Sánchez anuncia nuevos controles a la venta de armas y asegura que su Gobierno no tiene contratos con Arabia Saudí
Ha sostenido que su obligación es respetar los contratos anteriores de la Administración por "seguridad jurídica" y ha recordado que la relación de España con Arabia Saudí no se circunscribe a la industria de defensa
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha confirmado este miércoles que el Ejecutivo impulsará nuevos controles a las exportaciones de material de defensa para verificar su uso en los países de destino; a la vez que ha garantizado que su Gabinete no ha firmado ningún contrato de venta de armas con Arabia Saudí.
Así lo ha anunciado en el segundo turno de su comparecencia ante el Pleno del Congreso para dar cuenta de las relaciones comerciales de España con Arabia Saudí en materia de armamento, tras la polémica generada por el contrato de 400 bombas de precisión suscrito por el Ministerio de Defensa en el año 2015 y, más recientemente, por el asesinato del periodista Yamal Jashogui en el consulado de Estambul.
En este punto, ha aprovechado para revelar que el Gobierno no tiene pendiente ningún contrato de venta de armas con Arabia Saudí ni ha habido ninguna nueva firma durante los más de cuatro meses que lleva en el Palacio de la Moncloa. "Eso muestra un compromiso bastante claro e inequívoco", ha emplazado.
En este contexto, Sánchez ha sostenido que su obligación es respetar los contratos anteriores de la Administración por "seguridad jurídica" y ha recordado que la relación de España con Arabia Saudí no se circunscribe a la industria de defensa, sino que abarca múltiples ámbitos que "dan de comer a mucha gente en España y crean empleo".
A partir de ahí, ha garantizado que el Gobierno rechaza cualquier violación de los derechos humanos y condena el asesinato de Jashogui, a partir del cual "habrá que tomar nota en relación con Arabia Saudí". Sin embargo, ha insistido en la necesidad de "combinar" el respeto a los derechos humanos con el cumplimiento de los contratos.
Pedro Sánchez ha compartido las peticiones de una posición común de la Unión Europea respecto a las exportaciones a la monarquía del Golfo Pérsico después del anuncio de Alemania de suspender las ventas. Pero ha lamentado la "hipocresía" que advierte en este asunto, ya que no hay "equidad comercial" y esa decisión no afecta igual a la economía de todos los países.
Para el futuro, ha confirmado que el Gobierno quiere reforzar los controles a la exportación de armas con una verificación ex-post del uso del material que se vende. También ha aceptado abrir un debate sobre la reconversión de la industria de defensa española, aunque ha recordado que ese es un objetivo a largo plazo.
En este marco, ha pedido al líder de Podemos, Pablo Iglesias, la misma comprensión para el Gobierno que la que dijo tener con el alcalde de Cádiz, José María González, 'Kichi'. "Defendemos la paz y la libertad, pero lógicamente también tenemos que defender los intereses de España", ha insistido.
BOMBAS QUE MATAN "MUCHO, POCO O NADA"
En su respuesta, Iglesias ha recordado que 'Kichi' "no ha dejado de proponer alternativas" para los astilleros de Navantia en la Bahía de Cádiz, aunque ha emplazado a Sánchez a "no esconderse" detrás de los alcaldes y poner sobre la mesa una política industrial que dé soluciones a los trabajadores del sector.
El líder de Podemos ha reconocido que Sánchez y él no están de acuerdo respecto a la relación con Arabia Saudí, pero ha reconocido que aspira a "convencer" al presidente del Gobierno. Y ha aprovechado para censurar la relación de la monarquía española con la saudita.
Por su parte, el portavoz de ERC, Joan Tardà, ha reconocido que el actual Gobierno no es responsable del contrato de las 400 bombas, pero cree que sí debería sentirse "interpelado" e intentar saber el destino de esas armas. "Lo mínimo que puede hacer es asumir que la sociedad española tiene el derecho de saber si estas armas han matado mucho, poco o nada", ha emplazado.