Una actuación coral que permite al Covirán Granada reencontrarse con la victoria
Solo Manu Rodríguez se quedó sin puntuar en el conjunto rojinegro, que ganó tres de los cuatro cuartos ante el CB Prat
No hay nada como una victoria armoniosa para acabar con una racha de tres derrotas consecutivas. El Covirán Granada volvió a ganar este sábado, en su visita al CB Prat, y lo hizo con una actuación coral que le permitió salir vencedor en tres de los cuatro parciales, incluyendo el primero, la asignatura pendiente del cuadro nazarí en las últimas jornadas.
El conjunto dirigido por Pablo Pin se impuso por un ajustado 19-20 en los primeros diez minutos del choque, cayó por 17-16 en el segundo y, tras el descanso, solo aumentó su ventaja. La diferencia tras el intermedio se fue hasta los cinco puntos (13-18), mientras que el último cuarto acabó con un contundente 12-22 a favor del plantel rojinegro.
Y todo ello fue logrado gracias a una gran actuación colectiva que se refleja en los registros individuales de cada jugador. Alejandro Bortolussi (11), Guille Rubio (10), Joan Pardina (12) y Carlos de Cobos (11) alcanzaron las dos cifras en su casillero de puntos, una parcela en la que todos acapararon algo de protagonismo a excepción de Manu Rodríguez, que fue el único jugador nazarí que se quedó sin anotar.
Así, acumularon una valoración de 75 para el cuadro nazarí, con mención especial de nuevo para Guille Rubio y Joan Pardina. Ambos fueron los jugadores más valorados del encuentro en el Covirán Granada, con 17 y 15, respectivamente, seguidos por un Devin Wright inadvertido en lo estadístico. El pívot gallego obtuvo 12 de valoración gracias a sus cinco puntos, 10 rebotes -el mejor en este apartado junto con Wesley Sena- y tres tapones, lo que llevó a Pablo Pin a asegurar tras el encuentro que su actuación fue “muy muy importante”.
SERGIO OLMOS, DE NUEVO EN CANCHA
Aunque la mejor noticia para el conjunto granadino, al margen de la victoria, fue el regreso a la competición de Sergio Olmos. El pívot eldense, que es una de las piezas esenciales en el equipo de Pablo Pin, volvió a sumar minutos tras pasar seis partidos en el dique seco por una fascitis plantar y logró, incluso, adornar sus casilleros.
Obtuvo una valoración negativa y su entrenador advirtió que “ha estado falto de ritmo”, pero consiguió sumar un punto, capturar un rebote y poner un tapón en los ocho minutos que estuvo en pista. “Hemos intentado meterle unos minutos para que él se sienta también dentro de la rotación”, indicó Pin, que ya cuenta con otro efectivo más para el tramo final del curso pese a que le trate con la precaución que le caracteriza.