El Reino nazarí de Granada: historia y sociedad
Su último rey fue Muhámmad XII, conocido como Boabdil el Chico, derrocado por los Reyes Católicos
El Reino nazarí de Granada, también conocido como Emirato de Granada o Sultanato de Granada, fue un Estado musulmán situado en el sur de la península ibérica, con capital en la ciudad de Granada, que existió durante la Edad Media.
El reino fue fundado en 1238 por el noble nazarí Mohamed-Ben-Nazar, aunque originalmente tenía su centro de poder situado en Jaén. Unos años después el monarca nazarí trasladó su corte a Granada, alrededor de la cual organizó su nuevo estado. El reino sobrevivió en esta precaria situación gracias a su favorable ubicación geográfica, tanto para la defensa del territorio como para el mantenimiento del comercio con los reinos cristianos peninsulares, con los musulmanes del Magreb y con los genoveses a través del Mediterráneo, lo que hizo que tuviera una economía diversificada.
Sin embargo, fue perdiendo territorios paulatinamente frente a la Corona de Castilla, hasta su definitiva desaparición tras la Guerra de Granada, mantenida entre 1482 y 1492. El reino nazarí de Granada sería el último Estado musulmán de la península ibérica, la antigua al-Ándalus. Su último rey fue Muhámmad XII, conocido como Boabdil el Chico, derrocado por los Reyes Católicos, que se vio obligado a rendir Granada el 2 de enero de 1492. Tras esto fue definitivamente incorporado a la Corona de Castilla como Reino de Granada.
Sociedad
Conforme avanzaba la conquista castellana, muchos andalusíes decidían huir hacia el sur de la península. Así, cuando cayeron en manos castellanas los reinos de Córdoba, Jaén, Sevilla y Murcia, algunos habitantes decidieron marcharse al Reino Nazarí de Granada. Las minorías judía y mozárabe, que habían sido abundantes en periodos anteriores en la zona del Reino Nazarí, casi habían desaparecido durante la dominación almohade.
Sin embargo, tan pronto como se consolidó el Reino de Granada, volvieron los judíos, traídos por los mercaderes cristianos que establecieron sus consulados en las principales poblaciones granadinas. La presencia de mozárabes se redujo a grupos sueltos, refugiados políticos y mercaderes, que fueron autorizados a practicar su religión en privado. Se calcula en 500.000 los musulmanes que abandonaron el valle del Guadalquivir camino del Reino Nazarí o hacia el Norte de África.
Se podían distinguir dos grupos principales: la vieja población autóctona y la nueva población venida de las tierras conquistadas; y dos reducidos: los voluntarios africanos y los elches y cautivos. Las circunstancias en las que vivieron los habitantes nazaríes, hacen que castellanos y aragoneses influyan sobre todo en la indumentaria, la comida y la bebida.