Unas fiestas de barrio que nada tienen que envidiar

Las fiestas populares de los barrios de Granada no le tenían nada que envidiar en un pasado a las de muchos municipios de la provincia. Las plazas y calles de los distritos se llenaban de actividad vecinal, mientras se presumía con orgullo de pertenecer a esa zona de la ciudad. Nos podemos hacer una idea de la magnitud delas celebraciones si en la actualidad le echamos un visitado a celebraciones como las del Zaidín o La Chana.

Si recorriésemos la plaza de Gracia a principios de septiembre hace 90 años, nos encontraríamos a carreras de cintas, concursos de carros engalanados o a la patrona del barrio procesionando por sus calles. Las fiestas del barrio de Gracia del año 1927 comenzaron el día ocho de septiembre a las 8 de la mañana con el despertar de la música. La banda de música del Ave María interpretó alegres dianas, mientras a su paso se disparaban cohetes y y se dibujaba el camino a recorrer con palmas reales.

Por la tarde carreras de cintas en las que se inscribieron los siguientes ciclistas: Juan Anguita Romero, José Ortega Carvajal, Fernando Ortega Rodríguez, José Rodríguez Hita, Ricardo Álvarez Gálvez, Manuel Millán González, Miguel Merlo Galdeano, Miguel Fernández Herrera, Francisco Peña Fernández, Antonio Morales Martín, Manuel Alguacil Carrascosa, José Beltrán Mochón, Antonio Lara, Pascual Pérez, Francisco Yáñez, Ángel Guerrero, Alfonso Fernández Ortega, Manuel Moral Sánchez, Miguel Sánchez Molina, Martiano Tamayo y Fernando Calvo Ferrer.

Ya por la noche hubo tiempo para la diversión de los vecinos. Un inmenso gentío llenó la plaza de Gracia y calles adyacentes. Frutos de otoño, los clásicos jayuyos, puestos de frutas y tortas se exponían en los puestos montados para la ocasión. Los columpios, llenos de niños hicieron el agosto en el barrio del centro de Granada. Faroles antiguos y banderines diversos exornaban la calle de Gracia. En la caseta instalada en el centro de la plaza hubo una verbena, en la que un sexteto de bandurrias amenizó el acto.

Y el día nueve de septiembre se pudo ver por las calle el concurso de carros engalanados, para más tarde dar paso a la procesión de Nuestra Señora de Gracia, que hizó el siguiente recorrido: Salida del Seminario, calle de Gracia, Puentezuelas hasta el Darrillo, Párraga, placeta de San Antón, Alhóndiga, Tablas, Puentezuelas, Recogidas, Solarillo a su iglesia.

Una fiestas que a las doce de la noche se podían confundir con la clausura del Corpus, debido a la gran traca valenciana que se hizo explotar como punto y final a estas fiestas de barrio.