Un lobo amarillo que ya no tiene piel de cordero
El Granada afrontará esta noche uno de los compromisos más difíciles del año, ante un desmelenado Villarreal, y en un campo donde ni siquiera el Madrid ha obtenido la victoria.
Bien se podría pensar que cuando uno vive su tercera temporada consecutiva en Primera, y se mide a un recién ascendido, el cartel de favorito cuelga de manera automática sobre su cuello; pero -en este caso concreto- sería una temeridad, y una falta total de perspectiva y noción de la realidad; pues este Villarreal no es un ex Segunda al uso. Hablamos de un grupo que trata muy bien la pelota, que es valiente y atrevido, y que no suele achantarse, mucho menos en su feudo.
El conjunto de Marcelino ha protagonizado un inicio de temporada impropio de una escuadra que el año visitaba los campos de la Liga Adelante, como hasta hace no mucho era el caso del Granada. De hecho, su retorno a la élite del fútbol español se saldó con tres victorias consecutivas, y el submarino amarillo no conocía la derrota en el campeonato hasta esta última jornada, en la que cayó por 1-0 en el Benito Villamarín.
Al menos, ese factor cae de lado rojiblanco, ya que los de Alcaraz sí vienen lanzados de dos partidos muy completos en casa, y en los que han dejado una más que aceptable sensación de criterio futbolístico; especialmente en el último, donde -además- el resultado acompañó, y El Arabi disipó de 'dos plumazos' el fantasma de la sequía goleadora del equipo, que les perseguía desde la bellísima volea de Piti en Vigo. Precisamente el catalán sigue siendo una de las principales bajas del conjunto nazarí, al que además se suman el malagueño Recio, y el mallorquín Dani Benítez, ambos con lesiones musculares en los isquiotibiales producidas en el choque frente al Athletic. El lugar de ambos en la lista lo ocuparán Yebda, que regresa a la convocatoria, y Campos Toro, que se estrena en estas lides.
Por parte del Villarreal sí jugará la estrella, Giovanni Dos Santos. El ex barcelonista, que sufrió una fractura no desplazada de la base de falange proximal en el dedo meñique de la mano izquierda, tendrá que llevar una férula durante algo más de seis semanas, pero ello no le impedirá -en principio- entrenar y competir con normalidad. Los que sí se han caído por lesión han sido Jaume Costa, con un esguince de tobillo, y Farinós, que aún se encuentra en proceso de recuperación tras ser intervenido de una resección de un espolón en el tendón de Aquiles de la pierna derecha.
Los locales llegan al partido en una más que meritoria cuarta posición, con dos puntos de ventaja sobre sus inmediatos competidores en la última plaza que da derecho a Champions League, y a tan sólo dos del Real Madrid, equipo al que ya tuvo contra las cuerdas en su propio estadio. El Granada, por su parte, ha conseguido respirar tranquilo esta semana, en el decimosegundo puesto, y cinco puntos por encima del descenso, pero el colchón no es tan grande como parece, ya que desde el décimo al decimoséptimo sólo existe una orquilla de tres puntos, por lo que para los nazaríes es muy importante puntuar.
El último precedente en Primera División entre ambos disputado en El Madrigal se remonta a la segunda vuelta de la campaña 2011/2012, en el que los castellonenses lograron imponerse por 3-1 a un Granada en el que -por aquel entonces- militaba Uche, que -a pesar de encontrarse en el club en calidad de cedido procedente del Villarreal- disputó algunos minutos, y que hoy vivirá por primera vez este duelo con la elástica amarilla.