El sector de las bodas en Granada asegura que se han recuperado las cifras prepandemia
Las iglesias, las tiendas de vestidos de novias, las empresas de catering y de despedidas de solteros ya están preparados para la nueva temporada
Mayo está a la vuelta de la esquina. El mes de las flores y el buen tiempo es el primero de la temporada de bodas, que durará hasta octubre. Si a eso se le suma la retirada de la obligatoriedad del uso de las mascarillas en interiores, aprobada hace apenas diez días, todo apunta a que las fiestas para celebrar la unión de dos enamorados volverán a ser como antes del inicio de la pandemia.
Todos los implicados en el sector nupcial señalan el incremento de bodas tras estos dos duros años de restricciones a causa del Covid-19. Las iglesias, las tiendas de vestidos de novias, las empresas de catering y hoteles, los organizadores de despedidas de solteros, así como la Policía Local de Granada están preparados para atender todas las necesidades del gran día de muchas parejas.
Juan Gutiérrez, párroco de la Iglesia del Sagrario, asegura que las cifras de bodas que tienen ya pactadas para estos meses son las mismas que en años anteriores a la pandemia. Asimismo, según indica, "el año pasado, también nos acercamos", a pesar de las restricciones. Habitualmente, se celebran en este templo alrededor de 80 bodas al año, realizándose 72 en 2021. Esto se debe a que esta iglesia tiene un aforo máximo de 350 personas, por lo que, a pesar de las restricciones, los invitados siempre han podido mantener las distancias mínimas para asegurar la seguridad de todos.
Desde Chantú Novias, no dudan en que ha habido un aumento de pedidos de vestidos de novia con respecto a 2020 y 2021, pero no con los realizados en 2019. Hay que tener en cuenta que "este año se han juntado dos tipos de bodas: las que se han organizado para 2022 directamente y las que se habían pospuesto en 2020 y 2021", explica Marina Martínez, directora de la tienda. Además, ahora que ha comenzado la temporada de bodas, hay claramente más encargos que en meses anteriores.
Martínez cuenta que las clientas buscan actualmente vestidos "mucho más cómodos", no solamente las novias, sino también las madrinas e invitadas en general. "Ya no quieren vestidos protocolarios, los prefieren más divertidos, así como zapatos cómodos", aclara. Por otro lado, la directora de Chantú Novias habla de los arreglos que están teniendo que realizar en los vestidos actualmente: "Hay novias que han venido con unos kilitos de más después de la pandemia, hay otras que están igual que estaban hace dos años... Normalmente, las novias de ahora son mujeres jóvenes y se cuidan mucho, así que si ven que han engordado un poco y se acerca la boda, lo intentan solucionar antes de que les tengamos que hacer los arreglos. Por lo demás, hay que hacer lo de siempre: retocar el largo, el ancho de manga, entallar la cintura... Aun así, por lo general, no hay que hacer demasiados cambios".
El doble de invitados y más tiempo en la fiesta
Igual que sucedió con las bodas concertadas para celebrarse en la Iglesia Parroquial del Sagrario, el número de celebraciones en hoteles se recuperó prácticamente al 100% el año pasado, por lo que las cifras actuales son las mismas que antes de la pandemia. Así lo expresa Carmen Artés, responsable de bodas del Grupo Abades en la provincia de Granada: "Había muchas bodas retrasadas dede 2020 que se hicieron en 2021. Por eso se recuperó la cifra ese año, pero no la de comensales ni el número de servicios que se nos solicitaban en los eventos, que se hicieron más cortos y con menos facturación por el Covid-19".
Por su parte, en 2022 sí se ha elevado el número de bodas, pero, sobre todo, han aumentado los servicios y los comensales. Actualmente, hay más del doble de invitados que en las celebraciones de estas mismas fechas el año pasado, así como también han aumentado en más del doble las horas de barra libre, de las copas de bienvenida.... La temporada de bodas, que engloba parte de la primavera, del otoño y el verano al completo, favorece los actos al aire libre gracias a la buena climatología. Esto influye también en los invitados, que prefieren asistir a eventos en exteriores, que copan el 80%.
Además, ya que no hay control de aforo ni cierres perimetrales, los invitados de fuera pueden asistir sin problema. Antes, estos mismos comensales esperaban para confirmar su asistencia hasta el último minuto, mientras que ahora, la previsión es mucho más real. "El miedo ya ha desaparecido prácticamente, aunque hay invitados mayores de 60 años que siguen desconfiando de la situación, en torno a un 20%", continúa Artés.
La desaparición de la mascarilla obligatoria en interiores ha ayudado también en la mayor asistencia a las bodas. "La gente viene con mucha más alegría, se quedan más rato en la fiesta... Hay otras personas muy prudentes que la siguen manteniendo. Por nuestra parte, el Grupo Abades ha decidido que los trabajadores la continúen llevando", añade Artés.
La responsable de bodas en Granada del Grupo Abades habla también de la celebración de bodas pequeñas: parejas que se casaron en su fecha prevista a pesar de la pandemia, pero que han pospuesto su fiesta hasta ahora y la han celebrado a menor escala.
Las bodas se contratan con un año de antelación. En las que se pactaron en 2021 y están previstas para desarrollarse en 2022, los invitados son finalmente el doble de los que se habían confirmado en un principio: "Los novios reservaban sin saber qué panorama habría este año, entonces, lo hacían con miedo, previendo que serían bodas pequeñas, muy familiares e íntimas y ahora, pasada la barrera de las limitaciones por la pandemia, se han doblado los comensales". Esto supone un doble beneficio: primero, económico para la empresa; y segundo, para las parejas, que preparan las celebraciones con mucha más ilusión.
El Grupo Abades Granada celebra de media unas cinco bodas cada fin de semana. "Tenemos todas las de 2022 fechadas y ya se están reservando las de 2023 con bastante velocidad. De hecho, muchas parejas que las habían reservado para el año que viene, las han adelantado a este. Había mucha incertidumbre porque, normalmente, no se organizan a dos años vista, por lo que, por miedo, las habían aplazado y ahora las han adelantado", expone Artés.
Las actividades que se organizan en las bodas también habían cambiado desde la pandemia, pero ya se pueden volver a realizar con más o menos normalidad. Carmen Artés pone varios ejemplos: los photocall, en los que cada invitado cogía pelucas, gafas, corbatas...; también habían cambiado las mesas de autoservicio de embutidos, quesos, sushi, golosinas..., que, durante las etapas más duras de la pandemia, no se podían realizar, por lo que siempre debía haber una persona encargada de servir o estar todo distribuido en bolsitas individuales, recipientes, aperitivos en cucharitas...
Antes de casarse...toca festejar
Si las bodas aumentan, por ende, las despedidas de solteros también lo hacen. En febrero, "como la gente ya veía un poco el final de las mascarillas", comenzaron a aumentar los pedidos de organizaciones para estas fiestas. Al empezar la guerra en Ucrania, con la subida de los precios, las reservas volvieron a bajar, pero, desde hace una semana, "hemos recuperado el ritmo que teníamos antes, no hay gran diferencia con antes de la pandemia", exponen desde Despedidas de Soltero Granada.
La empresa, que organiza un máximo de 30 despedidas cada fin de semana, ahora mismo está gestionando una veintena. Estas fiestas suelen hacerse desde finales de marzo hasta mitad de junio.
Como explican desde esta organización, los hombres piden, en general, más actividades de aventura, como rafting, barranquismo, capeas... Por su parte, las mujeres prefieren el karting o el spa. Ambos coinciden en las peticiones de yincanas por las calles de la ciudad, así como en paintball. Estas son las actividades más típicas para el día; no obstante, las que más se solicitan son las de tarde y noche, como rutas de tapas, cenas con animación, shows de humor, de drag queen, fiestas en pubs, discotecas con entrada y copas o reservado VIP con botellas, limusinas...
El pasado año, se comenzaron a celebrar más planes al aire libre, aunque este año, a la gente no le suele importar tanto que las actividades sean en interior o en exterior. Además, los locales no imponen limitaciones de aforo.
Ante estas fiestas, la Policía Local de Granada tiene una serie de órdenes dadas a sus agentes. "Granada es una ciudad que atrae mucho y es un reclamo porque se hacen ofertas de hospedajes, comida... Los que vienen a las despedidas de soltero lo hacen normalmente de jueves por la noche o viernes por la mañana, y durante todo el fin de semana", cuentan fuentes de la unidad local policial.
Lo que más frecuentan los invitados a las despedidas de solteros es el centro de la ciudad. "Mientras la gente está fresca, conviven con el resto de clientes de establecimientos, pero cuando se desmadran, la lían porque se ponen a hacer el tonto, beben y miccionan en la vía pública, incumplen horarios...", continuán. Desde la Policía Local destacan que hay veces que se disfrazan de agentes de policía, lo que puede desembocar en confusiones con los ciudadanos.
Es en estos casos cuando los policías deben intervenir. En estas fechas, el agente del departamento de redes sociales de la Policía Local está pendiente y cuando ve que hay mensajes en grupos de que van a celebrarse algunas despedidas de solteros, "estamos más atentos: se les dan instrucciones a las patrullas para los fines de semana", concluyen.