Seis rutas refrescantes con cascadas por ríos de Granada

Granada es un territorio que cuenta con numerosos espacios naturales para visitar en cualquier época del año. Montaña y costa se juntan en la provincia para generar paisajes de ensueño.

Aparte de las playas de la costa tropical granadina, también existen numerosos ríos de diferentes pueblos. Estos son lugares excelentes para caminar y pasar el día entre agua y vegetación. En muchos de ellos existen cascadas, más grandes o más pequeñas, que dejan una imagen espectacular a todo aquel que las visita.

Con este verano repleto de olas de calor, lo que apetece es pasar un día lejos de las temperaturas tan sofocantes del centro de la ciudad. Por ello, aprovechando los rincones que ofrece Granada en sus pueblos, muchas personas se han aficionado a hacer rutas por estos lugares tan refrescantes.

Río Verde

La ruta por el Cañón del río Verde es de lo mejor para alejarse del calor y pasar el día en verano, pues se puede disfrutar del baño en las pozas que alberga. El paisaje es espectacular, el río baja encañonado formando cascadas, rápidos y profundas pozas ideales para el baño, con sus aguas de color verde esmeralda. Además, es un lugar muy frecuentado para practicar descenso de barrancos.

El inicio de la ruta se encuentra en el lugar conocido como Junta de los Ríos, el acceso al carril es privado, está cerrado por una cancela y hay que pagar 5 euros por persona y 5 euros por vehículo.

A partir del aparcamiento, solo hay que seguir el carril hasta llegar al Cañón del Río Verde, que está señalizado. Descendiendo por el río ya se pueden disfrutar las pozas. Más adelante hay que cruzar un puente que nos llevará de nuevo al río, cruzando se llega a otro puente por el que finalmente llegaremos al Sendero Río Verde en el que se encuentra la cascada.

Río Saleres

Para realizar esta ruta por el Río Saleres hay que ir hasta el Valle de Lecrín. Lo mejor es que a lo largo del recorrido se puede pasear por el interior del río, pasando por pequeños saltos de agua y una magnífica cascada. Hay que atravesar algunos "callejones", angosturas que el río ha trazado entre altas paredes de roca, en los que el agua discurre tranquilamente por el fondo.

Para comenzar el trayecto, lo más fácil es iniciarlo por el aparcamiento que hay en Albuñuelas, una explanada que queda por debajo del centro del pueblo. El acceso está bien señalizado y desde el final del aparcamiento una calle desciende hacia el río

Desde que se accede al río el paseo está prácticamente todo por dentro del agua, salvo en la parte de la cascada. Para sortearla hay que trepar por unas rocas. Han instalado unas grapas metálicas que facilitan el acceso. En este tramo hay que tener cuidado porque la caída tiene bastante altura.

Ruta de los Molinos y Arroyos

La ruta de los Molinos y Arroyos es ideal y de las más frescas, ya que el recorrido por la orilla del arroyo va acompañado siempre por sonido del agua y bajo un denso bosque. Se pueden encontrar varias pozas en las que tomar un buen baño para soportar el calor, y algunas cascadas. La camino está muy bien señalizado y hay carteles a lo largo del mismo con explicaciones sobre cada uno de los puntos interesantes.

Se puede empezar el camino en el centro de la localidad de Algarinejo, desde la plaza junto a la iglesia. Lo más cómodo es aparcar directamente en las Casas de la Redonda. En esta barriada hay un cartel que señala el inicio de la ruta. Desde ahí se llega a un sendero que pasa por los Molinos del Arrabal. La acequia que va por el sendero da a unas escaleras que conducen al fondo del Arroyo Navavieja. El camino que va por la orilla del arroyo lleva a unas pequeñas pozas. Para llegar a la cascada solo hay que seguir un poco más adelante.

Río Dílar

El sendero hasta la cascada del río Dílar discurre acompañando al río, que nace a 3.000 metros de altitud en 'los lagunillos de la Virgen', hasta llegar a la cascada, el mayor atractivo de la ruta. Hay numerosas mesas y pequeñas pozas en el río. Es una zona muy frecuentada por familias y grupos de jóvenes.

El punto de inicio del sendero hasta la cascada del río Dílar es en el Área Recreativa del Río Dílar, junto al Merendero Los Alayos. Para llegar hay que atravesar el pueblo de Dílar, y seguir las indicaciones.

El carril que sigue el río se convierte en sendero y llega hasta una acequia. Continuando por ella, hay que ir hasta el Camino del Canal de la Espartera. Desde ahí, atravesando una pequeña senda se halla la cascada.

Cascada de los Bolos

Existe una ruta que lleva desde el río Dúrcal hasta la Cascada de los Bolos. Es un recorrido en el que prácticamente todo el trayecto transcurre por el borde de una acequia y es muy corto, además hay que andar por el interior del río Dúrcal. El premio final es la preciosa cascada y la poza que se forma bajo ella.

Para comenzar la ruta hay que llegar a Dúrcal, exactamente donde se encuentra el IES Valle de Lecrín. Bordeando el instituto se llega a una acequia, por la que hay que seguir hasta encontrar unas escaleras que bajan al río. Por ahí se sube de nuevo a la acequia hasta los Bolos del Agua.

Siguiendo el camino trazado otra acequia se encuentra la primera cascada, y existen algunas más que se pueden ver siguiendo el mismo camino.

Cascada del río Poqueira

Se trata de una ruta lineal muy sencilla de realizar, ya que discurre en paralelo del Río Poqueira en La Alpujarra. Este río atraviesa un barranco (Barranco del Poqueira), y desemboca en el río Trevélez, poco antes de que este desagüe a su vez en el río Guadalfeo.

Durante el camino existen diferentes cascadas de varios tamaños, mientras se puede disfrutar al mismo tiempo de vistas panorámicas de Pampaneira, Bubión. La ruta se encuentra señalizada con balizas mediante el sendero SL-A 220 la Atalaya, por lo que siguiendo las indicaciones será un breve paseo para disfrutar de la naturaleza sin ningún problema.