Las vacaciones favorecen la plasticidad neuronal

La fatiga mental, producida por las prolongadas horas de trabajo, puede afectar negativamente en la capacidad de nuestro cerebro para ejecutar tareas importantes como la planificación y el pensamiento crítico. “Las vacaciones tienen una gran cantidad de impactos positivos en nuestra salud y el bienestar de nuestro cerebro. Cambiamos nuestras rutinas, disminuyendo el estrés y aumentando las actividades físicas y de ocio, que liberan dopamina y propician la mejora de nuestro estado de ánimo. Además, los entornos nuevos y las experiencias estimulantes favorecen la plasticidad neuronal, que es la facultad del cerebro para recuperarse y reestructurarse”, expone María José Aróstegui, psicóloga del Hospital Vithas Granada.

Los días de descanso son una valiosa oportunidad para reducir el estrés laboral, uno de los factores que pueden desencadenar la depresión. “El estrés genera una respuesta a nivel bioquímico, liberando sustancias neurotóxicas como el cortisol. Sostenido en el tiempo, puede provocar alteraciones en el sueño, en el aparato digestivo, en nuestro corazón, en el sistema inmunológico o afecciones en la piel, entre otras. El descanso nos ayuda a prevenir el estrés crónico, uno de los factores de riesgo de la depresión”, apunta la doctora Carmen Maura, psiquiatra del Hospital Vithas Granada. Esta especialista también señala que existen estudios recientes que miden la importancia de las vacaciones en nuestro estado de salud general, destacando la mejora en la satisfacción vital, en el agotamiento y en las molestias físicas.

La buena higiene de sueño es uno de los hábitos que se suelen practicar durante las vacaciones y que, según los expertos, se deben mantener durante todo el año. “En pacientes con un sueño adecuado, se ha demostrado un mejor rendimiento en múltiples dominios cognitivos, como la memoria, la atención o las capacidades ejecutivas. La falta de sueño, las alteraciones emocionales y el estrés, influyen, por ejemplo, en el aumento de episodios de migraña en pacientes que sufren esta patología”, explica el doctor Javier Pelegrina, especialista en neurología del Hospital Vithas Granada.

Además, el Dr. Pelegrina expone los beneficios para el cerebro de sostener ciertos hábitos de vida más allá de las vacaciones, como la práctica deportiva. “El estrés influye negativamente en todas las enfermedades neurológicas y en un correcto funcionamiento de nuestro cerebro. Suele ser el desencadenante más frecuente de crisis epilépticas en personas con esta patología y factor de incremento de crisis de migraña, para quienes padecen esta enfermedad. Es importante evitar situaciones estresantes e incorporar a nuestros hábitos de vida actividades como la práctica de ejercicio físico de forma regular. En pacientes con la enfermedad de Parkinson se ha demostrado que el ejercicio alivia los síntomas motores como la lentitud y la rigidez, y aumenta la capacidad aeróbica”, subraya el especialista en neurología.

Por último, los expertos también señalan como fundamental la desconexión digital. “Estar siempre pendiente de los nuevos emails que entran al correo o los WhatsApp de trabajo puede generar ansiedad. Durante las vacaciones debemos evitar responder cuestiones laborales para conseguir que nuestro cerebro descanse y desconecte. Desactivar las alertas puede ser una buena opción para evitar consultar constantemente el teléfono móvil”, explica la psicóloga María José Aróstegui.