Sierra Nevada, una 'estación fantasma' por las restricciones
La afluencia de esquiadores se encuentra bajo mínimos por lo que los establecimientos se han visto obligados a cerrar o a reducir su plantilla
Con la llegada del invierno, todas las miradas se dirigieron hacia Sierra Nevada con la esperanza de que el coronavirus diese una pequeña tregua y se pudiese salvar la campaña. Durante el mes de diciembre y parte de enero, la estación registró buenos números, dentro de la situación sanitaria que atraviesan tanto Andalucía como el país en general.
Sin embargo, con el fin de la Navidad y la entrada en vigor de las nuevas medidas de la Junta, Sierra Nevada se encuentra en una situación crítica en la que la afluencia de esquiadores es prácticamente nula. Tal y como se ve en el vídeo que acompaña a esta noticia.
Monachil se encuentra cerrada perimetralmente al tener una tasa de incidencia superior a los 500 casos, por lo que solo pueden acceder a la estación aquellas personas que estén federadas. Este es el caso de Irene Villa, esquiadora paraolímpica que ha acudido a la sierra para entrenar.
"Desde que abre la estación venimos todos los meses, pero ayer fue el primer día y dando gracias. Por lo menos los deportistas federados podemos seguir, eso ya es una suerte. Tenemos que estar federados y con el salvoconducto de que venimos a entrenar. Está siendo muy duro para todos los que amamos la montaña y la nieve, al igual que para todos los trabajadores y empresas que viven de esto".
La mayoría de los comercios y establecimientos de la zona, como pueden ser las tiendas para alquilar el material de esquí, se han visto obligados a cerrar sus puertas ante la casi nula afluencia de público. Otros, han apostado por mantener sus establecimientos abiertos para poder atender a los pocos esquiadores que sí pueden acceder a la estación, pero han tenido que prescindir de la mayoría de sus empleados.
"Diferencias brutales, solo estoy yo trabajando y antes estábamos casi 10 empleados. La Navidad ha estado bien, no como otros años, pero se ha podido salvar. Ahora mismo esto es increíble, de momento la cosa está muy complicada. Normalmente alquilamos unos 50 equipos, hoy solo hemos podido alquilar tres. Tenemos que ir viendo lo que va pasando, según veamos la afluencia de gente decidiremos. Si algún día vemos que no viene nadie, lo mismo tenemos que cerrar a las 12 del mediodía, pero hemos apostado por abrir para poder darle al menos un servicio a los pocos esquiadores que vengan", explica una de las pocas trabajadoras que permanece en Sierra Nevada.
En la misma situación se encuentran los bares de la estación. La mayoría han decidido echar la persiana para no tener más pérdidas. Uno de los pocos establecimientos que permanece abierto al público reconoce que viven el día a día con la esperanza de llegar a final de mes. "Esta Navidad estábamos casi completos todos los días, pero con las restricciones vamos día a día para ver si seguimos o no. La plantilla se ha reducido más del 50%. Esperamos que marzo sea un buen mes, sobre todo, que la gente pueda llegar hasta aquí. De momento, los pocos clientes que tenemos son deportistas federados y gente que reside en la propia estación, pero nada más".
La Asociación de Empresarios de Sierra Nevada asegura que los trabajadores que permanecen son los propietarios de los establecimientos, mientras que el resto de empleados se encuentran en un ERTE. Además, los comerciantes denuncian la falta de ayudas tanto por parte de la Junta de Andalucía como del propio Ayuntamiento de Granada. El vicepresidente de la gremial, Daniel Taifeller, afirma que "si abrimos todos, no hay para todos, solo con los deportistas federados y los residentes de Monachil no se puede seguir".
Comentarios
Un comentario en “Sierra Nevada, una 'estación fantasma' por las restricciones”
Antonio
3 de febrero de 2021 at 20:18
Y cual es vuestra propuesta abrirlo y que haya más contagios y más muertos?