El Rey Melchor reparte ilusión entre los niños desfavorecidos de calle Elvira
La Cofradía de la Borriquilla lleva nueve años organizando la visita de Su Majestad a la Parroquia de San Andrés, donde acuden familias que recurren a Cáritas durante todo el año
Como cada 6 de enero, huele a magia. Amanece y pequeños y grandes se asoman a sus salones para descubrir qué regalos les han dejado este año los Reyes Magos. Se trata de un día en el que los cinco sentidos se multiplican: vista, oído, olfato, sabor y tacto. Los ojos se abren como platos en caras sorprendidas y llenas de ilusión. Se oye el rasgar de los papeles de envolver que algunos retiran con más cariño, pero que otros hacen que salga un humillo blanco casi invisible. Huele a chocolate caliente que luego se desayuna con el roscón. Y se pueden tocar todos los presentes que Sus Majestades han dejado, para después abrazar a los seres queridos en un día repleto de alegría.
Eso es lo que sucedió con un día de antelación en la Parroquia de San Andrés, en Granada, donde el Rey Melchor, en representación de los tres magos, visitó a los niños de las familias más desfavorecidas de calle Elvira, como se ve en el vídeo que acompaña a esta noticia, disponible en el canal de Youtube de GranadaDigital. Como estaría muy ocupado durante la tarde en la Cabalgata y por la noche repartiendo regalos en las casas de todos los granadinos, se dividió los quehaceres con sus dos compañeros y fue un día antes a este evento.
Organizado por la Cofradía de la Borriquilla (entre otras actividades) desde hace nueve años, este día está señalado en el calendario de los vecinos del barrio. Tras gritar al Rey Melchor para que hiciera su gran entrada en la iglesia, los niños fueron recibiendo uno a uno los paquetes que las ayudantes de Su Majestad les iban dando.
La madre de Lucía, que con tan sólo dos años, aplaude emocionadísima tras recoger una caja mucho más grande que ella, asegura muy contenta que vienen todos los años en este día. Al preguntarle qué ha pedido la pequeña a los Reyes Magos, su madre se ríe: "Como no habla muy bien, más o menos hemos entendido que les ha pedido muñecos y un caballo porque le gustan muchos los animales". De hecho, según cuenta la madre, los Reyes Magos se han adelantado aún más y "ya le han traído unas cuantas cosas", como los muñecos, ropa, colonias, cremas para el cuerpo... Desde que Lucía se ha despertado, "estaba deseando venir a por sus regalos. Está muy contenta porque algo va entendiendo ya", cuenta su madre.
La madre de Rosa y Juan, feligresa de la parroquia desde hace dos décadas, cuenta que ellos también vienen todos los años este día, en el que "los Reyes Magos hacen felices a los niños". La pequeña explica que le han traído una bicicleta y que además, ha pedido unos rotuladores, mientras que a su hermano Juan, los Reyes Magos le han traído un patinete. Rosa afirma que ha sido muy buena, así que cree que le traerán lo que ha pedido. A ambos les ha hecho mucha ilusión ver al Rey Melchor, aunque al pequeño Juan, de unos tres años, le ha dado un poco de vergüenza posar en las fotos junto al Mago.
Como a ellos, a la veintena de pequeños que ha acudido, a quienes les brillaban los ojos. Paquetes de regalo enormes, bolsas de chuches y aplausos inundaban los bancos de la pequeña parroquia. Rocío, con un vestido de dibujos de Papá Noel y con sus ocho años y sus dos coletas, cogía con gran esfuerzo su regalo, que parecía pesar bastante, mientras una de las ayudantes del Rey Melchor le colocaba una serpiente de peluche gigante alrededor del cuello.
Casi una década repartiendo ilusión
Desde que entró al cargo como vocal de Juventud de la Cofradía de la Borriquilla, Sergio Luque lleva cuatro años haciéndose cargo de la organización de esta celebración. Con la ayuda de los pajes y los miembros del Grupo Joven, "preparamos esto para que venga el Rey Melchor y le de los regalos a los niños", manifiesta Luque.
Según cuenta el joven, los regalos que se le dan a los pequeños en este día en la Parroquia de San Andrés son "donaciones que nos hace la gente, todo en colaboración con Cáritas Parroquial". Esta es una iniciativa que surgió del Grupo Joven hace ya nueve años y "es muy ilusionante y te llena mucho por dentro", admite Sergio.
"El objetivo es intentar devolver al barrio un poco de alegría el 5 de enero, repartiendo juguetes con la presencia de los Reyes Magos, que normalmente suelen venir los tres, pero este año, con el Covid-19, como estan tan repartidos en sus tareas, sólo ha venido uno", argumenta Silvia Franco, responsable de Comunicación de la Cofradía de la Borriquilla con una sonrisa.
Los beneficiarios suelen ser familias con las que colabora Cáritas Parroquial durante todo el año. Nona es la encargada de seleccionar las familias que recibirán los regalos cada año. Además, las familias se conocen entre ellas y la gran mayoría de los niños empezaron a ir "cuando eran muy chiquititos y ya van creciendo", dice emocionada Silvia. Casi todos se conocen en el barrio, por lo que "es algo que además nos eriquece mucho, ya no sólo a la cofradía, sino también al Grupo Joven porque es una manera de que ellos, los jóvenes, devuelvan a la sociedad todo lo que tienen", continúa.
La Cofradía de la Borriquilla es la primera que sale el Domingo de Ramos, además de ser la cofradía de los niños, "porque somos la única que saca a los niños vestidos de hebreos", manifiesta.