Soberbio concierto de Nine Inch Nails en el Primavera Sound
En la jornada de clausura del festival barcelonés, la lluvia dejó paso al buen tiempo, buena tarde y como norma habitual mucho frío en la madrugada primaveral. De esta forma y con las buenas temperaturas durante las horas de sol, los hipsters pudieron lucir sus mejores galas o las peores depende de como se mire. Jornada en la que definitivamente descubrimos que John Talabot tiene un poder de convocatoria enorme, dado que alguien decidió que pinchara en el Bowers & Willkins + Boiler Room, una carpa preparada para aproximadamente 450 personas como mucho. En el acceso de entrada veinte minutos antes de la apertura de puertas de la mencionada carpa, se hacinaban alrededor de 3.000 personas ávidas por conseguir el preciado premio de ver a su ídolo. Concentración de asistentes que puso muy nervioso a la organización hasta que se solucionó dicho caos.
La tarde comenzaba bien pronto a las 16:00h en el Auditori, gran instalación, gran acústica que hace que los conciertos íntimos se hagan grandiosos y los grandes majestuosos. Silvia Pérez Cruz y Raül Fernandez Miró, nos ofrecían un recital delicado y a la vez visceral, presentándonos su trabajo “granada”. Canciones de otros adaptadas a los desvaríos eclécticos de Raül y la maravillosa voz de Silvia, la voz más sobrecogedora que ha aparecido recientemente en el panorama musical del país. En ciertos momentos su voz era embargada por la de Estrella Morente, atreviéndose con adaptaciones de Morente entre otros. Sencillamente magistral dúo que toco la fibra al respetable en tan complicada hora.
En el mismo lugar, L´Auditori del Fórum era el lugar para poder disfrutar de la versatilidad del cuarteto de cuerda más conocido y reconocido de la música, Kronos Quartet. Cuarenta años siendo un referente de la música, introduciendo nuevos lenguajes y transformando el cuarteto de cuerda tradicional. Virtuosismo a raudales, innovación y experimentación, sorpresa y ejecución, Kronos Quartet puede con todo, desde piezas escritas por Lauri Anderson, hasta bandas sonoras de films como “The Fountain” o “Requiem For a Dream”. Samplers, ritmos electrónicos, pedales de efectos, anillos moduladores del sonido y otros juguetitos son el I+D de estos ejemplares músicos.
Tras abandonar L´Auditori y emprender marcha hasta el escenario Sony, Television comenzaban su concierto 10 años después de una gran noche en el Primavera Sound de aquel año, compartiendo escenario con Sonic Youth y The White Stripes. Lo hicieron interpretando su álbum de 1977 “Marquee Moon”, un trabajo que ha influenciado a muchas bandas y que ha otorgado a Television el status de leyendas. Aunque parece que la forma se la dejaron en el camino, detectando cierta artrosis en su música, aunque el público les brindó ovaciones y vítores en todo momento a pesar de su baja forma.
Pasada la medianoche, llegaba el turno de los protagonistas o cabezas de cartel, Nine Inch Nails, con Trent Reznor a la cabeza presentaba su nuevo espectáculo en Barcelona. Impresionante diseño de luces, sensacional sonido, extraordinaria interpretación. La expectación de la visita de los americanos al Primavera Sound era evidente y una hora antes ya había miles de personas posicionadas en las primeras filas para poder ver el show desde el mejor punto de visión. Los espectadores en su mayoría fans incondicionales de la banda, corearon sus temas y se dejaron la piel en bailes y saltos incluidos algo muy parecido al pogo tradicional del punk. NIN es una banda de larga tradición, ya hace casi 25 años de su debut y tiene incondicionales en todos los rincones del mundo y Barcelona no es una excepción. Soberbio Trent Reznor y sus chicos, en especial Ilan Rubin, batería, bajista, guitarrista, nada se le atraviesa al joven estadounidense. Sin lugar a dudas el concierto de la jornada con una manufactura más que sobresaliente.
En el escenario Heinecken, llegaba la hora de Foals, la banda de Oxford, tierra de grandísimos artistas y bandas de rock, presentaba su último trabajo “Holy Fire”. Pop con incrustaciones de funk atmosférico, guitarras minimalistas y fogosas, gusto por el baile. Los británicos derrochaban espíritu y ganas de triunfar. Conexión con el público hasta el punto de que su líder Yannis Philippakis, se dejaba caer varias veces por la arena donde los espectadores le recibían entusiasmados. Un concierto colorista, positivo, alegre.
Si bien la noche se cerró prácticamente con el concierto de Foals, todos sabemos que un cierre de edición del festival más importante del país como es el Primavera Sound, no se entiende sin el nombre del hombre de los cierres, Dj Coco, residente de Nitsa, Sala [2] de Apolo y hombre encargado año tras año del cierre del festival. La imagen del escenario Ray Ban completamente abarrotada, también en escena, amaneciendo y la gente disfrutando de una sesión de temazos, es una visión que se queda marcada en la retina de cualquiera. Un cierre sobrio, pero efectista, Dj Coco no es un nombre reconocido mundialmente pero realiza su sesión muy profesionalmente y tiene sus incondicionales.