Un profesor granadino que trabaja en un colegio español en Marruecos reclama ser vacunado contra el Covid-19

El profesor granadino Antonio Javier Gámez se encuentra actualmente trabajando para el Ministerio de Educación en un colegio español en Alhoceima, Marruecos, concretamente en el Instituto Español Melchor de Jovellanos. Este docente no ha recibido todavía ninguna vacuna contra el Covid-19 como sí lo han hecho el resto de docentes españoles mayores de 45 años que se encuentran en Marruecos y que, desde hace dos meses, ya tienen incluso la segunda dosis puesta. Antonio Javier Gámez reclama ser vacunado porque él y todos los docentes menores de 45 años que no han recibido ninguna vacuna todavía tienen “los mismos riesgos” de contagiarse por estar “en aulas con niños y niñas”. “No nos han puesto ni una dosis pese a la insistencia en llamar a la Embajada y a la Consejería de Educación en Marruecos, de las que no obtenemos respuesta”, ha comentado a GranadaDigital.

En Marruecos serían “unos 60 profesores españoles los que se encuentran todavía sin vacunar”, indica este docente granadino, que recuerda que hay 18 centros en el país y en cada uno hay varias personas afectadas. “No nos contestan ni nos dicen nada y los docentes estamos proponiendo hacer una huelga para hacer un poco de presión”, señala Antonio Javier Gámez, quien asegura que esta situación afecta también a otros profesores en otros países que trabajan en centros españoles de excelencia. “España presume de ellos, pero sin embargo nadie se hace cargo de nosotros en el tema de vacunación”, apunta.

Este docente granadino asegura que el grado de preocupación de los afectados es “muy elevado” ya que la mayoría roza los 40 años y el sistema sanitario de Marruecos “no tiene nada que ver con el español”. “Si tenemos la desgracia de coger el Covid, no hay medios ni recursos para paliar los daños que nos pudiera hacer. En España, todos los docentes han sido vacunados ya con una dosis como mínimo desde hace un mes, y a nosotros nos han dejado en el olvido pese a que trabajamos para el Ministerio de Educación y somos españoles y españolas”, insiste.

“Tenemos miedo. El único consuelo que nos queda es que si lo cogemos y nos pasa algo, estamos solos y por lo menos no contagiaremos a ningún ser querido, pero creo que no es el plan, ya que si alguien de nosotros lo cogiéramos, podríamos contagiar a muchísima gente ya que pasamos por muchas clases y tenemos contacto con mucho alumnado, además de los posibles daños que nos podría causar”, afirma Antonio Jesús Gámez, quien ha enviado una carta al Defensor del Pueblo para que tenga constancia de la situación de los profesores españoles que no han recibido aún ninguna vacuna contra el Covid-19.