Un estudio de movilidad califica la LAC de lenta, incómoda e imprevisible

La Línea de Alta Capacidad lleva generando opiniones ciudadanas y políticas desde el mismo día que se puso en funcionamiento. A los cruces de declaraciones entre el equipo de gobierno y la totalidad de la oposición municipal ha habido que ir sumando diferentes propuestas de mejora y diversos estudios, como el que ayer hizo público el PSOE. A través del análisis de la movilidad entre los barrios y el centro de la capital, el documento arroja datos que le han permitido afirmar al portavoz socialista en el Consistorio granadino, Francisco Cuenca, que la Línea de Alta Capacidad ha convertido la movilidad granadina en algo "lento, incómodo e imprevisible".

LOS TRES PECADOS CAPITALES DE LA LAC

De entre los numerosos datos que revela el estudio se pueden sacar, principalmente, tres conclusiones o 'pecados' del sistema LAC, a saber:

• Lentitud: de media, la inclusión de la Línea de Alta Capacidad ha hecho que el sistema sea un 37% más lento. Esto se traduce, según el estudio, en que los granadinos pasan ahora hasta 7 horas más en el transporte público.

Para llegar a esta conclusión, los responsables del estudio se han subido al bus para hacer los recorridos más habituales de los ciudadanos: de zona norte (carretera de Málaga y zona Alcampo) al centro de Granada y de zona sur (avenida de Dílar y avenida Cervantes) también al centro, concretamente hasta la Catedral. Los trayectos, de ida y vuelta, se hicieron en las horas de mayor afluencia de pasajeros (de 9 a 10 de la mañana y de 2 a 3 de la tarde).

Así, el estudio muestra cómo dependiendo del trayecto, la diferencia entre el tiempo que se invertía antes de la LAC y el que se invierte ahora ha crecido de manera considerable. El recorrido que más se ha visto afectado con el cambio ha sido el que une la del Alcampo con Gran Vía: antes de la llegada del nuevo plan de movilidad, este trayecto de ida y vuelta tomaba 36:15 minutos, una cifra que ahora llega a los 59:12; es el caso más extremo, mientras que en el mejor de los ejemplos, el del recorrido que une el Zaidín (en avenida Dílar) con el centro, la diferencia es de apenas 4 minutos.

Yendo más allá, el estudio incluso compara el tiempo que se tarda en completar un trayecto en autobús y ese mismo trayecto a pie. Y aquí llega una de las sorpresas del análisis, que asegura que para el recorrido de la Avenida Cervantes-Catdral -ida y vuelta-, se invierte menos tiempo a pie que en el transporte público, concretamente 2 minutos menos. Prácticamente la misma diferencia que hay entre hacer el trayecto de la carretera de Málaga-Catedral en autobús o andando:

• Avenida Cervantes-Catedral (ida y vuelta):
  • En bus: 45:36
  • A pie: 43:12
• Carretera de Málaga-Catedral (ida y vuelta)
  • En bus: 59:12
  • A pie: 57.36

• Imprevisible: una de las carencias del sistema según el análisis del PSOE, tiene que ver con la irregularidad en los tiempos. El informe destaca que entre un día y otro, puede llegar a haber una diferencia de tiempo en el mismo recorrido que supera los 15 minutos. Así ocurre en el trayecto que une la zona Norte (saliendo del Alcampo) con Gran Vía (llegada a Catedral). Si en el día 2 el estudio demuestra que se tardó en el trayecto de ida algo más de 36 minutos, ese mismo trayecto tomó en el día 5 de 21 minutos.

• Incómodo: otra de las conclusiones a las que llega el estudio es que el nuevo sistema de movilidad es incómodo, puesto que supedita la movilidad a una serie de transbordos que dan como resultado que el usuario pase entre un 30% y un 40% de su tiempo esperando el autobús. En este sentido, de nuevo el trayecto que une el Alcampo y la Catedral vuelve a salir el peor parado, puesto que sus usuarios llegan a esperar hasta el 49% del tiempo que invierten en utilizar el transporte público.

"Torres Hurtado y Telesfora tienen que subirse al autobús y empatizar más con el usaurio", concluyó ayer Francisco Cuenca, quien echó de menos la existencia de estudios oficiales realizados por el propio Ayuntamiento de Granada. Del mismo modo, el portavoz socialista volvió a preguntarse por el coste real del nuevo sistema de autobuses.

LA ALTERNATIVA

A preguntas de los periodistas, el socialista aseguró que su partido no habría desarrollado un sistema de transporte como el que actualmente está vigente en la ciudad: "nosotros tenemos una visión más amplia de los barrios y una concepción metropolitana de la movilidad", aseguró Cuenca.

Sin datos definitivos sobre el coste de la Línea de Alta Capacidad, el portavoz socialista no se atrevió a plantear una alternativa más concreta a la movilidad granadina: "tenemos que abrir los cajones y conocer el estado económico del sistema de transporte", sentenció Cuenca, quien además criticó que el Ayuntamiento de Granada no haya realizado por sí mismo un estudio en profundidad sobre cómo la LAC ha cambiado la movilidad en la ciudad.