Una granadina en La Palma: "Los evacuados lo llevan mal, no saben qué se van a encontrar a la vuelta"

La médica María Labrador, que comenzará a trabajar este lunes en las zonas de recepción habilitadas tras la erupción en Cumbre Vieja, cuenta en GranadaDigital cómo se está viviendo el día a día

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La lava ya ha afectado a más de un centenar de casas | Foto: EP
Jero Camero
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La reciente erupción del volcán de la Palma mantiene a toda España en vilo. Han sido varios los municipios que han tenido que ser desalojados por su proximidad a Cumbre Vieja, lugar por el que la lava irrumpió en la superficie. En GranadaDigital nos hemos puesto en contacto con María Labrador, médica que reside y trabaja en la isla, para que nos cuente cómo se están viviendo estos primeros días.

"Sobre todo los evacuados lo están llevando regular. Son municipios enteros que han sido desalojados y que no saben qué se van a encontrar cuando vuelvan", comenta sobre las últimas horas en la zona. Aunque la erupción se produjo el domingo, María comenta que el operativo se ha estado gestando desde hace tiempo.

Se han establecido dos puntos de campaña para facilitar la llegada de todos los evacuados y poder tener un mejor control de aquellos que necesiten asistencia médica: "A mi me avisaron el domingo de forma oficial, pero me llamaron con anterioridad para decirme que entraba en una lista para ayudar en caso de que sea necesario".

María Labrador, médica en La Palma | Foto cedida por María Labrador

Las últimas 48 horas en la Palma han tenido mucho trajín. Desde primera hora de la mañana del domingo los movimientos sísmicos se intensificaron en los momentos previos a la ruptura de la falla. Tras la erupción, todos los planes de emergencias se precipitaron: "No nos han dado ninguna predicción aproximada sobre cuánto estaremos. Esta semana la tenemos cubierta seguro, luego iremos ganándole tiempo a la situación".

La "angustia" de Rayko Lorenzo, un palmero en Granada

En el caso contrario nos encontramos a Rayko Lorenzo. Este palmero residente en Granada asegura que la peor parte es estar lejos: "Mis tíos están muy próximos a la zona, por suerte mis padres viven en la zona oeste de la isla. Se vive con mucha angustia".

Una de las peores sensaciones es el no saber cuánto puede durar esta situación. Según las últimas aproximaciones de los vulcanólogos, se podría alargar entre varias semanas y un par de meses, todo dependiendo de cómo se desarrolle la falla que ya hay abierta y siempre que no se produzcan más.

Ya se han quemado un centenar de casas y la situación sigue escalando. "Al menos es una zona, la más próxima al lugar de erupción, que no está demasiado demasiado poblada. Hay muchas segundas residencias y son casas que están aisladas unas de otras", comenta Rayko. Aun así, han sido varios los municipios desalojados por precaución ante el impasible avanza de la lava.

El problema ya no es solamente la lava, también la nube de polvo y los gases expulsados a la atmósfera están dificultando todas las labores. "Este lunes se han suspendido seis vuelos a La Gomera. Hay mucha incertidumbre, pero así es la naturaleza", explica.