El PSOE critica el "desgobierno" del Ayuntamiento y señala la "mancha" de la sede del PP

El secretario de Organización del PSOE de Granada, Jacobo Calvo, ha criticado este lunes el "desgobierno" que a su entender vive la ciudad "por culpa de un bipartito, fraguado tras el Pacto de los Trapos Sucios, que a estas alturas de mandato continua más pendiente del 2+2 que de los problemas que miles de familias y pequeños negocios de la capital sufren por culpa de la peor crisis que se recuerda en el último siglo".

Para Calvo, "la situación que hemos vivido durante la pasada semana, en la que PP y Vox han estado culpándose mutuamente sobre quién fue, en última instancia, el que permitiese que Granada tenga al frente de su Ayuntamiento al peor alcalde de su historia, es surrealista. Llevamos dos años así, con un debate que no interesa a nadie salvo a quienes vendieron la ciudad para que PP y Cs se repartiesen otras, mucho más importantes para esas formaciones políticas".

En palabras del responsable de Organización socialista, "llevamos dos años asistiendo a un esperpento que PP y Cs pretenden disfrazar de gobierno y que se parece más a un vodevil guiado más bien por un todos contra todos. Este gobierno es un pollo sin cabeza, descoordinado, incapaz de ofrecer propuesta alguna a las familias y a los pequeños negocios, sumiso a las directrices de Sevilla, que gobierna contra la ciudad, tal y como se ha demostrado con ejemplos tan claros como el del Parque de las Ciencias, la Escuela Andaluza de Salud Pública o el Legado Andalusí".

Así, ha reclamado que PP y Cs reaccionen "para solucionar las colas del hambre en algunos de barrios o para ofrecer ayudas a la hostelería o el comercio" más allá de las ya ofertadas, entre otros aspectos.

En ese sentido, Calvo ha querido señalar que, "uno de los asuntos estrictamente personales que más preocupan al PP es el de la sombra de corrupción que no deja de perseguir a este partido en toda España, algo que desgraciadamente no les es ajeno a Granada", en referencia a la investigación judicial a la empresa a la que el PP alquiló y compró su sede de la calle Andrés Segovia de la capital.

Para el socialista, "lo que pasaba en Génova era una práctica que presuntamente se exportaba. Sería mucho más interesante para la opinión pública que García Egea, el impulsor de la venta de Granada para no perder Málaga o Murcia, en lugar de venir a Granada a dar lecciones, se preocupase más de la mancha que supone para nuestra ciudad que su formación política haya introducido a nuestra ciudad en el mapa de la corrupción".