Sierra Nevada, la Alhambra y bebidas espirituosas | Vídeo

Un día como otro cualquiera, Patricia Gijón se encontraba probando distintos tipos de ginebra en una cata cuando una de las organizadoras del evento pronunció una frase que despertaría el sentir inquieto de la farmacéutica granadina: “Podéis aprender a hacer ginebra en vuestra propia casa”. La mujer que comentó ese aspecto no se podría imaginar cuánto haría cambiar ese comentario la vida de Patricia, quien se metió de lleno en la creación de ginebras hasta haber acabado presentando su propio producto Gin-Zarí.

En un entorno tan espectacular como es Ácimo Restaurante, un centenar de personas se han reunido para conocer de primera mano lo que esconde esta ginebra con tintes granadinos. Y es que uno de los principales propósitos que guía la vida tanto de Pablo Molina, chef y propietario de Ácimo Restaurante, como de Patricia Gijón es apostar por los productos 100% granadinos por lo que significa para ellos la riqueza del sabor de la provincia.

Una identidad patente en cada uno de los detalles que componen la botella de Gin-Zarí, decorada con la flor de agave que recuerda los artesonados de la Alhambra. Pero tampoco ha querido dejar de lado una de las características imprescindibles de su persona: su profesión de farmacéutica. Así, el envase está inspirado en las botellas de formulas magistrales y lleva la guirnalda de enebro que rememora la serpiente del símbolo farmacéutico.

“Se trata de una ginebra con orígenes humildes ya que nace de un pequeño alambique de cobre de tres litros que me regaló mi marido”, muestra satisfecha Patricia entre el bullicio de risas y conversaciones que se empieza a apoderar del lugar. “Decidí ir a la locura y presentarme a Ginmotive con esta ginebra y resulta que me compraron todas las botellas que llevaba, incluso me venía gente diciendo que le habían comentado que no se podían ir sin probar esta ginebra”, recalca.

Con la noche apoderándose del lugar, los cócteles de ginebra se empiezan a repartir entre unos invitados cada vez más satisfechos por haberse dirigido al lugar esta noche. Pero el paladar de cada uno de los asistentes no solo iba a conocer la riqueza de esta ginebra seca compuesta con cítricos que dulcifican su sabor, sino que sus papilas gustativas iban a poder disfrutar las grande posibilidades que tiene la sinergia entre comida y coctelería de la mano del chef y propietario de Ácimo Restaurante Pablo Molina.

“Esta unión que hemos hecho entre cocina y Gin-Zarí nace como todas las cosas en la cocina, probando la mezcla, enamorándote del producto y viendo que la mezcla es brutal”, muestra satisfecho Pablo Molina mientras observa cómo los platos se vacían a una acelerada velocidad en la estancia.

Pero Ácimo Restaurante y Gin-Zari no solo buscan demostrar la potencia de los productos granadinos, sino que se encuentra en una lucha constante por hacer de la innovación su principal meta. “Una de las cosas que nos guía en el día a día es la innovación. Hemos preferido hacer esta cata de forma más divertida y con propuestas distintas para que la gente esté contenta e integrada y conozca la riqueza de esta unión", afirma Pablo Molina.

“Ácimo Restaurante y Gin-Zari se sinergian en todos los aspectos. Pablo ha conseguido integrar la ginebra con el plato tanto en la restauración como en la coctelería y eso da mucha versatilidad”, añade Patricia Gijón.

Porque la riqueza y encanto que tiene Granada es indescriptible, Gin-Zarí y Ácimo Restaurante se han hecho uno esta noche para demostrar que la provincia y todo lo que a ella rodea puede ser una fuente incesante de calidad y sabor.

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