso de gigante hacia el ascenso
¿Por qué no? Se suele decir que todo en la vida es posible, ¿por qué va a ser imposible para Covirán Granada dar la sorpresa este domingo? El conjunto rojinegro vuelve a visitar el pabellón que lo vio caer en Copa Princesa ante Movistar Estudiantes y que, tan solo siete días después, regresó para resurgir de sus cenizas como el ave fénix de su escudo para tomar la revancha y lograr un triunfo que acabaría significado el ascenso a la ACB.
Un año y un día después, el panorama es algo distinto. Covirán Granada ya no es el líder de la competición, aunque a estas alturas de la temporada, conseguir una victoria más es casi tan importante como el pasado año. Ahora no será Movistar Estudiantes quien espere como anfitrión al conjunto granadino, sino todo un titán como el Real Madrid.
Mismo lugar, distinto rival, pero la ilusión se mantiene intacta. Hablaba Pablo Pin unos días antes de este duelo de que lo importante en esta recta final de temporada y con rivales del calibre de los de Chus Mateo, las claves para ser competitivos pasan por "mirarnos a nosotros mismos y no solo al rival. Quien dice que no podemos ser nosotros quienes demos la sorpresa en el Wizink". Partidos como el de este domingo no se ganan solo con un buen baloncesto, se ganan creyendo en uno mismo y sus posibilidades.
Para el duelo ante el Real Madrid, Pablo Pin podrá contar, al fin, con Lluís Costa. El base rojinegro regresa a la dinámica de la competición tras cumplir con sus dos partidos de sanción. Costa no disputa minutos desde el 11 de marzo, día en el que Gran Canaria visitó el Palacio de Deportes de Granada. Dos semanas en las que, a pesar de no jugar, ha entrenado a ritmo normal, por lo que se espera que pueda ser titular en el Wizink y que su actuación sea la habitual. En contrapartida, David Iriarte continúa con molestias en la fascia plantar por lo que volverá a descansar.
En lo que al Real Madrid se refiere, la novedad para los blancos parte desde el posible regreso de Anthony Randolph tras nueve meses alejado de las pistas. Los de Chus Mateo llegan a este duelo de Liga Endesa tras sufrir una dolorosa derrota el pasado viernes en Belgrado por 104 a 90 ante el Partizan. La derrota en Euroliga puede llevar a los blancos a, por un lado, arrastrar sus malas sensaciones de hace dos días y dar opciones a Covirán Granada de conseguir el triunfo o bien servir como toque de atención para la plantilla madrileña para subir un punto más su intensidad y concentración en el juego.
Sea como fuere, el viaje a Belgrado del viernes hace que se siembre la duda sobre que jugadores estarán disponibles o entrarán en la convocatoria para medirse a Covirán Granada este domingo, un factor que, tal y como explicó Pablo Pin en rueda de prensa, lleva a su equipo a centrarse más que nunca en juego y no en mirar qué jugadores tendrán enfrente.
La defensa volverá a ser el factor que marque la diferencia. En las dos últimas victorias granadinas, el equipo mostró un nivel defensivo muy alto, no dejando respirar ni un segundo a su rival. Un juego que tendrá que repetir este domingo sí o sí. No será fácil. De blanco estarán jugadores como Edy Tavares, Vicent Poirier, Dzanan Musa y un sinfín de efectivos de una calidad descomunal. El reto es complicado, muchos lo dan por perdido, pero como dicen los dichos populares, torres más altas han caído. ¿Por qué no puede ser Covirán Granada el David que derrote a Goliat?