Trucos para conciliar el sueño en verano y evitar las noches de insomnio
Vencer el calor nocturno y dormir fresco se convierte en una tarea más sencilla con estos tips eficaces
Carlos Ruiz
Las altas temperaturas pueden convertirse en un obstáculo para descansar adecuadamente, afectando al bienestar y rendimiento diario. En busca de soluciones, muchos han explorado métodos innovadores y prácticas tradicionales para lograr un descanso reparador durante las noches más calurosas del año. Cabe destacar que aunque estas prácticas carecen de evidencia médica, hay muchos usuarios en la red que afirman que les ha servido.
Dormirse inmediatamente: el método viral de TikTok que usan los Navy Seals americanos
Recientemente, ha surgido en redes un vídeo viral que promete hacerte caer rendido en un minuto. Se trata de un método que utilizan soldados de todo el mundo y, en concreto, los reputados Navy Seals americanos. El ejercicio en cuestión trata de respirar durante cuatro segundos, mantener el aire en los pulmones siete segundos y exhalar lentamente durante ocho segundos. Parece ser que este sencillo método, según lo compartido en redes sociales, ayuda a inducir la relajación y a incrementar los niveles de melatonina, la hormona responsable de regular el sueño.
Otros trucos para atenuar el calor en verano
Mantén las persianas bajadas: Durante el día, cierra las persianas o cortinas para bloquear la entrada directa de luz solar y mantener tu hogar fresco.
Ventilación cruzada: Por la noche, abre las ventanas opuestas para crear corrientes de aire que ayuden a refrescar las habitaciones.
Apaga las luces: Reduce el uso de luces interiores y utiliza bombillas LED más eficientes, que generan menos calor.
Manténte hidratado: Bebe agua regularmente para mantenerte hidratado y ayudar a regular la temperatura corporal.
Ducha fría o baño: Refréscate con una ducha o baño de agua fresca para bajar la temperatura corporal antes de ir a dormir.
No todo son las altas temperaturas
Muchas personas atribuyen los problemas para conciliar el sueño en verano principalmente a las altas temperaturas, pero hay más factores en juego. Por ejemplo, los días más largos y la mayor exposición a la luz solar pueden desregular los ritmos circadianos, dificultando el sueño. Además, en esta época se rompen las rutinas, se consume más cafeína y alcohol, y es habitual estar más activos por las noches. Mantener horarios regulares y un ambiente fresco en el dormitorio son prácticas que pueden ayudar. También es importante reducir el uso de pantallas antes de dormir y evitar el consumo excesivo de líquidos justo antes de acostarse para minimizar las interrupciones nocturnas por visitas al baño.
