Celebran por videoconferencia una vista por el caso de la bebé hallada muerta en un vertedero
La pequeña fue localizada sin vida dentro de una bolsa de basura, desnuda y con el cordón umbilical cortado
La Sección Primera de la Audiencia de Granada celebró el lunes una vista por videoconferencia en el caso de la bebé hallada muerta el 16 de enero de 2018 en el vertedero de Alhendín (Granada), en el que están acusados la madre y el abuelo materno de la pequeña, para decidir si la progenitora sigue en prisión provisional hasta la celebración del juicio. La resolución se conocerá en unos días, según han informado a Europa Press fuentes judiciales.
Salvo nuevas prórrogas, el juicio contra la madre y el abuelo de la bebé fallecida se celebrará a partir del 4 de mayo por la fórmula del jurado popular. La Fiscalía ha solicitado para ellos prisión permanente revisable por un delito de asesinato con alevosía con la agravante de parentesco.
La pequeña fue localizada sin vida dentro de una bolsa de basura, desnuda y con el cordón umbilical cortado. El informe preliminar de la autopsia determinó que nació "viva", "sana" y a su tiempo.
El fiscal sostiene que la madre, Fátima A.O., y el abuelo materno, "en ejecución de un plan preconcebido y actuando de mutuo acuerdo, decidieron --con antelación-- deshacerse del nuevo bebé que venía en camino", motivo por el que intentaron ya desde un principio "ocultar por todos los medios el embarazo" no acudiendo a revisión o control médico alguno.
La bebé, fruto de una relación "tormentosa" con un joven con el que la madre tiene otra hija, nació entre el 14 y el 16 de enero de 2018 en la vivienda familiar donde residían los dos acusados junto a otros familiares en Talará, perteneciente a la localidad de Lecrín.
Una vez que se verificó el alumbramiento de la pequeña, tras cortar el cordón umbilical con un objeto afilado, "la golpearon fuertemente con ánimo de acabar con su vida hasta ocasionarle la fractura del hueso occipital, así como una hemorragia en tiroides y riñones, lo que inevitablemente, y en situación de total indefensión del bebé, produjo su muerte".
A continuación, según el relato del fiscal, se deshicieron del cuerpo introduciéndolo en una bolsa de basura anudada y arrojada a algún contenedor, siendo localizada el 16 de enero en la citada planta de reciclaje por un operario. Posteriormente limpiaron los vestigios que había en la habitación donde se produjo el parto y trasladaron al cuarto del abuelo materno la cama de matrimonio donde posteriormente se verificó que se había producido el nacimiento.
Para "evitar sospechas del crimen atroz cometido", la acusada envió esa misma mañana por Facebook Messenger un mensaje a su pareja y padre biológico de la pequeña diciéndole que el día anterior se había caído en la ducha y en consecuencia había perdido al bebé. Posteriormente, ante las sospechas del joven, ella llegó a darle tres versiones distintas de lo ocurrido y el padre llegó al convencimiento de que había asesinado a su bebé.
Según la autopsia, la causa fundamental de la muerte fue un traumatismo cráneo-encefálico y la causa inmediata un shock postraumático. El bebé presentaba diversas lesiones y fracturas, unas ocasionadas en vida que le produjeron su muerte y otras después de fallecer, como consecuencia del paso por distintos lugares hasta que fue encontrada en el vertedero.
La Audiencia Provincial decretó el pasado julio la puesta en libertad provisional del abuelo materno tras solicitarlo su defensa, que ha venido pidiendo el sobreseimiento de la causa para su cliente alegando que no ha participado ni directa ni indirectamente en los hechos y que no existe "ninguna prueba" que le vincule con su muerte, al margen de la declaración de su hija.