Un hombre que duplicaba la tasa de alcohol estrella su coche contra una vivienda de Guadix

La pasada madrugada del 10 de agosto, se produjo un aparatoso accidente con daños materiales en una vivienda con el resultado de un herido leve trasladado al hospital de alta resolución de Guadix, en el que el conductor duplicaba la tasa de alcohol.

El accidente se produjo en la calle Salitre de San Miguel, y consistió en una colisión entre un turismo y una vivienda. La Policía Local asistió al herido que presentaba una brecha en la cabeza y una muñeca dislocada, alertando a los servicios sanitarios que se desplazaron al lugar del accidente, asistiendo al herido y siendo trasladado al Hospital de Alta resolución de Guadix. Posteriormente se identificó al conductor del turismo que no había sufrido lesiones y tras realizarle la prueba de alcoholemia, se comprobó que duplicaba la tasa de alcohol permitida, por lo que se le propuso para sanción por vía administrativa por circular un vehículo bajo los efectos del alcohol.

Respecto a la vivienda, se produjeron daños en la cerca y mobiliarios de la terraza, y se informó a los propietarios de los trámites y procedimiento legal oportunos para la reparación de los daños materiales ocasionados por el vehículo siniestrado.

Hasta el lugar del accidente, una vez estabilizada la situación, se desplazó el concejal de Seguridad Ciudadana y Movilidad, Antonio Valverde, con objeto de interesarse por los heridos y los daños ocasionados en la vivienda. Señalar también la colaboración de la Guardia Civil durante la intervención, dada la excelente coordinación existente entre ambos cuerpos policiales.

Desde la Policía Local de Guadix se recuerda que "el alcohol multiplica por 5 el riesgo de accidente por encima del límite legal, y por más de 100 cuando se sobrepasa el límite penal (1,2 gramos de alcohol por litro de sangre y/o 0,60 miligramos en aire espirado)", recalcando también que "las drogas, estupefacientes y sustancias psicotrópicas multiplican el riesgo entre 2 y 7 veces respecto de los conductores no consumidores". En este sentido, según datos ofrecidos por la Dirección General de Tráfico, acabar con la conducción bajo los efectos del alcohol y otras drogas contribuiría a reducir la siniestralidad vial mortal hasta un 50%.