Residentes de Huerta del Rasillo: "Teníamos muy claro que no nos rendiríamos"
Ayuntamiento de Granada y Vitalia Plus firman hoy el convenio de adjudicación directa por el que la Residencia Huerta del Rasillo continúa su actividad albergando a los trabajadores y usuarios, tras meses de lucha contra el cierre
Todo listo para que hoy se firme el acuerdo entre Vitalia Plus y el Ayuntamiento de Granada, por el que la mercantil con domicilio social en Zaragoza y presidida por Chema Cosculluela, se hará cargo de la gestión de la Residencia de grandes dependientes de Huerta del Rasillo. Un acuerdo que residentes y trabajadores dan por hecho después del anuncio hecho ayer, pero que se creerán cuando lo vean.
Y es que muchas han sido las ocasiones en las que se les ha prometido una solución para volver a llevarse una decepción tras otra. Varias empresas quisieron hacerse cargo, pero ninguna podía asumir una deuda de 700.000 euros con trabajadores y seguros sociales, acumulada por la anterior gestora, la CANF, declarada en concurso de acreedores.
Desde entonces, la lucha de sindicatos y de los propios residentes, que estaban dispuestos a hacer incluso huelga de hambre, ha sido la de reclamar voluntad política, ingeniería burocrática para que la amenaza de cierre de la residencia no se hiciera realidad. Un cierre que vendría por medio de un administrador concursal cuya misión era liquidar una entidad ruinosa, quedando los trabajadores en la calle y los residentes repartidos en otros lugares.
Y esta es la cuestión sobre la que más hincapié han hecho los afectados. Que en este conflicto no había una solución posible que no pasara porque los usuarios siguieran siendo atendidos por sus mismos cuidadores desde hace muchos años. Ahora, la firma del acuerdo por el que la empresa acepta las condiciones de adjudicación directa facilitada por el Consistorio, traerá la tranquilidad y la continuidad a esa convivencia.
UNA LUCHA DECIDIDA
Este periodista llama a Andrés, residente de Huerta del Rasillo, quien dice que "están muy contentos". Atrás queda "tanto tiempo de haberlo pasado mal" y por eso celebra "que los políticos se hayan puesto de acuerdo". Su lucha era persistente y aunque "estábamos en un sinvivir", su decisión era imperturbable: "teníamos muy claro que no nos rendíamos, que seguíamos". La noticia recibida ayer supuso "una fiesta" y se acuerdan "de todas las personas que nos han apoyado en las manifestaciones". Alejandro es cuidador y se muestra satisfecho de lo conseguido. Todos los trabajadores "en principio", continúan. Ven a los residentes volver "a la normalidad". Hoy, 28 de octubre de 2015, es su día.