Remedios naturales para combatir la tos en invierno
Los medicamentos farmacéuticos no son siempre la mejor forma de calmar esta afección de la garganta. Muchas veces, la cura de la tos está más al alcance de la mano, con medidas naturales que se pueden encontrar en casa
Llega el invierno, con él las bajas temperaturas, el frío, la humedad, y como consecuencia directa la tos. La tos ocurre cuando los virus, bacterias, polvo u otras sustancias irritan las terminaciones nerviosas en las vías respiratorias, entre la garganta y los pulmones. La tos es la manera en la que el cuerpo trata de liberarse de estas sustancias y limpiar los pasajes respiratorios.
Aunque la tos crónica puede ser signo de una enfermedad seria, la mayoría de las personas considera la tos más como una molestia, que como un problema de salud. Muchas personas, cuando comienzan a tener tos, van directos a la farmacia, pero existen una gran variedad de remedios caseros que funcionan tan bien o mejor que las combinaciones farmacéuticas.
1. “Jarabe” de miel para la tos
Existe evidencia científica de que la miel puede ser efectiva en el tratamiento de la tos y la garganta irritada. Puedes tomarla directamente o, para mejores resultados, mezclar miel con aceite de coco y jugo de limón. También puedes utilizar, con moderación, el viejo remedio de las abuelas antes de dormir: un trago de whisky o coñac mezclado con miel.
2. Un baño caliente
Abre el agua caliente, cierra las ventanas y apaga cualquier tipo de ventilador. El vapor puede ser el peor enemigo de la tos; pero también tu mejor aliado. El vapor trabaja suavizando las vías respiratorias y aflojando la congestión nasal y las flemas en tu garganta y pulmones. (Aunque si sufres de asma, el vapor puede exacerbar la tos).
3. Té de pimienta negra y miel
Para la tos húmeda puedes probar un remedio de té de pimienta y miel; se dice que funciona porque la pimienta estimula la circulación y el flujo de flemas, y la miel es un alivio natural de la tos. Utiliza una cucharadita de pimienta fresca y dos cucharadas de miel en una taza, y luego llénala con agua hirviendo. Tapa y deja remojando por 15 minutos, cuela y bebe. (Ojo, para las personas que sufren de gastritis no se recomiendo ingerir pimienta de ningún tipo).
4. Té de tomillo
En Alemania, el tomillo es un tratamiento contra la tos, las infecciones respiratorias y la bronquitis aprobado oficialmente. Las pequeñas hojas de la hierba contienen un potente remedio que calma la tos y relaja los músculos de la tráquea, al tiempo que reduce la inflamación. Puedes hacer té de tomillo remojando dos cucharadas de tomillo machacado en una taza de agua hirviendo por diez minutos, y luego colar. Añadir miel y limón mejora el sabor y añade fuerza al remedio.
5. Toma muchos líquidos
Beber muchos líquidos, ya sea cualquiera de los tés aquí expuestos o agua simple, puede ser muy bueno para aliviar la tos. Los fluidos ayudan a adelgazar los mocos y mantiene a las membranas húmedas, lo cual ayuda a reducir la tos.
6. Gotas para la tos
Las gotas de mentol para la tos adormecen la parte de atrás de la garganta, lo cuál ayuda a domesticar el reflejo de la tos.
7. Chupa un limón
Este remedio popular es realmente eficiente. Prepara la mitad de un limón y añade sal y pimienta, y después chúpalo.
8. Mezclas comerciales de té
La mayoría de las tiendas de salud tienen una variedad de tés para la tos. El té de hierbabuena, de hisopo o de flor de sauco, por ejemplo, son muy buenos para esto.
9. Jengibre
El jengibre tiene muchísimas propiedades, y se ha utilizado desde la antigüedad por sus propiedades medicinales. Tiene capacidades antistamínicas y descongestionantes. Puedes hacer un té de jengibre añadiendo 12 rebanadas de jengibre fresco en una olla con tres tazas de agua. Deja hervir a fuego lento por 20 minutos y retíralo del calor. Cuélalo y añade una cucharada de miel y exprime un limón. Pruébalo; si está muy picante añade más agua.
10. Orozuz
La raíz de regaliz (o orozuz) ha sido utilizada desde hace siglos para tratar la tos. El orozuz puede ayudar a suavizar las gargantas inflamadas o irritadas para curar la tos. Puedes chupar el palo de orozuz o dejarlo hervir por 20 minutos. Colarlo, añadir una cucharada de miel y un limón y beber.