Tres senadores por Granada reclaman un 'finiquito' de más de 8.000 euros tras trabajar cuatro meses

Entre la disolución del Senado, el pasado 3 de mayo y las elecciones generales del 26 de junio, 194 senadores, de los 266 que hay en España, están de “vacaciones forzosas” hasta que las urnas decidan quién vuelve a su recuperar escaño y quién no.

De cualquier forma, el Senado les ofrece la oportunidad de solicitar la “indemnización de transición por disolución”. Esta indemnización se paga a 154,54 euros por cada día que no trabajarán para el Senado. Si uno hace la multiplicación (154,54 euros por los 54 días que hay entre las dos fechas citadas), los senadores cobrarán en total, 8.345,16 euros, que se cobran de una vez y que son incompatibles con cualquier ingreso o sueldo público o privado. Esa cifra corresponde a dos meses de su trabajo, sin contar las dietas y complementos.

Por la provincia de Granada hay cuatro senadores. José Martínez Olmos (PSOE), Ana María Gámez Tapias, (PSOE), María Rocío Díaz (PP) y Sebastián Jesús Pérez Ruiz (PP). Y, tanto los dos socialistas, como la concejala del Ayuntamiento de Granada, Rocío Díaz, han hecho esa petición al Senado, así que pronto figurará en sus cuentas bancarias esta especie de “paro”.

A este recurso económico tienen derecho todos los senadores que pierden su escaño por la convocatoria electoral. No la pueden pedir, por el contrario, los 71 que sí siguen teniendo actividad porque forman parte de la Diputación Permanente de la Cámara, el único órgano parlamentario que se mantiene entre legislatura y legislatura. No obstante, seguirán cobrando su nómina habitual.

Este es el caso de Sebastián Pérez, que no ha “abandonado” el Senado puesto que ahora , tras ser portavoz en la Comisión Suplicatoria, ha pasado a ser miembro suplente del Grupo Parlamentario Popular en la Diputación Permanente del Senado.

TRECE RENUNCIAN

La petición de los senadores granadinos se suma a la que también han hecho 178 senadores más, quiénes también han decidido reclamar esta indemnización. Solo 13 han optado por no pedir este derecho que la Cámara del Senado acordó en 2006.

Los senadores de la próxima legislatura comenzarán a generar un sueldo al día siguiente de las elecciones, el 27 de junio, aunque no lo cobrarán hasta que se constituya el nuevo Senado y ellos tomen posesión del cargo, en julio.

¿QUÉ COBRA UN SENADOR?

En el Portal de la Transparencia del Senado se pueden consultar qué cobra cada senador por su actividad.

Todos ellos, los 266 que forman la Cámara, parte de un salario base de 2.813,87 euros al mes. Además de esta cantidad fija, a cada uno de ellos les corresponde una indemnización que cubre “los gastos que les origine la actividad de la Cámara”, que supone 1.823,86 euros más para los diputados de circunscripciones distintas a Madrid y 870,56 euros más para los electos por Madrid.

Aparte, cobran un complemento mensual en función del cargo que ocupen dentro del Congreso. En esta tabla especifica hasta cuánto.

 

Las dietas por desplazamientos que realizan por trabajo se cifran en 150 euros por día si es en el extranjero, y 120 euros diarios, si es dentro del territorio nacional.

Además, los senadores tienen una serie de ayudas para cubrir los gastos de transporte en medio público (avión, tren, automóvil o barco). Se trata de un reembolso de gasto, es decir, no se facilita la cantidad anticipadamente, sino que se le abona directamente el billete a la empresa transportista. Este reembolso se cumple salvo si éstos usan su propio vehículo, que se abona a sus cuentas 0,25 euros por kilómetro, tras justificar la ‘carrera’.

Por otro lado tienen asignado un bono taxi anual de 3.000 euros.

Además, el Senado facilita a sus miembros teléfono móvil corporativo en el que reciben las convocatorias de la Cámara por SMS, y una tableta para la presentación electrónica de iniciativas.