El 'youtuber' granadino Ramilla de Aventura se enfrenta al viaje en tren más largo del mundo

En sus distintos perfiles de redes sociales se llama 'Ramilla de Aventura'. Indagando en sus vídeos se entiende su nombre a la perfección. Rama Jutglar empezó a subir contenido sobre deportes extremos en plena pandemia. Sin embargo, su canal se inclinó hacia un rumbo viajero más adelante.

Su padre es catalán y su madre de Suiza, dos personas con un afán por viajar que se conocieron en Escocia y que han sido el granito de arena que explica la creación del reconocido viajero. Lo tenía claro, necesitaba recorrerse todos los rincones de este mundo y se puso manos a la obra. Graduado en Realización Audiovisual, lo dejó todo por sus expediciones a lugares remotos.

Para muchos, salir de las fronteras de su propio país supone asumir un miedo razonable, pero Rama no sólo sale de las fronteras, sino que lo hace solo y en dirección a lugares en guerra o bastante peligrosos.

Una aventura solitaria

Hace dos meses atendió a GranadaDigital en una entrevista en la que habló de la posible inseguridad que podía sufrir viajando solo: "Cuando viajé por primera vez solo a la República Checa, con 18 años, me fui 'cagao'. Es decisión, decidir qué quieres hacerlo y tirar para adelante. Nervioso o con miedo vas a estar, pero hay que hacerlo igual"

El primer viaje con el que dio un 'boom' mediático en su canal fue su travesía a Siberia, llegando a alcanzar los 2,8 millones de visualizaciones. Las redes sociales le abrieron cada vez más los brazos. Su valentía y cercanía lo hicieron posible.

De Portugal a Singapur, el viaje en tren más largo del mundo

Comenzó en el sur de Portugal, concretamente en Lagos, -el 1 de mayo a las 6:10 de la mañana- desde ahí, fue buscando rutas para llegar hasta Singapur. Después llegó a Madrid, pasando por Vigo, hasta que se arrancó con una subida por Europa sin frenos.

@ramilladeaventuraEl Viaje En Tren Más Largo Del Mundo - Día 1♬ original sound - Rama

No iba a ser nada fácil, los trasbordos podían conllevar muy poco tiempo en acometerse. Por ello, en algunas ocasiones, tenía que recorrerse media ciudad para llegar a otra estación que conectara con su próximo destino.

El orgiveño se ha encargado de relatar paso a paso la travesía diariamente en su canal. Después de recorrer Europa, llegó a Rusia. Aunque ya la había visitado antes, mostró su "agobio" por desear que no se retrasara el tren que le llevaría hasta Mongolia a la mayor brevedad posible. Si no lo hacía antes de medianoche, el visado ruso se le caducaría.

No tiene reparo en grabar todo lo que le sucede en su travesía, habla de las costumbres del país, de sus problemas del día a día, lo que come... Muchas jornadas el tren se convierte en el refugio nocturno donde tiene que pernoctar con varias personas en una pequeña habitación.

A tenor de lo que se muestra en sus vídeos, la comunicación con las personas autóctonas tampoco parece sencilla en algunos casos. Muchos habitantes de las ciudades que va dejando atrás no dominan el inglés. En China tuvo que lidiar con una tormenta de arena y se refugió en un hotel para pasar unas hora hasta su siguiente tren.

Actualmente, está rozando la frontera de su objetivo. En su mochila ya puede contar que lleva más de 20.000 kilómetros, 30 trenes y un mes de recorrido atravesando la frontera de más de 10 países. Y por su puesto, cuenta con la compañía de sus 300.000 suscriptores.