Un abogado de 'El Chapo' asegura que su cliente es un chivo expiatorio y que el cártel sobornó a Peña Nieto
El cártel de Sinaloa ha jugado un papel importante en la violencia entre bandas rivales, que ha asolado áreas de México y desafiado a varios gobiernos
Jeffrey Lichtman, abogado de 'El Chapo' Guzmán, ha asegurado este martes que su cliente es un chivo expiatorio y que el cártel de Sinaloa sobornó al presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, así como a su antecesor, Felipe Calderón.
"Se lo acusa de ser el líder mientras los verdaderos líderes viven libremente en México", ha aseverado Lichtman durante el primer día del juicio contra Guzmán por tráfico de drogas en Estados Unidos. "En verdad no controlaba nada. Ismael 'Mayo' Zambada lo hizo", ha añadido.
En este sentido, ha afirmado que Zambada, al que acusa de ser el verdadero jefe del cártel, nunca estuvo en prisión y continúa prófugo de la Justicia. El portavoz de Peña Nieto, por su parte, ha indicado que la acusación es "falsa".
Los comentarios de Lichtman han tenido lugar después de que el fiscal Adam Fels expusiera el caso, con el que la Fiscalía busca demostrar que Guzmán pasó de ser un traficante de marihuana de poca monta en la década de 1970 a líder del poderoso cártel de Sinaloa y dejó un rastro de violencia en su ascenso.
Los fiscales federales han señalado que como líder del cártel, Guzmán, de 61 años, ha dirigido envíos enormes de heroína, cocaína, marihuana y metanfetaminas a Estados Unidos. El acusado se enfrenta a 17 cargos criminales y si es condenado podría ser sentenciado a cadena perpetua.
El cártel de Sinaloa ha jugado un papel importante en la violencia entre bandas rivales, que ha asolado áreas de México y desafiado a varios gobiernos. Más de 200.000 personas han muerto, muchas de ellas en enfrentamientos entre cárteles desde que el Gobierno mexicano envió tropas para frenar a las bandas de narcotraficantes en 2006.
Guzmán, que escapó dos veces de cárceles de máxima seguridad en México, ha permanecido aislado en una prisión de Manhattan y ha sido trasladado al tribunal de Brooklyn en una caravana con fuertes medidas de seguridad.