Souvenirs granadinos con encanto
Fotografías polaroid con imágenes históricas de la ciudad o postales en 3D son algunos de los recuerdos más originales que se pueden encontrar en Granada
Cuando vamos de vacaciones a una ciudad queremos llevarle un trocito de ella a nuestros seres queridos. Los más recurrido es una postal donde salga el monumento más característico de la ciudad o un imán con el nombre de la misma. Pero si queremos ser originales y regalar algo más singular, os enseñamos dos establecimientos de Granada con encanto propio.
REGALOS DE LA GRANADA 'ANTIGUA'
Paseando por la Gran Vía de Colón, nos puede llamar la atención una pequeña tienda rodeada de postales en blanco y negro y discos de vinilo. Dentro encontramos a Francisco Aguilar, dueño del establecimiento. “Tengo un archivo muy grande porque mi padre y mi abuelo eran fotógrafos”, cuenta Francisco sobre la gran cantidad de fotos antiguas que encontramos en su tienda. A parte del amplio archivo fotográfico que posee, “la gente que nos conoce nos trae más y tengo digitalizadas un montón”.
Aunque nos encontremos en 2018, el encanto de las fotografías polaroid sigue existiendo y en el mismo establecimiento podemos comprar cámaras antiguas. Los granadinos más longevos, echan de menos icónicos edificios que fueron derrumbados como la Casa de Correos que se ubicaba en Colón o el tranvía. “A la gente le encanta lo antiguo de Granada y demanda mucho este tipo de cosas”, asegura Francisco.
La pared de la tienda se encuentra llena de estampas de Fray Leopoldo. “Mi padre y mi abuelo empezaron este tema. Donde actualmente se encuentra la Agenda Tributaria había unos jardines y allí empezaron a hacer fotos de Fray Leopoldo”. En febrero de 1970, el abuelo de Francisco abrió este establecimiento que a día de hoy es uno de los puntos más llamativos de toda la Gran Vía. Ya seas granadino enamorado de la Granada antigua o un turista que busca algo más original que llevarse de recuerdo, hacer una parada en este local es casi obligatorio.
POSTALES 3D DE GRANADA
En otra ubicación de Granada, en la Carrera del Darro, encontramos la Galería Alea. Un lugar donde, además de contemplar obras de varios artistas, podemos encontrar souvenirs bastante originales. Eugen Badurina, venezolano de padre croata y madre austriaca, lleva más de treinta años en España. Junto a su socio belga Tim, es dueño de este negocio que, aunque aúna tantas culturas y nacionalidades, refleja la belleza de los rincones de la ciudad nazarí. “La idea detrás de la galería es por un lado dar oportunidades a todos estos artistas emprendedores que empiezan desde cero, y por otro lado, crear algo diferente a lo que se hace en Granada”, explica Eugen.
Al entrar a la galería nos llama la atención la decoración basada en varias décadas atrás. Encontramos un clásico secador de peluquería utilizado como lámpara, una antigua televisión en la entrada y el automóvil más deseado en los años 70 convertido en sofá. Las paredes del establecimiento están llenas de ilustraciones de paisajes de la Alhambra, calles míticas de la ciudad, cajitas de música con bandas sonoras y retratos de las caras más reconocidas a lo largo de los tiempos como Lorca, Frida Kahlo y John Lennon, entre otros.
"Nosotros hacemos un souvenir artístico, todo hecho a mano”. Las características postales en 3D de lugares de Granada que nunca pensarías encontrarte en una tarjeta, llaman mucho la atención a los visitantes de la ciudad que se pasan por la pinacoteca. “Lo que no hacemos nosotros lo hacen los artistas. Más o menos hay ocho o nueve artistas que van rotando de los que la mayoría son de Granada”, comenta Eugen acerca del origen de las obras. “Hacemos un seguimiento de los compradores y encontramos un 60% que pertenecen a turismo internacional y un 40% a turismo nacional”, analiza Eugen sobre los clientes.
Si la Carrera del Darro tiene de por sí su propio encanto, la Galería Alea añade otro toque de arte reflejando la ciudad granadina desde otro ángulo. Y tanto para los granadinos como para los turistas, tener una de sus obras colgada en las paredes de nuestra casa, supone un privilegio para la vista.