La Seguridad Social defiende que el modelo ideal para calcular la pensión sería tomar toda la vida laboral
El secretario de Estado de la Seguridad Social y Pensiones, Israel Arroyo, afirma que tener en cuenta los últimos 25 años "es jugar a los dados con la vida de la gente"
El secretario de Estado de la Seguridad Social y Pensiones, Israel Arroyo, ha reconocido este jueves que el modelo "ideal" a la hora de calcular el importe de la pensión sería tomar en consideración lo cotizado a lo largo de toda la vida laboral, lo que no quiere decir, ha precisado, que se vaya a ir exactamente a ese modelo.
"Si tuviéramos que diseñar hoy cuál es el mejor sistema en un país imaginario donde implantáramos un sistema de Seguridad Social no sería el actual, sino que tendría en cuenta más cuánto ha cotizado una persona a lo largo de toda su vida", ha señalado Arroyo durante su comparecencia en la Comisión de Trabajo, Inclusión, Seguridad Social y Migraciones del Senado.
Pero ello, ha indicado, "no quiere decir que se vaya a extender el periodo de cómputo". "Esto quiere decir que vamos a ir, paulatinamente, posiblemente con periodos transitorios muy largos, a un modelo más parecido a ese modelo ideal que tenemos en mente", ha indicado.
Arroyo ha recordado que en el componente 30 del Plan de Recuperación se describe "perfectamente" qué se pretende hacer en relación a este asunto: adaptar el periodo de cálculo de las pensiones a las nuevas carreras laborales, que "por desgracia" cada vez en mayor medida van a sufrir interrupciones.
"Hay gente que va a pasar parte de su vida en paro, que va a tener una cotización más baja durante algunas etapas porque se ha dedicado a cuidar a un menor o un dependiente y el sistema de cálculo a día de hoy, donde se cogen los últimos años de carrera, a esas personas les perjudica mucho", ha advertido.
Así, por ejemplo, ha asegurado que el sistema actual, que tiene en cuenta los últimos 25 años de cotización para calcular la pensión, "haría polvo" a una persona que se quedó sin empleo en la crisis de 2009, que se convirtió en parado de larga duración y que finalmente accedió a un trabajo en el que ganaba un 30% o un 40% menos que antes.
"Aunque haya cotizado mucho y lleve trabajando desde los 18 años, su pensión va a depender sólo de lo que ha pasado al final de su vida y eso es jugar a los dados con la vida de la gente", ha defendido Arroyo.
En su opinión, ir hacia ese modelo "ideal" que el Ministerio "tiene en mente", con "periodos transitorios para que no se vean afectados las personas que están cerca de la jubilación", sería "más justo y equitativo" y "no supondría una merma de la pensión, sino todo lo contrario, porque tiene que ir acompañado de una mejora del mecanismo de actual de integración de lagunas de cotización, que es exiguo".
"Todo esto se tiene que negociar en la mesa de diálogo social, es una tarea compleja y nos va a llevar su tiempo, pero creemos que vamos a cumplir el hito, porque hay una base suficiente de confianza entre los miembros de la mesa como para que seamos capaces de ponernos de acuerdo en esto", ha señalado.
Para Arroyo, tiene "mucho más sentido y es más justo" ofrecer a los trabajadores, no a los de ahora, sino del futuro, un sistema más equitativo, en el que lo que finalmente perciban de pensión "no dependa de la suerte o mala suerte que hayan tenido en sus últimos años, sino de su esfuerzo contributivo a lo largo de toda su vida".
"Es un poco el modelo que tenemos en mente, y que ya existe, con matices o de alguna u otra manera, en otros países de nuestro entorno, donde las carreras de cotización contemplan de una forma más integral la vida laboral con una perspectiva más larga", ha argumentado.
El problema de personal es "dramático"
Por otro lado, Arroyo ha reconocido que la Seguridad Social tiene un problema de personal "dramático" como consecuencia de la pérdida "acelerada" de funcionarios a partir de 2010. "Las costuras de este sistema empezaron a saltar coincidiendo con la pandemia, pero se han hecho muchas cosas", ha señalado Arroyo, que ha indicado que en 2020 se realizó una primera dotación de personal interino y ahora se acaba de aprobar una oferta de empleo público que compromete un aumento de la plantilla para los próximos tres años.
"El problema de la Seguridad Social es tan grave que en un año no se arregla", ha apuntado el secretario de Estado, que ha puesto de manifiesto la "paradoja" que supone que la Seguridad Social esté ahora más valorada y tenga más importancia que nunca y en medios humanos esté "peor que nunca".
"Entre todos debemos hacer por solventar esta situación (...) y dejemos de utilizar, también en esto, para tirarnos los trastos a la cabeza y remar en la misma dirección para que el servicio se pueda prestar en condiciones óptimas", ha remarcado. En respuesta a las demandas del PP para que se garantice una atención presencial en las oficinas de la Seguridad Social, Arroyo ha replicado que para eso se necesita tener una plantilla con la dimensión adecuada.
Asimismo, ha afirmado que todos los pensionistas o trabajadores quieren acudir presencialmente a un centro de la Seguridad Social a menos que sea imprescindible y ha explicado que se ofrecen diferentes alternativas para la prestación del servicio, no sólo telefónicas, también, por ejemplo, mediante videollamadas.
"Tenemos un sistema multicanal para atender a los pensionistas, pero en última instancia la limitación es la disponibilidad de personal y eso pasa necesariamente porque paulatinamente vayamos recuperando el número de funcionarios que se han perdido en los últimos diez años", ha concluido.