Un recorrido por el pasado y el encanto del Museo de Bellas Artes

El Museo de Bellas Artes de Granada fue el primer museo que se abrió al público en España

visita a los talleres de restauración del Museo de Bellas Artes de la Alhambra
Restauración del Museo de Bellas Artes | Foto: Antonio L. Juarez (Archivo GD)
Miguel Ángel Pérez
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1958 fue el año de inauguración de las salas altas del Palacio de Carlos V como nuevas instalaciones del Museo de Bellas Artes. Este museo se creó en 1836 con obras recogidas de los Conventos suprimidos, dando lugar a su inauguración en 1839. En 1923 se instaló en la Casa de Castril, al lado del Museo Arqueológico, hasta 1958, cuando quedó abierto al público en el Palacio de Carlos V.

Entre lo más importante de la obra del Museo se representa un gran tríptico de esmaltes de Limoges, llamado 'Gran Capitán'. Se le llama así porque perteneció a este caudillo, cuya viuda lo donó al Monasterio de San Jerónimo, donde servía de portapaz. Está compuesto por seis esmaltes sobre cobre, y en él, se simboliza la Crucifixión, a Cristo llevando la Cruz, la Quinta Angustia, el Juicio, la Gloria y el Infierno.

En el museo se encuentra la relevante representación de la escuela de pintura granadina que inició Pedro Machuca y que desenvolvieron Alonso Cano y Pedro de Moya. Hay una serie bien nutrida de obras, que reflejan las notas características de esta escuela casi desconocida y modesta. Lo que hizo esta escuela granadina fue la representación de una expansión media del genio artístico español durante dos siglos, que revela la profunda intención religiosa, sencillez y reposos en la sinceridad expresiva, digna y templado naturalismo.

Saliendo del Palacio de Carlos V y atravesando la Puerta de los Carros, siguiendo la línea de muralla se alcanza la Torre de los Siete Suelos, cuyo derribo, realizado en 1937, reveló la poderosa silueta de esta y sus defensas.

Sala I

Junto al Tríptico del Gran Capitán, se exhibe el Entierro de Cristo de Jacobo Florentino, trasladado al Museo en 1958 desde la Iglesia de San Jerónimo. En este grupo escultórico el cuerpo de Cristo yace sobre una sábana que sujetan en sus extremos Nicodemo y José de Arimatea, viéndose detrás a las tres Marías y a San Juan.

Sala II

Se exponen tableros a espaldares de la sillería del Coro del Convento de Santo Domingo, obra de Juan Orea y Francisco Sánchez en la segunda mitad del siglo XVI. En esta sala figuran tres cuadros, todos de Fray Juan Sánchez Cotán.

Sala III

Se exhiben lienzos de Fray Juan Sánchez Cotán, entre ellos el de 'Bodegón del Cardo y zanahorias'. En uso de sus lienzos, la 'Aparición de la Virgen del Rosario a San Bruno', aparece el autorretrato del pintor.

Sala IV

Figuran obras de Arias Fernández, Esteban de Rueda, Carducho, Miguel Jerónimo de Cieza, Mateo Cerezo, Juan de Van der Hamen, Pérez Sierra, Antonio del Castillo y diversos anónimos españoles. También se presencia un Crucificado atribuido a Pablo de Rojas y una escultura de San Juan Bautista niño, de Alonso de Mena.

Sala V

La Cabeza de San Juan de Dios, en madera policromada, de Alonso Cano, así como San Pedro Alcántara, San Diego de Alcalá, San José y San Antonio es lo que se exhibe en la quinta sala. La completan esta sala, correspondiente al balcón central de la fachada meridional del Palacio, un San Jerónimo de Alonso Cano y un Ecce-Homo de Pedro Mena.

Sala VI y VII

Resaltan los lienzos de Juan de Sevilla y Pedro Atanasio Bocanegra, como una Dolorosa de Pedro de Mena.

Sala VIII

Se encuentran diversas obras de Bocanegra, Ambrosio Martínez, Pedro de Moya, junto a otras obras de anónimos andaluces, y dos tallas policromadas de Diego de Mena y una imagen, de Verdiguier.

Sala IX

Esta es la sala dedicada a obras de José Risueño. En ella, también se encuentran una talla de San Rafael de Ruiz de Peral, un San Jerónimo de Juan Adán, un Ecce-Homo de Jacinto Molina Mendoza y obras de anónimo francés y de Domingo Echevarría.

Sala X

Se trata de una gran sala de recepción con una rica chimenea de mármol. Entre un conjunto rico de tapices, armaduras, lienzos y mobiliario de época, se ofrecen diversas obras, entre las que destaca una excelente réplica del siglo XVII al lienzo de Rubens 'El Infante Don Fernando en la Batalla de Norlingen', y de Antonio Arias Fernández.

Sala XII

Hay obras de Bernardo Ferrándiz, José Manresa, Mariano Fortuny y Aureliano de Beruete. También hay otros cuadros de José Jiménez Fernández, Antonio Haro y Carlos Haes, así como una Inmaculada de Francisco Morales.

Sala XIII

Hay obras de Muñoz Degrain, Carazo, Roberto Domingo, Joaquín Capuliano Soria Aedo, Pancho Cossío y Cruz Herrera.

Sala XIV

Se ofrecen espléndidos conjuntos de los pintores José María Rodríguez Acosta, José María López Mezquita y Morcillo representados en el Museo de Granada mejor que en ningún otro. Aparte de los diversos vestíbulos con gran gusto decorados y donde se encuentran obras, entre ellas, de Fabrís, Zubiaurre, Cayetano Vallcorba, y de las dependencias de la Dirección, en las que figuran tres dibujos de Vázquez Díaz con retratos de Gómez-Moreno, García Lorca y el retrato de Baroja de Luis Mosquera.