El momento de cerrar el ciclo
Visita al Pazo con la mirada puesta en acabar con la mala racha y en repetir la actuación ante Breogán en la primera vuelta, momento en el que se consiguió la última victoria
Una semana más buscando el mismo objetivo. El Covirán Granada ha entrado en una especie de 'Día de la Marmota' desde que por aquel 20 de noviembre del pasado año consiguiese su última victoria. Aquel día el Palacio vibraba como nunca, soñaba con el gran inicio de temporada de su equipo e incluso se podían oír algunas voces que a lo lejos que susurraban con cierta ilusión e ingenuidad que el conjunto rojinegro podría llegar a la Copa del Rey. Más de dos meses después, Covirán sigue sumido en su mala racha, una pesadilla de la que no consigue despertar. Aun así, sacando el lado más optimista, e incluso el lado supersticioso, los granadinos arrancan su segunda vuelta de la ACB midiéndose este sábado a Río Breogán, precisamente ante ese equipo con el que sonrieron por última vez.
Para su visita al Pazo dos Deportes, un lugar también con mucha simbología para los granadinos por su lucha por el ascenso en la campaña 20/21, Pablo Pin contará con todos sus jugadores a excepción de las ya habituales ausencias de Luke Maye, Cristiano Felicio y Dejan Todorovic, este último ya operado de su lesión meniscal y del cartílago de su rodilla. Al igual que en las dos últimas jornadas, la esperanza reside en los recién llegados. Contra el Real Madrid, Moore y Caicedo solo llevaban unos días en Granada. Ante Girona, era Ndoye el recién llegado. Ahora, ante Breogán, todos los focos se ciernen sobre los tres recientes fichajes de un conjunto granadino más que necesitado de victorias y de conseguir que sus incorporaciones funcionen.
Esperanza hay, de eso no cabe duda. Pablo Pin señaló el pasado jueves en rueda de prensa que la semana de entrenamientos había consistido, en gran parte, en conseguir que Moore, Caicedo y Ndoye entren en dinámica lo antes posible. El técnico rojinegro aseguró muy convencido que el pívot senegalés "ayudará mucho al equipo y hará una gran pareja con Petit Niang". Además, Pin resaltó el compromiso que Ndoye había mostrado durante los entrenos, no consintiendo que se le "cambiase ni un momento, aun estando realmente cansado".
Si Covirán Granada quiere acabar con su particular mala racha y cerrar un ciclo que ya se ha extendido demasiado en el tiempo, deberá repetir su actuación ante el equipo lucense en la primera vuelta. La agresividad de cara al aro será clave. Los rojinegros necesitan, deben, mostrar una mayor seguridad en su juego en zona, tanto a nivel ofensivo como ofensivo. Cuando ambos equipos se enfrentaron en la primera vuelta de la competición, el plantel granadino se presentaba como uno de los conjuntos con mejores números en lo que a capturas de balón se refiere. Su media de 38,8 rebotes por encuentro sirvió en gran medida para cosechar las cinco victorias que aun rezan en su casillero. Ahora la situación es distinta. La media a bajado y con ella han llegado las derrotas.
Ser inteligentes, sacar faltas a un rival muy físico y dominar el rebote no bastará. La concentración y el controlar los tiempos del partido es el mayor debe de este Covirán Granada. En encuentros anteriores con rivales de la talla de Joventut, Baskonia o Real Madrid, los de Pablo Pin compitieron, llegaron a poner a su rival contra las cuerdas, sin embargo, los minutos tras el descanso dinamitaron todos sus encuentros. El ejemplo más claro se vivió ante Girona. Por ello, Covirán Granada deberá tirar de una sangre fría y una concentración extremas si quieren conseguir su sexto triunfo en la ACB.
Río Breogán, una primera vuelta solvente con capacidad de mejora
Poco o nada ha cambiado del Río Breogán que visitó el Palacio hace dos meses. Las novedades en la plantilla se ciernen sobre Kasibabu, cedido a Palencia al no disfrutar de muchos minutos en el juego de Veljko Mrsic y Sergi Quintela que será baja para este duelo por una fascia plantar que ya arrastraba desde hace tiempo y que lo ha obligado a parar. A parte de estas ausencias, la principal diferencia del conjunto lucense de aquel mes de noviembre al actual pasa por las sensaciones.
Río Breogán tuvo que reinventarse tras su primera campaña en la Liga Endesa. Con un proyecto nuevo ya consolidado, los gallegos encaran la segunda vuelta en una posición, cuanto menos, envidiable. Con sus ocho victorias, los de Mrsic miran con cierta tranquilidad la zona baja de la tabla y con ilusión los puestos de Playoff. Actualmente tan solo una victoria los separa del octavo clasificado que es Valencia Basket.
La primera vuelta de Río Breogán se puede calificar con un notable. Han ganado cuando debían, por ejemplo ante rivales como Fuenlabrada, Betis, Girona, Manresa o Zaragoza. Sin embargo, los "grandes" se le resisten. Precisamente, de los encuentros que ha disputado en casa hasta el momento, un total de ocho, solo ha logrado la victoria en tres, precisamente ante rivales de la zona baja.
El proyecto avanza, pero aun tiene ciertas carencias. Una de ellas se centra en su falta de efectividad desde el tiro exterior. Breogán se posiciona el último de la lisa en lo que ha porcentaje de tiro de tres se refiere con un 30,5%. Aun así, el conjunto lucense compensa esta falta de eficacia en su tiro con una de las defensas más férreas de la competición en lo que al rebote se refiere. Los de Mrsic cuentan con una media de 35,8 rebotes capturados por encuentro, 24,4 en el plano defensivo y 11,4 en el ofensivo.
Al igual que en el partido de ida, los jugadores sobre los que habrá que poner el foco serán Ethan Happ con 11,9 puntos, 8,1 rebotes y 16,9 de valoración por encuentro. Su potencial en el juego interior combina a la perfección con la capacidad anotadora de Scott Bamforth, principal referencia ofensiva de Río Breogán con 12,4 puntos de media.