Los trabajadores de la prisión de Albolote paran a protestar contra las últimas agresiones
Demandan una mayor seguridad y la cobertura de plazas vacantes, que en Andalucía ascienden a más de medio millar
Trabajadores de todos los centros penitenciarios de Andalucía, convocados por CSIF y Acaip-UGT, han protagonizado este viernes un paro de 15 minutos -entre las 11:30 y las 12:00 horas- para protestar por las últimas agresiones ocurridas en las prisiones de Algeciras y de Cuenca. Demandan una mayor seguridad y la cobertura de plazas vacantes, que en Andalucía ascienden a más de medio millar. A este paro se han sumado también los funcionarios de prisiones de la cárcel de Albolote (Granada), con el que han querido expresar su reconocimiento y apoyo a los compañeros agredidos.
Según los cálculos de la central sindical, el déficit de funcionarios de prisiones que afecta a los centros penitenciarios andaluces es actualmente de 549 vacantes sin cubrir en las relaciones de puestos de trabajo (RPT) de estos centros, lo que quiere decir que el 9,2% de la plantillas de los mismos no está cubierto. Se trata de una cifra “inadmisible” de carencia de efectivos en los centros penitenciarios, cuyo personal “afronta su trabajo diario con una enorme falta de medios y bajo una gran presión”, ha concluido el responsable sindical.
Por su parte, el sector de Instituciones Penitenciarias de CSIF Granada cifra en casi un centenar de trabajadores el déficit de efectivos que afecta tanto al centro penitenciario de Albolote como al Centro de Inserción Social (CIS) Matilde Cantos de Granada. En concreto, en la prisión granadina hay 73 vacantes sin cubrir, es decir, el 14,7% de la plantilla, mientras que el centro de inserción social de la capital registra un déficit de 13 efectivos, lo que refleja que un 18,8 % de las plazas de funcionario están sin cubrir a día de hoy.
Así lo ha denunciado el delegado de CSIF Granada de Instituciones Penitenciarias, José Antonio Molina, quien ha considerado “inadmisible” esta carencia de efectivos en nuestra provincia, con una prisión que es la más castigada de toda la comunidad andaluza en cuanto a falta de personal y en donde se tiene que “afrontar el trabajo diario con una enorme falta de medios y bajo una gran presión”.
CSIF exige al Ministerio del Interior “más seguridad, que se cumpla el protocolo contra las agresiones, que se nos proporcione una formación continua y adecuada al trabajo que desempeñamos y que, de una vez por todas, se nos reconozca como agentes de la autoridad en el ejercicio de nuestras funciones”.