UPYD apuesta por la incompatibilidad de cargos para luchar contra la corrupción
El grupo político considera que la nueva reforma de la Ley de Transparencia es insuficiente
El cabeza de lista de UPyD al Congreso de los Diputados, Fernando Gracia, ha expresado que "la transparencia, y la lucha contra la corrupción son uno de los pilares básicos de UPyD. La regeneración democrática no es sino que las instituciones políticas funcionen y cumplan con su obligación constitucional”. Además subraya que su formación política es la única que ha luchado en serio contra la corrupción “con hechos y no sólo con palabras”. Según Gracia su partido "se ha gastado 265.000 euros para llevar a los corruptos a los tribunales, personándonos como acusación particular en torno a 20 causas penales”.
El candidato de UPyD aboga por una incompatibilidad del cargo de alcalde y concejal con la condición de diputado, senador o parlamentario autonómico y parlamentario europeo, limitación de los mandatos a un máximo de dos legislaturas y fin de las puertas giratorias”. “Todas estas medidas son imprescindibles para regenerar la democracia y restaurar la confianza ciudadana”, ha añadido.
Considera que la nueva reforma de la Ley de Transparencia es insuficiente, de aquí que sean necesarias medidas para garantizar la publicidad, hacerla accesible y comprensible a los ciudadanos creando una ventanilla única mediante la cual el ciudadano puesta obtener información acerca, no solo de empleo público y subvenciones, sino del perfil del contratante con toda la información relacionada, documentación relativa a los procedimientos de contratación cerrados, abiertos y convocados. En definitiva, crear una plataforma de “datos abiertos” (open data) para que los ciudadanos puedan ejercer su derecho de acceso a la información en poder de las Administraciones”.
Para Gracia estas medidas "son imprescindibles para regenerar la democracia, restaurar la confianza ciudadana, racionalizar las administraciones públicas y suprimir el despilfarro en duplicidades eliminando entes superfluos que se utilizan por los viejos partidos para colocar a sus allegados”.