UPyD aspira a que el patrimonio de Granada sea un “motor económico”

“El valor patrimonial de Granada es fundamental”, opina Manolo Serrano, número cinco de la lista de UPyD a las municipales. Por eso la formación magenta aboga por rehabilitar y realzar lo que está “muerto de risa” y conseguir que el conjunto de bienes culturales de la ciudad se convierta en un “motor económico” y en un generador de empleo.

En la presentación de las propuestas de UPyD en materia de patrimonio, Manolo Serrano ha destacado que Granada tiene la suerte de reunir tesoros de todo tipo, “desde vestigios romanos como los que se encontraron en Los Mondragones, hasta arte actual que representan los alumnos que cada año salen de Bellas Artes”.

Todo eso, incide el candidato, es un foco generador de riqueza y de empleo. O lo sería, si se apostara por ello de verdad. “Implicaría trabajo para gestores culturales, conservadores, restauradores o guías turísticos”, enumera.

El problema, añade, es que aquí todo eso “no se tiene en cuenta, no se valora ni se defiende”, una actitud “deplorable” por parte del gobierno local (y del resto de administraciones) que tiene en el Museo Arqueológico uno de sus peores ejemplos. “Cerró hace cinco años para hacer una obra menor que ni siquiera tenía por qué implicar ese cierre y lleva así desde entonces, muerto de risa porque nadie ha hecho ninguna gestión. Eso es dilapidar nuestro patrimonio, como se ha hecho también en la Casa Ágreda”, recuerda.

Por su parte, la candidata a la Alcaldía, Mayte Olalla, ha puesto el acento en que el Patronato de la Alhambra tiene inmovilizados siete millones de euros, procedentes de los beneficios que genera el monumento nazarí, y no los está utilizando para lo que marca su propio Plan Estratégico 2010-2015, que no es otra cosa que “darle valor a nuestro patrimonio”.

“No tiene ningún sentido tener nuestros monumentos muertos de risa”, apunta la concejal, que también se ha referido a los yacimientos de Los Mondragones para decir que “con un gasto de 150.000 euros se podrían exhibir como un atractivo turístico y eso a su vez generaría probablemente más visitas y más pernoctaciones”.

Casos como el citado o como el de la muralla zirí del Albaicín ponen de manifiesto que Granada contaría “con un potencial turístico y económico enorme si tuviera activo todo su patrimonio”, algo que la haría atractiva al turismo “no sólo como destino para pasar un fin de semana, sino posiblemente para estar aquí entre siete y diez días”.